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Mis películas favoritas sobre fantasmas. Sexta parte: Dark Water

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6.1.-El Director.

        Hideo Nakata (Japón, 1961) es uno de los cineastas nipones más valorados en su nación en materia de filmes de terror, destacando entre sus colegas en medio de un país famoso por su larga tradición en historias de este tipo y que desde hace rato cuenta con artistas especializados al respecto en materia de tal cine.  Su talento innato en especial a la hora de crear atmósferas viciadas que mantienen al espectador en un constante estado de alerta, expectante y que sin dudas puede causar más de un sobresalto, ha hecho que Hollywood como ya ha pasado con otros directores de ultramar, lo haya llamado a sus filas para trabajar en al menos una de sus producciones.
       Debutó tras las cámaras con tres mediometrajes de miedo con carácter autoconclusivo y de temática sobrenatural, bajo el título genérico de Honto ni atta kowai hanashi: Jushiryou en 1992, que en su conjunto a lo más superaban una hora de metraje.   A esta obra, al parecer hecha para la televisión o para el mercado directo al video casero (alternativa muy extendida en el país del Sol Naciente), recién en 1996 le sucedió la siguiente labor de Nakata como artesano del séptimo arte, Joyû-rei (Ghost Actress).
       
Hideo Nakata.
       Sin embargo fue con su tercera incursión para las grandes salas, Ringu (1998), que por fin consiguió la consagración a través de otra historia de fantasmas, tal como le gusta tanto a su gente, a tal punto de que el éxito de su largometraje logró traspasar las fronteras geográficas, culturales y lingüísticas, siendo su primera obra conocida en Occidente y que fue acogida con muchas ganas.  El argumento versa acerca de una espantosa maldición, en torno al fantasma vengativo de una niña; difícil resulta olvidar a la entidad saliendo nada menos que de la pantalla de un televisor, que reproduce una vieja cinta de VHS.  Pese a lo inusual de sus ideas, la película acaparó a tal punto la atención de buena parte del mundo, que de inmediato comenzaron a hacerse secuelas.  Un año después del estreno de este título, el mismo Nakata se encargó de realizar la siguiente entrega de dicha serie.
          No pasó mucho tiempo para que los gringos se dieran cuenta del enorme potencial detrás de la saga de Ringuy en 2002, de la mano del versátil Gore Verbinski, llegó el remake estadounidense, una potente superproducción que para un servidor resulta lejos mucho más efectiva que la “tosca” película oriental.  Interesante resulta ser que la excelente acogida que tuvo la versión norteamericana, tanto de crítica como de público, hizo que en 2005 se hiciera una segunda parte y para ello se contrató nada menos que a Nakata para que la dirigiera.  El buen resultado fue notorio, demostrando el maestro nipón su capacidad para hacer una cinta al estilo gringo, sin perder su propio sello. La saga hollywoodense recibe el nombre de The Ring, siendo conocida en Latinoamérica como El Aro y en España bajo el nombre de La Señal.
         De 2007 data Death Note: L, change the WorLd, filme que adapta a la imagen real un popular manganime llamado Death Note, acerca de un chico que encuentra un cuaderno en el cual si escribe el nombre de una persona, esta morirá.
         Aparte de seguir trabajando para el cine de su patria, cayó en la mira de productores británicos y en 2010 realizó un thriller llamado Chatroom, basado en una obra de teatro acerca de un grupo de jóvenes que a través de internet se alientan unos a otros a realizar acciones transgresoras, hasta que el entusiasmo los supera y terminan por caer en el crimen.
         En 2012 se encargó de hacer The Suicide Forest (El Bosque de los Suicidas), acerca de una sitio real de Japón que se dice está cargado de espíritus malignos y al que las personas acuden a matarse.  Con posterioridad, tan solo el año pasado, los gringos no resistieron las ganas e hicieron su propia versión de todo esto, con actores tanto occidentales como orientales, puesto que está filmada nada menos que en Japón.
          A la fecha, Nakata cuenta con la importante suma de 25 producciones.


6.6.-La Película.

           Realizada en el año de 2002, es una inusual historia de fantasmas (o más bien, sobre un fantasma), al menos tal como estamos acostumbrados en nuestra cultura, que en su guión como en su factura no deja de ser notable y además emotiva.  Debe saberse además que se encuentra basada en una novela de Koji Sosuki (considerado según algunos como el Stephen King japonés), el mismo escritor detrás del libro en el que Ringu se inspiró. 
           Su trama es la siguiente: una tímida mujer que apenas ha logrado salir de un matrimonio infeliz, junto a un marido de personalidad mucho más fuerte que la suya (que al parecer es todo un déspota), llega junto a su hijita en edad preescolar a vivir a un viejo y feo edificio en busca de una nueva vida.  El amor entre la madre y la pequeña es evidente, pues en la práctica se tienen solo la una a la otra para ser felices, razón por la cual este lazo incondicional será tanto el leiv motiv de la cinta, como toda una oda al amor filial y maternal.  Cuando llegan a tomar posesión del departamento, que la protagonista luego convierte en un acogedor hogar pese a lo decrépito del lugar, encuentra una filtración de humedad en el techo sobre el cuarto de su unigénita.  Lo que parece solo un problema menor por un desperfecto con las cañerías en el piso de arriba, en realidad guarda relación con el espíritu de una pequeña muerta, que no deja de acosar a la familia.  La manera de cómo la pobre dama enfrenta esta situación, a la par de sus intentos de recuperar su independencia y de defenderse ante los ataques legales de su ex, resulta sin dudas impactante.
         Sin dudas que Dark Water es un largometraje que no solo puede llegar a ser aterrador, sin tener escenas de sangre, ni muertes (bueno, salvo el de la infante que pena en la inmensa mole en la que vive la protagonista), sino que también es hermoso.  Pues en lo que concierne al aspecto más aterrador suyo, se encuentra un fantasma que si bien la mayoría de las veces se divisa solo en planos fugaces (en los que un uso efectivo de la iluminación ayuda mucho), atiende al temor de mucha gente a todo tipo de señales que apenas logramos divisar, que nos hacen creer en la existencia de un Más Allá tenebroso.  Por otro lado, vez que se manifiesta de manera más explícita el espíritu para “atacar” a madre e hija (las únicas víctimas de su poder), los escasos medios con los que los responsables de llevar a cabo esta producción, están tan bien aprovechados, que no se echan de menos grandes efectos especiales para armar un filme efectivo. 



      El agua ahora no como un elemento que da vida, ni como algo purificador, sino como una representación de la muerte (de ahí el nombre en español que hace referencia al agua turbia o sucia), ya que es capaz de arrasar y/o corroer todo (o casi todo) de manera rápida o de forma lenta, pero efectiva, es un detalle interesante a la hora de apreciar esta película; pues a medida que va creciendo la fea mancha que pende (como un verdadero peligro) sobre la cabeza de esta pequeña familia, la suerte de sus integrantes va desmejorando tanto por la intervención de lo sobrenatural, como por la misma fragilidad humana.  Si bien la madre es una persona cariñosa, es evidente su personalidad errática y que incluso la hacer convertirse en una progenitora inepta; sin embargo nadie es perfecto y pese a que en más de una ocasión esta actúa con ineptitud, el amor que tiene hacia su hija logra otorgarle rasgos de heroísmo, como el toda mujer en la vida real puede llegar a demostrar cuando se trata de proteger a los suyos.
              En lo que concierne al drama por el que pasa la mujer, sin amigos y a lo más una tía con la que no tiene mayor confianza, encontramos el tema de la soledad, que como el agua también es un elemento destructor. No obstante existe el apoyo inesperado de quienes sienten piedad hacia los necesitados, bajo la figura de un caritativo abogado (lo que contrasta con la imagen muchas veces negativa que se da a esta profesión en muchas películas).  Pero no solo encontramos acá esta ausencia de compañía en el caso de la madre, sino que también ello se encuentra desde la primera imagen (un significativo flashback) en el caso de la chiquilla, que luego por culpa de la incompetencia de sus padres morirá sola…buscando luego quién llene para la eternidad ese vacío, que ya transformada en un fantasma la hace tener hambre de amor.  El drama por el que pasó/pasa la niña muerta y la otra chica, la viva, se encuentra profundamente relacionados, pues ambas han tenido padres que han cometido el error de abandonarlas en mayor o menor medida (incluso el mismo personaje central del niño sufrió de esto); luego, pese al error de sus padres, hayamos la posibilidad de la redención, que en todo caso no son los pequeños inocentes los que deben expurgar culpas que no poseen, sino que los grandes. 
                La música estuvo a cargo de un verdadero maestro de la música japonés, Kenji Kawai, alguien a la altura de un Morricone tanto por las bellas melodías suyas y su capacidad para pasar de un estilo a otro, como por la inmensa cantidad de partituras que ha llegado a componer (que incluye hasta soundtracks de videojuegos).  Esta no ha sido la única colaboración de ambos.
                 En 2005 se hizo la versión gringa de rigor de esta obra, bastante buena por cierto.  Dirigida por el brasileño Walter Salles (un cineasta digno de respeto), contó con la participación de estrellas tales como la oscarizada Jennifer Connelly, John C. Reilly y Tim Roth.  El apartado musical lo hizo otro genio como lo es Angelo Badalamenti. 

Afiche de la versión gringa.

La historia personal que compartimos con los demás.

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     El (casi) recién pasado 26 de junio se cumplieron 109 años del nacimiento de Salvador Allende, presidente socialista de la República de Chile, elegido democráticamente por sus conciudadanos y que murió heroicamente en el Palacio de la Moneda (sede del poder ejecutivo de nuestro país), defendiendo sus ideales del asedio militar de derecha que llevó al país a casi 17 años de dictadura bajo el mando de Pinochet.  Por mucho que uno no milite con el pensamiento de Allende, negar su importante papel dentro de la historia chilena resulta ser una verdadera perogrullada.  Hoy en día el mandatario que estuvo en el gobierno entre 1970 y 1973, hasta el Golpe de Estado perpetrado por sus adversarios (apoyados por los poderes fácticos gringos que no querían otro país “comunista” en Latinoamérica, luego de la Revolución Cubana) y que le costó la vida durante el espantoso bombardeo a la Moneda por parte de los militares, por fin ha tenido los honores respectivos en su patria, tras tantos años de injurias a su memoria (esto mientras Pinochet estaba al mando).  El resto del mundo mientras pasaba lo anterior, ya llevaba rato concediéndole los respectivos tributos.  Es así que como muchos presidentes chilenos, ahora posee su propia estatua en las cercanías del edificio que le vio morir y asimismo su casa es un museo, que guarda muchos recuerdos de su paso por este mundo, entre otros honores que le concedieron como es debido.
     Cuando comienzo a escribir estas palabras estoy a horas de cumplir los 42 (¡Qué viejos estamos!... y a mucha honra)[1] y si miro hacia atrás dentro de mi propio pasado, puedo reconocer sin vergüenza que hasta más o menos buena parte de mi segunda década de vida, Allende no era alguien respetado por mí.  La ignorancia y los prejuicios de la juventud (educado además por un padre que me hizo creer que todo lo relacionado con el “comunismo” era sinónimo de algo siniestro), me llevaron a cometer tales estupideces, lo que gracias a Dios con el tiempo pude superar en la medida que las experiencias (y en especial la misma gente que tuve la suerte de conocer) y mi propia educación (formal e informal), me permitieron dejar atrás (no en un 100% para ser exacto) a ese Elwin de antaño.  Queda claro, supongo, mi aprecio actual hacia la figura de Salvador Allende (más encima tío de mi queridísima escritora Isabel Allende).
      En noviembre de 2014 asistí como tengo acostumbrado todos los años a la FILSA (Feria Internacional del Libro de Santiago), importante evento cultural al que me encanta ir, cuando para mi sorpresa me encontré con el hecho de que el escritor nacional Roberto Ampueroestaba firmando sus libros.  Luego de comprar uno de ellos, El último tango de Salvador Allende, rápidamente me puse a la fila para que me lo dedicara, pues me había leído algunas de sus novelas de Cayetano Brulé y las había disfrutado mucho; así que no me podía perder esa oportunidad.  Ampuero fue muy amable conmigo y pude entablar una entretenida conversación con él…

     - Le doy a leer sus libros a mis alumnos.- Le dije entusiasmado.
     - ¿Sí? ¿Y se los leen completos? ¿Les gustan?- Muy curioso por saber de mi “experimento lector”.
     - Bueno, los que se dan el tiempo para ello y no limitarse a buscar resúmenes en Internet, claro que sí.- Me gustó cómo se puso a reír.- ¿Sabe? Tengo un blog y en una de mis entradas subí algo sobre usted…
     - ¡Qué bien! Bueno, si te interesa puedes agregarme a Facebook.
     - Gracias, pero no tengo.
     - Entonces puedes seguir mi Tweeter…
      - Tampoco uso esa red social.  Pero cuando quiera se puede meter a mi página, El Cubil del Cíclope (no podía evitar hacerme publicidad y menos con una estrella como él ¿No?).

       No sé si alguna vez Roberto Ampuero ha entrado a mi blog, pues nunca me ha dejado comentario alguno, tampoco se ha hecho seguidor mío. Sin embargo, para mi felicidad el primer texto que escribí sobre él lleva largo tiempo entre las 10 entradas más populares. 
       Por supuesto que no dudé en sacarme una foto con este importante autor aquella vez, la que rescato ahora de otro post en el que lo menciono.
       Publicada por primera vez en 2012, El último tango de Salvador Allende de inmediato ganó notoriedad, convirtiéndose en un éxito de ventas, pues su mismo título no deja de ser una invitación a conocer, de una manera hasta el momento inaudita para muchos, a tan grande personaje histórico.  Sin embargo no estamos hablando de una mera biografía novelada del político, puesto que el volumen en cuestión está armado de tal manera, que Allende no es el único personaje principal, si no que comparte protagonismo con dos más; no obstante uno de estos dos últimos, más bien al cumplir el papel de narrador testigo, toma un papel secundario.  Debido justamente a la complejidad de esta obra, que en todo caso se lee con rapidez (como bien acostumbra a hacer su autor al usar una pluma ágil y divertida), se trata de un texto que fusiona elementos de la narrativa histórica con la policial. 
      En el primer caso al describirse los últimos meses (más o menos), del gobierno de la llamada Unidad Popular liderada por el mandatario, nos encontramos frente a una narración que se detiene en las problemáticas de dicha época, con sus conflictos debido a la fuerte oposición por parte de la derecha y que llevó al deterioro sistemático de su gobierno; ello  luego sirvió como excusa a la intervención de los militares, que supuestamente apoyaban al presidente (entre ellos el mismo Pinochet).  Luego la parte policial está presente en la figura del coprotagonista, quien en el Chile de mediados de los noventa (y también durante un breve periodo en Alemania), realiza una investigación de carácter muy personal y que para su sorpresa compromete de manera muy grave a unos cuantos, lo que hacer peligrar su propia vida.   Como era de esperarse, ambos focos de la narración convergen entre sí, de ahí el título de la novela.  Dichos contextos se van alternando para hacer un retrato del Chile de buena parte de la segunda mitad del siglo XX, tanto desde el punto de vista de uno de sus ciudadanos, como desde la visión de un extranjero que vivió en la época de Allende y luego se encuentra con los primeros años del regreso a la democracia, pudiendo evidenciar así los cambios sociales del país.
      Los capítulos dedicados a Allende son contados en su mayoría por parte de Rufino, un amigo de infancia de este y que por una casualidad muy especial se reencontró con el gobernante, ya unos hombres maduros hace rato.  Cuando menos se lo espera se convierte en su asistente personal, para paliar de ese modo los problemas económicos por los que pasaban la mayor parte de los chilenos.  Es así que Rufino va llevando en un cuaderno el registro de su vida, junto a quien conoció de tan joven y que ahora de manera privilegiada descubre en un plano mucho más humano, que implica desnudar tanto sus debilidades (como sus numerosos romances y eso que estaba casado y tenía hijas, infidelidades de las que en todo caso sabía su esposa, con quien mantenía su matrimonio solo para mantener las apariencias), como mayormente sus fortalezas (que tienen que ver con su misma convicción, para enfrentar las duras pruebas que le tocó pasar cuando lo boicotearon). 
      Rufino y Salvador no solo comparten un pasado juntos, sino que también cada uno por su parte siguen con su mujer más por agradecimiento que por amor; de igual manera sienten una fuerte pasión por el tango, lo que da pie a varios momentos del libro, que nos muestran a un Salvador Allende aún más cercano y en especial gracias a los diálogos que hay acá entre los dos, donde se habla tanto de lo humano como de lo divino.  De este modo gracias a esta amistad podemos darnos cuenta que lo que siente el hombre común, es lo mismo que lo vivido por los “grandes” del planeta: pues por mucho que se es Alguien en la Historia (y con mayúscula), al final todos buscamos lo mismo y que no es otra cosa que cumplir nuestros sueños, acerca de lo que cada uno considera como la idea de la felicidad que tenemos.
      Luego nos encontramos con David Kurtz, ex agente de la CIA, quien durante la época de la Unidad Popular estuvo viviendo en Chile como espía junto a su familia (esposa e hija), ayudando a desestabilizar el gobierno de Allende por orden de su agencia.  Poco después de conseguido su ingrato objetivo, se volvió a su país. Ya en los noventa viudo, jubilado y con su hija recién muerta por cáncer, regresa al lugar que pretendió olvidar, para cumplir los deseos de su retoño moribunda.  Su periplo se constituye no solo en un desplazamiento físico, sino que en uno de tipo espiritual, pues en el intertanto, aparte de llegar a conocer a su hija de una manera hasta el momento inaudita para él, termina por convertirse en una nueva persona e incluso mejor de lo que hasta el momento era.
      Relevante para la evolución personal de Kurtz, viene a ser el hecho de que llega hasta sus manos nada menos que el diario personal de Rufino, de modo que es gracias a el gringo que como lectores vamos adentrándonos, a medida que va revisando este documento, en todo lo concerniente a Allende y su amigo.  La apreciaciones personales que hace el antiguo espía acerca de la narración, resultan más que interesantes; pues en la medida de que sus investigaciones van avanzando para encontrar a la persona que le han pedido encuentre, así como continua en su profundización del diario de vida, su visión del mundo va ampliándose, pese a los prejuicios que tenía hasta el momento.  Tal como llega a asumir luego, su propio pasado y el de su hija resultan estar mucho más profundamente ligados a la historia de Chile, de Rufino y de Allende.  Por lo tanto queda demostrado que vidas que en apariencia apenas guardan nexos entre sí, están interconectadas.
      En dos o tres pequeños pasajes de sus más de 300 páginas, aparece otro narrador en primera persona, un militar anónimo que nos hace ver a través de sus pensamientos lo que significa el comienzo de una de las peores etapas de la historia de Chile: el ya mencionado Golpe Militar.  Si bien no se profundiza en ello, estos capítulos sirven como nexo entre el periodo retratado en el cuaderno de Rufino y lo acaecido en el testimonio de Kurtz.
      El último tango de Salvador Allende es debido a lo anterior un libro acerca del poder de la memoria, de los lazos que creamos con los demás y que nos pueden marcar de por vida.   Es además una obra llena de momentos poderosos de intriga, acción, humor y mucha emoción, llegando a la sublimidad en varias ocasiones.  Aborda también el tema de la redención, por cuanto en más de uno de sus personajes es posible encontrar la posibilidad de enmendar los errores, pues nunca es tarde para alcanzar el heroísmo frente a la adversidad.



[1] Al final terminé y subí este texto un día después de mi cumpleaños (o sea hoy).

Feliz junto a Ampuero y mi libro suyo autografiado.

Cómo echar a perder buenas ideas.

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     Tras los éxitos de público y crítica que han sido las producciones de Netflix basadas en personajes marvelitas (las dos temporadas deDaredevil, como también las hasta el momento sendas únicas temporadas de Jessica Jones y Lucke Cage), la gente y en especial los más ñoños de la casa esperábamos con ansias la nueva entrega de estas grandes producciones: Iron Fist (Puño de Hierro).  En marzo de este año llegó el momento tan anhelado y con dolor la mayoría (incluyendo a un servidor) ha tenido que bajar los pulgares para afirmar que este título es decepcionante.  Es más, muchos lo catalogan de francamente malo, yo en cambio prefiero decir que supongo (y espero) que a lo mejor mientras se esmeraban en hacer de Los Defensores (que va a reunir a todos estos personajes en una pronto a estrenar serie), se descuidaron con este último programa en materia de guión y en especial a la hora de otorgarle la espectacularidad que tienen sus predecesoras.
      El superhéroe tuvo su debut en 1974. Creado justamente para aprovechar la popularidad de los filmes de artes marciales, de la mano de estrellas tales como Bruce Lee, tuvo como artífices a dos artistas de renombre, tal como lo son Roy Thomas en el guión y Gil Kane en el dibujo.  En pocas palabras su historia es la del único heredero de un poderoso consorcio comercial, quien tras morir sus padres llegó hasta la ciudad extradimensional de K`un-Lun y en la cual se convirtió luego de un rígido entrenamiento en un arma viviente, al aprender a dominar artes marciales místicas.   De regreso a nuestro mundo se vuelve todo un justiciero, sin dejar de recuperar los privilegios legales que le arrebató el hombre culpable de la muerte de su familia, un antiguo socio de su progenitor.  Luego de una carrera en solitario defendiendo el bien y protegiendo a los desamparados, se une nada menos que a Luke Cage, quien se convierte en su mejor amigo, formando primero la pareja conocida como Héroes de Alquiler y ofreciendo sus servicios solo para acciones honestas.  Aparte de estar presente en más de una formación de estos inusuales mercenarios de “corazón bondadoso”, ha estado dentro de nada menos que de los Nuevos Vengadores (una vez más junto a su compinche) y también ha trabajado con S.H.I.E.L.D.
Hermosa portada del número 1 de su colección.
     Pero antes de ir desmenuzando la paupérrima adaptación televisiva de las aventuras de Danny Rand, es mejor referirse un poco a sus cómics y su paso previo por la televisión.  Pues debe saberse que pese a la fama del justiciero y su largo tiempo en las historietas, solo recién en 2009 tuvo su debut en un cartoon y ello gracias a la serie humorística de corte infantil Escuadrón de Superhéroes.  Un año después recién pudo aparecer en la pantalla chica una adaptación más cercana a la de las revistas, gracias a ese otro recordado con nostalgia programa conocido como Los Vengadores: Los Héroes más Poderosos del Planeta.  En ambas ocasiones salió junto a Luke Cage.  Sin embargo donde más ha destacado este un programa  animado, ha sido en Ultimate Spider-Man, donde hasta la segunda temporada fue uno de los personajes constantes de sus guiones, una vez más en compañía de Power Man (como también se conoce al superhéroe afroamericano).  En este último título tal como el resto de los compañeros de Spidey, sale con apariencia adolescente, si bien manteniendo pese a su juventud la típica sabiduría de su formato original.
      En cuanto al show que motivó este post, pues como es habitual en las entregas marvelitas de Netflix, posee 13 episodios de alrededor de 50 minutos cada uno y con su respectiva presentación de créditos de apertura, que tampoco es muy llamativa que digamos;  sin embargo su tema musical resulta sobresaliente, poseyendo ciertos acordes místicos que van muy en la línea que se suponía debía poseer esta obra (a mi humilde parecer lo mejor al respecto corresponde al dedicado al “Diablo” de Hell`s Kitchen).
      Pues tal como en el cómic, acá se muestra a Danny ya un veinteañero regresando a su primer hogar, tras un largo periodo en Kun`-Lun, deseoso de retomar en parte su antigua vida.  Quien en apariencia parece un vagabundo, ya que ni siquiera lleva zapatos y su barba está descuidada, además de usar ropa bastante desastrosa, llega con toda la mejor disposición del mundo al enorme edificio del que antes era dueño su padre; en tal lugar se  reencuentra con sus dos viejos amigos de infancia, ahora adultos como él y esperando que lo acojan como si nada.  Sin embargo en un mundo como el nuestro esto no puede ser tan sencillo, pues tras suponer que estaba muerto, no es llegar y que con facilidad acepten su versión de los hechos.  Bastantes cosas tendrán que pasar como para que por fin Rand pueda tomar posesión del lugar que le pertenece, si bien tendrá que vérselas con varios enemigos de toda calaña, algunos de ellos gente en la que se suponía podía confiar.
Este primer afiche de Netflix promete
mucho más que lo que nos dio.
     Y por supuesto que Danny llega con unos poderes increíbles, que tienen que ver con su título de Puño de Hierro, lo que lo convierte en el foco de atención de quienes desean sacar provecho de ello o lo consideran un peligro para sus viles propósitos.  4 son los villanos a los que se enfrenta Rand, siendo el primero que aparece el que en realidad menos importancia posee, pues los otros 3 sí que son de temer, siendo que además el otro termina por convertirse en una especie de aliado (tal y como sucede con este tipo de historias).  Lo más llamativo en lo que corresponde a los malhechores a los que se enfrenta Puño de Hierro, radica en el hecho de que hayan rescatado al personaje de Madame Gao, quien apareció en la primera temporada de Daredevil, pero que aquí es desarrollada de tal manera que se convierte en uno de los mejores personajes de esta decepcionante serie (además de que la actuación de la actriz a cargo de esta sobresale bastante).
      En materia de los “malos” de la trama, se debe destacar el regreso de la importante organización criminal conocida como La Mano, la que posee un rol destacado en el universo de la Casa de las Ideas y que en el mismo programa de Daredevil cobra vital relevancia.  Esta vez también se adentra en los retorcidos vericuetos de tal agrupación, haciéndonos saber que posee varios jefes y que entre ellos hay distintas maneras de ver cómo asumir su poder, provocando disputas entre ellos.
      Por muy paupérrimo que sea en materia argumental esta adaptación del cómic en cuestión, no podía faltar un personaje como Colleng Wing, gran aliada de Puño de Hierro y su pareja romántica.  Asimismo como era de suponer esta temporada (¿Tal vez la única?), muestra los inicios de su relación, con una génesis muy particular, la que pasa por varios momentos de tensión y en especial cuando se descubre el verdadero papel que cumple la hermosa asiática dentro de todo esto.
      Puntos a favor de la serie vienen a ser el regreso de dos carismáticos personajes en esta entrega televisiva del llamado Universo Cinemático Marvel: la abogada con rostro de piedra (y que ahora nos queda claro que su corazón no es de este material) Jeri Hogarth, a quien conocimos gracias a lo visto en Jessica Jones.  Es así que en esta ocasión conocemos lo mejor de esta mujer, que hasta el momento había sido representada como la caricatura de la chupasangre de su profesión (si bien tampoco llega al extremo de ser alguien con quien uno quisiera salir de vacaciones).  Luego tenemos a la enfermera Claire Temple, el único personaje que se ha repetido a lo largo de todas estas producciones televisivas.  Pues una vez más esta fémina se vuelve a robar el corazón del público, auxiliando a los héroes de turno y mostrándonos con ello cómo las personas de la “vida real”, sin poderes y teniendosolo su inteligencia, valentía y buenas intenciones (en todo caso, ello para nada algo insignificante), pueden sortear positivamente los enormes baches de la vida cotidiana.

¡Así queremos ver a Puño de Hierro en Los Defensores!
     A todo esto, el protagonista es interpretado por Finn Jones, a quien lo pudimos ver hace pocos años atrás en el papel del andrógeno caballero Loras Tyrell de Juego de Tronos y ahora en un papel por completo distinto.  Si bien acá mucho más masculino que el otro rol que le dio la fama, destaca cierta inocencia con la que se retrata a esta encarnación de Puño de Hierro, puesto que pese a todo a lo que ha vivido mantiene un aire de niño confiado, aun cuando guarda dentro de sí capacidades extraordinarias.  Esta vez su bello rostro lleva en todos los episodios barba, algo que para nada usa el superhéroe en las viñetas.  Por otro lado, llama la atención su delgadez, si bien con una musculatura tonificada, lo que contrasta con el paladín de las historietas (ellos siempre poseedores de un cuerpo atlético que da gusto).  Lo peor en todo caso en cuanto a esta versión del justiciero, es que en ningún momento se pone su traje característico, lo que todo fanático de los cómics habría querido ver tal como ya pasó con el citado Daredevil,  quien por fin en el penúltimo episodio de la primera temporada llevó su atuendo de superhéroe (aunque en una variante algo lejana a la de las revistas).  Esta lejanía con el Danny Rand que uno conoce y que le quita elementos propios del género en el que se enmarca la serie, es algo que no se puede dejar de lado, si en verdad se quiere ser fiel al material del que se nutre una serie como esta (y más todavía si se desea contentar al espectador, que espera una traslación más respetuosa de los cómics de su gusto).
      Pese a todos los elementos ya descritos y que bien podrían haber sido aprovechados al máximo, tal como se dijo más arriba Puño de Hierro defrauda.  Por ejemplo, no se puede dejar de lado a la hora de evaluarla, que pese a todo lo que se cuenta del mítico lugar de Kun`-Lun, apenas se muestra este sitio y los escasos flashbacks que abordan la permanencia de Danny en sus tierras, no profundizan al respecto.  De igual manera si bien hay varios momentos donde las artes marciales son usadas con mucha satisfacción, faltan escenas de verdadera espectacularidad, que tengan que ver con el enorme poder que posee el personaje principal (lo mismo sus villanos); salvo dos ocasiones (si la memoria no me falla), en ningún otro momento Puño de Hierro brilla como quién es realmente.
        Es de esperar que todo esto mejore con Los Defensores


Créditos de apertura.

Los Vengadores animados al estilo de las películas.

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     Tras el éxito de la anterior serie basada en los populares cómics de los Vengadores de Marvel, los responsables de producir estos cartoons tuvieron la “ingeniosa” idea de cancelar Los Héroes más Poderosos del Planeta luego de dos elogiadas temporadas y 52 episodios en total.  Es así que tras crear un programa que incluso llegó a adaptar a un nivel pocas veces visto en estas series marvelitas, con una seriedad y gran respeto al material original varias obras clásicas del cómic tales como La Canción de Beta Rayos Bill (de la etapa de Thor hecha por Walter Simonson) y El Soldado de Invierno(sobre la novela gráfica de Ed Brubaker para su etapa dedicada al Capitán América), entre otras, decidieron estrenar el mismo año de su cancelación Vengadores Unidos.  Olvidando casi por completo la continuidad anterior, se optó por una alineación de justicieros que respondiera a lo visto en los filmes del llamado Universo Cinemático Marvel, siguiendo en parte sus premisas y su estética.  Es así que, por ejemplo, en esta actual versión de las historietas para la pantalla chica, Ojo de Halcón ya no lleva su acostumbrada máscara, Ultron fue creado por Tony Stark (Iron Man) y no por Hank Pym y el actual Hombre-Hormiga es Scott Lang y no el recién mencionado Pym.  Por supuesto que se supone que estas decisiones argumentales ayudaban a aprovechar las franquicias cinematográficas, quizás permitiendo que los menores de edad se quedaran con la imagen más nítida de lo visto en dichas cintas (puesto que la primera temporada, bastante deficiente y con guiones muy pobres en comparación con su antecesora, sin duda que es de corte infantil…algo que menos mal mejoraron a partir de la segunda temporada).
     La alineación principal de los Vengadores en este show está claramente sacada de las películas: el Capitán América, Hulk, Thor, Iron Man, Falcon y la Viuda Negra.  Una libertad que se tomaron eso sí, fue hacer que el Falcon de esta versión en vez de estar ligado al Capi, fuese una especie de discípulo de Iron Man, en especial al convertirlo en un superhéroe principiante, con interés por la tecnología.
      Tal como se dijo más arriba, la primera temporada resulta bastante deplorable, en parte por sus guiones que apenas toman en cuenta la rica mitología de la Casa de las Ideas, optando por los recursos fáciles de la sucesión de batallas contra los enemigos (que en general son los mismos de siempre, un grupo liderado o al menos organizado por Cráneo Rojo) y el humor menos sutil apoyado en la idiotez infantil de estas representaciones de Thor, Hulk y Ojo de Halcon, quienes se la pasan haciéndose bromas entre sí o compitiendo en una especie de jueguitos por saber quién es más macho.  Esto queda más que claro por el significativo detalle de que la única mujer del grupo no aparece siempre (lamentablemente) y salvo el Capi, es la única que demuestra poseer la madurez que le falta al resto.
       La trama general de esta temporada inicial aborda el enfrentamiento contra la Camarilla, el grupo de villanos reunidos por la némesis del Guardián de la Libertad, en la que se encuentran: Attuma (un poco carismático atlante enemigo acérrimo de Namor), M.O.D.O.K. (la inteligencia artificial cabezona creada por los tecnoterroristas de I.M.A.), Hyperion  (el guapo alienígena de un universo alternativo, que viene a ser la contrapartida en plan maligno de nada menos que de Superman) y nada menos que Drácula (¿Quién no lo conoce?).  Sin embargo los egos entre todos estos criminales, incapaces de ceder entre sí, que responden a varios estereotipos argumentales (mitología y civilizaciones “perdidas”, monstruos tecnológicos, extraterrestres malvados y monstruosidades sobrenaturales respectivamente), tal como queda demostrado en los episodios les impide superar a los paladines, quienes sí son capaces de trabajar en equipo e incluso dejando de lado (cuando la ocasión lo amerita) sus diferencias.  Tanto entrometimiento de la Camarilla, que se hace repetitivo, hace echar de menos otros grandes villanos marvelitas, que al menos durante este primer año estuvieron desaprovechados.
       En cuanto a la segunda temporada, menos mal que los escritores se esmeraron por hacer algo mucho mejor.   Esto es posible por varias razones, entre ellas por la introducción de un villano de características cósmicas como lo es Thanos, quien sale como una amenaza tan grande, que los mismos Vengadores deben sacar a relucir lo mejor de sí (en especial su inteligencia, dejando de lado sus anteriores estupideces) para lograr derrotarlo.  Además surge nada menos que el peligro de Ultron, otro tipo de mal, lo que va acentuando la mayor carga dramática del programa.  Asimismo frente a todas estas encrucijadas, se invita nada menos que al Hombre-Hormiga a formar parte del equipo, incorporación que le otorga aires frescos a la serie, donde gracias a su simpática personalidad ahora sí que logran aprovechar bien el humor en los argumentos, en especial debido a sus conflictos con el infantil Ojo de Halcón.  Sin embargo lo momentos en los que radica uno de los puntos más altos de la trama, viene a ser cuando se produce una escisión debido a fuertes desavenencias en el grupo y se dividen, una rama de ellos trabajando a las órdenes de Nick Fury en S.H.I.E.L.D.  En todo caso, lo que para un servidor viene a ser el momento de mayor gloria y más divertido de toda la temporada, corresponde a cuando unas vez reunidos otra vez nuestros superhéroes, deben vérselas contra el llamado Escuadrón Supremo: los compañeros de Hyperion, quienes vienen del mismo universo que él, siendo en su totalidad una versión maligna de…¡La Liga de la Justicia! (por su parte DC también ha hecho este  tipo de “homenajes” a su competencia).
     
Un adelanto de lo que se viene en la cuarta temporada.
     Si la segunda temporada logró superar al paupérrimo debut de esta serie, la tercera sin dudas que se supera a sí misma, en parte porque sus acontecimientos y los personajes que aparecen recuerdan a lo visto (y gozado) con Los Vengadores: Los Héroes más Poderosos del Planeta.  Con el subtítulo de La Revolución de Ultron, no solo aborda el regreso de esta entidad artificial malvada, sino que también agrega la presencia de otros clásicos villanos como lo son el Baron Zemo y Kang el Conquistador.  El cuadro se completa cuando surgen los Amos del Mal, entre otros delincuentes superpoderosos.  De igual manera destaca la versión de varios momentos icónicos marvelitas, tales como el surgimiento de los Thunderbolts, un grupo de vigilantes con un pasado muy especial y las sagas de Planeta Hulk(que en realidad de los cómics solo tiene el nombre) y de la Guerra Civil(sin dudas memorable).  Destacables son la aparición de la Capitana Marvel, Pantera Negra, Visión y de los Inhumanos, siendo que estos últimos dan pie a una serie de eventos muy atractivos.  Otro aspecto a considerar para la evaluación positiva de esta tercera temporada, viene a ser el desarrollo dado a nada menos que Hulk, quien ahora ha evolucionado lo suficiente como para convertirse en todo un parlanchín, manteniendo en la práctica la inteligencia de Bruce Banner, el científico que se convierte en él; de hecho, por primera vez en esta seguidilla de adaptaciones de Marvel/Disney comenzadas con Ultimate Spider-Man el físico aparece más de una vez tomando vital importancia para la trama.
     En la actualidad este show se encuentra en su cuarta temporada, comenzada tan solo el mes pasado. 


A falta de intro para esta serie (¡Hijos de puta!), recordemos 
la que bellamente posee su predecesora (en español latino, como a mí me gusta).

Los blogueros que admiro. Tercera parte: Entrevista a Mauro Vargas de “Léase a Plena Noche”.

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     Quienes me conocen bien saben que a la hora de escoger una buena historia, lejos mis favoritas son las de terror (incluso más que las de superhéroes).  Sin embargo como me he vuelto “exquisito” con el pasar de los años, ya no veo y leo tantas de este tipo como antes, pues me acostumbré a solo dar mi tiempo a los mejores.  Muchas horas y demasiados recuerdos valiosos para mí les debo a todos esos autores y títulos, que se han quedado prendado en mi corazón: Edgar Allan Poe, Lovecraft, Stephen King, Anne Rice, Robert Mc Cammon, Fredy Kruegger, John Carpenter, Stuart Gordon y un largo etcétera han tenido en más de una ocasión un lugar en mi blog. 
      Fue justamente debido a esta pasión que desde niño albergo por las narraciones espeluznantes, que tuve la dicha y el honor de que Mauro Vargas se fijara en mi página, algo muy valioso para mí, ya que en materia de “sustos”, mi colega colombiano lejos sabe mucho más que yo.  Adentrarse en su página es profundizar como en ninguna otra parte que conozco de la blogósfera, en la opinión de un experto sobre estas ficciones y a veces acerca del horror real que se haya a la vuelta de la esquina.  Además Mauro escribe con una perfecta mezcla de sencillez y erudición, propia de alguien culto y humilde, que vez que me paso por su “casa” es difícil no tentarme con todo el material que posee; sus recomendaciones son ley para mí.
      Un detalle muy significativo para mí, viene a ser el hecho de que a ambos, en distintas partes del planeta, nos marcó la revista Fangoria, de la cual saqué el nombre de mi blog (de una de sus secciones durante su primera etapa en español).  Solo gracias a esta entrevista he llegado a saber tan delicioso punto en común más.
      Por cierto, espero tener pronto en mis manos los números de su genial revista, que me encantaría y para mostrarles a mis ami@s mis humildes colaboraciones en ella.

Mauro y su compañero de oficina ¿Quién es quién?

 
1- Preséntate en no más de 200 palabras

Nací en Cali, Colombia, en el 92, y resido en Bogotá desde hace catorce años. Fanático de las historias de terror. Colecciono a los autores de la segunda mitad del siglo XX y a veces tengo el descaro de despreciar algunos clásicos. Doy la vida por la salsa y demás géneros tropicales. La música es mi gran pasión. Los libros, un fetiche, un vicio irremediable. La escritura, un gusto adquirido que me quita el sueño.

2- Cuéntanos acerca del origen de tu página

La primera reseña que publiqué en internet fue en el blog de la librería de un amigo. Escribí algunas más y las compartí en redes. Pronto otro amigo, gran coleccionista de Stephen King que para ese momento ya tenía su blog, me invitó a crear el mío. Y así lo hice. La idea de abrir un espacio y diseñarlo me parecía divertida. Primero se llamó Pulp Terror y publicaba textos sobre cine y literatura muy variada. Luego me di cuenta de que necesitaba enfocarlo dado el título, así que eliminé la sección de cine y me dediqué de lleno a los libros de terror. Pero entonces advertí que no toda la literatura que allí reseñaba era pulp, así que me senté a pensar. Rebauticé el blog como Friki Mortis (Nótese mi poca habilidad con los títulos) y seguí adelante, más cómodo con el aspecto de sitio, escribiendo sobre literatura de horror.
Estaba estudiando literatura en la universidad y pese a que mi rama era la creación, la edición me llamaba poderosamente la atención. En ese momento tenía gran interés en las publicaciones de comienzos de siglo, revistas como Weird Tales, Amazing Storiesy los cómics de Creepy y Tales from the Crypt. Y sumado a esto, adquirí en la librería siete revistas Fangoriade números variados que iban de los ochenta a los noventa. Fue una de las mejores compras de mi vida. La diagramación, los colores, las fotografías, la seriedad con la que se abordaba la escena del cine y la literatura del género, los artículos. Todo eso me fascinó y me llenó de muchas ideas porque combinaba lo que yo quería escribir en el blog con el formato impreso.
Por esos años, junto con dos amigos de la universidad, nos lanzamos a publicar una revista de cuentos de géneros populares llamada El tintazo, un intento de emular a las revistas anteriormente mencionadas. El proyecto solo llegó a dos números impresos y a un tercero inexistente que iba a ser un especial zombi. La cosa no funcionó, pero con ella maté mis demonios: esa revista me enseñó a qué hacer y qué no hacer, a tener criterio, a tomar malas decisiones y saber evadirlas, y aprendí aspectos editoriales a punta de equivocaciones y sentido común. El proyecto fue valioso, una gran escuela, pero no había podido hacer lo que en verdad quería: una Fangoria propia, un espacio que hablara sobre el horror en todos sus ámbitos.
Con el pasar de los días decidí volver a renovar el blog. El título que tenía ya no me gustaba, no lo sentía acorde a la temática, así que comencé a pensar de nuevo. Una noche, de regreso a casa en el bus, encontré la clave. Sería un homenaje a una de las antologías de Hitchcock que más me había gustado, Historias para leer a plena luz. Comencé a jugar con el título y llegué al nombre actual: Léase a plena noche, un nombre que representaba todo lo que siempre quise transmitir.
Y como estaba dispuesto a satisfacer mi sueño de crear mi propia Fangoria, adquirí el dominio, me puse a experimentar con diferentes plantillas y códigos HTML, y sumé a las reseñas de libros otras de cine y algunos artículos. Luego decidí volver al campo de la edición imprimiendo la revista que lleva el mismo nombre y que ha tenido gran aceptación entre los lectores. Y los proyectos que tengo en mente no dejan de crecer, así que continúo explorando y renovando. El blog ha sido un camino hacia un sueño que se sigue construyendo.

¡Armando el nuevo número de la revista!

3- ¿De qué trata tu blog?

Es un espacio en el que comparto puntos de vista sobre el horror en general a través de artículos y reseñas. Lo que me motiva es hablar de obras que han sido olvidadas o poco comentadas, especialmente de la era pop del género. No me gusta hablar de los clásicos porque ellos ya están por encima del bien y del mal. ¿Para qué otro artículo u otra reseña sobre Edgar Allan Poe intentando resaltar una genialidad de la que toda la humanidad es consciente? Prefiero, y me parece más valioso, hablar de la novela que inspiró la película de Wes Craven Deadly Friend, escrita por una desconocida Diane Henstell.
Cuando escribo, no me gusta hacerlo en clave de recomendaciones, porque no soy nadie para decir qué vale la pena y qué no. En realidad, creo que pretender hacerlo es un atrevimiento. Así que trato de mantenerme en la subjetividad total, sin querer buscar verdades absolutas, inexistentes en cualquier ámbito artístico. Cuento, además, con escritos de amigos tanto de mi país como del exterior. Elwin ha tenido la amabilidad de compartir un par de sus textos, no solo para la revista impresa sino para la página. Justo ahora, la página funciona como complemento de la revista. Quisiera poder abrirle más campo a la literatura y cine de terror latinoamericanos, entrevistar autores, directores, tener algunas primicias, convertir el proyecto en esa Fangorialatinoamericana que tanto deseo.
Algunos habrán visto que he cambiado de diseño muchas veces; se debe a que el proyecto ha sido desde su inicio una constante búsqueda de algo que ya parece ver su forma definitiva. Ahora lleva el nombre de LA PLENA NOCHE, el sello bajo el que se cobijarán los actuales y nuevos proyectos que tengo planeados. Pero es un proceso largo que comenzó sin querer hace cinco años y que ha ido trazando su propio camino. Alcanzar la meta con este proyecto requiere inversión de tiempo y económica y debe hacerse despacio, dejándolo crecer al ritmo adecuado.

 4- ¿Qué satisfacciones te ha traído lo que haces?

El blog ha sido un caballito de batalla. Me mantiene activo con la escritura y con el aprendizaje sobre estos géneros. Me exige una disciplina necesaria para no fracasar en este oficio de la creación. Me invita a investigar, a tener los oídos y ojos siempre atentos.  Ha sido una gran escuela no solo en el desarrollo de un estilo para organizar y transmitir ideas, sino que me ha llevado a asumir el desafío del trabajo editorial con seriedad y proponérmelo como un compromiso vital. Me ha llevado a intentar, fracasar, aprender y volver a intentarlo, y me demuestra que el potencial de este proyecto sigue latente, pues en lugar de estancarse sigue evolucionando y evocando ideas muy atractivas para materializar. No puedo estar más agradecido con el blog.

 5- ¿Cuál es la cercanía de tu gente (pareja, familia, amigos…) con tu labor en el blog que posees?

En esta ciudad en la que llevo catorce años he estado siempre al lado de mis padres. Sin mucho escándalo me han apoyado siempre con mis proyectos. Ahora que el blog ha entrado en una etapa productiva que requiere más esfuerzo —seleccionar textos, escribir más, editar, diagramar, imprimir, distribuir— ellos siempre han estado allí, creyendo en lo que hago. A veces pienso que su fe en el éxito de estos proyectos excede a la mía.
Su amigo Alejandro Torres leyendo su propio texto.
     Mis amigos han sido invaluables también. Debo agradecer, especialmente, a toda esa familia tan variopinta que se ha construido en «Árbol de tinta», mi librería de cabecera. Su dueño, Alejandro Torres —otro entusiasta del horror—, además de ser el primero en invitarme a escribir una reseña para su blog, ha estado enterado siempre de mis proyectos, me ha animado a seguir adelante, me abrió un espacio en sus anaqueles para los primeros y pocos ejemplares de la revista que salieron a la venta hace dos años, me dio su opinión sincera sobre el resultado de cada ejemplar y me ha regalado sus textos para incluirlos en cada número. Debo a gradecer también al resto de clientes que nos hemos vuelto familia alrededor de ese pequeño e invaluable espacio en el centro de la ciudad. Todos han tenido que ver con la revista, muchos de ellos publican también allí, y me empujan siempre a continuar creciendo con el proyecto.
No podría estar mejor respaldado.

6- ¿Cómo es el proceso que tienes por lo general para escribir tus entradas?

Yo soy un procrastinador confeso. Escribir todo de una sola sentada me ha funcionado siempre. Cada trabajo de la universidad lo hice a última hora y siempre salí bien librado. No puedo dosificar el trabajo. Si comienzo algo no puedo parar hasta terminarlo. Cada ejemplar de la revista lo diagramo en dos jornadas extensas que me obligan a estar despierto hasta el amanecer, pero ya no tengo remedio. Pero el blog, así como la escritura de ficción, me han obligado a dejar esos vicios cuando se requiere.
Cuando termino de leer un libro, dejo pasar un par de días antes de sentarme a escribir. De igual manera hago con las películas, aunque siempre hay ocasiones en que una obra me deja tan satisfecho y entusiasmado que la escritura no da espera. Para los artículos, justo cuando descubro un tema interesante para escribir, dejo que se macere en mi cabeza varios días. Solo me siento a escribir cuando creo que todos los elementos están dispuestos y tengo entre manos una primera oración suficientemente atractiva para comenzar a redactar. Odio sentarme a pensar frente a la pantalla.

 7- ¿Cómo equilibras el resto de tu vida y tu tiempo con tu trabajo en la página?

Siempre trabajo en las noches. Y como si de una obra de Coelho se tratara, el universo ha conspirado para poder funcionar cómodamente en esas jornadas vampíricas. Desde que escribí mi tesis —hace dos años— me levanto al mediodía y me acuesto al amanecer. Ahora estoy haciendo una especialización en escritura para productos audiovisuales en la noche. Aquello no pudo ser mejor regalo, pues al llegar a casa me puedo permitir trabajar hasta las tres o cuatro de la madrugada sin problemas. Mi jornada nocturna sigue siendo esencial.
Ahora estoy haciendo lecturas múltiples. Por la tarde antes de ir a clase y en la madrugada, leo novela. En el transporte público leo cuentos. Y trato de mantener el ritmo para escribir en el blog y actualizarlo con frecuencia (el manejo de las redes sociales me vuelve loco. Soy muy olvidadizo). Veo cine cuando me queda algún tiempo libre, a veces en rachas de una película diaria, o en dosis de dos o tres los fines de semana, sin mencionar los descubrimientos televisivos haciendo zapping en las madrugadas.

8- ¿Qué autores lees? Expláyate lo que quieras.

Mi escritor de cabecera es Stephen King. Es el único autor que leo con pasión, al que sigo fielmente con cada obra que publica. De resto, acepto en mi biblioteca a cualquier autor de terror del siglo XX. Me gusta mucho Dean Koontz —del que estoy comprando cada libro que encuentro—, John Saul, Ray Bradbury y Robet McCammon. Admiro mucho también a Mario Mendoza, autor colombiano de novela urbana, una rareza de la literatura popular en un país que ha sido tan godo con sus escritores (no, Gabo no es santo de mi devoción). En un ejercicio ocioso que estoy haciendo en aras de rescatar del olvido a best Sellers de antaño (tengo en mente un blog dedicado a estas grandes SOBRAS de la literatura universal), he descubierto la increíble capacidad de contar historias de Irving Wallace. De resto, leo cualquier cosa que merezca la pena leer. Creo que, con el tiempo, cuando uno se descubre «lector», se pierde la disposición a aventurarse y sorprenderse. Comienzas a seguir a ciertos autores o géneros y los compras a ciegas, sin detenerte ya en la sinopsis y decidir si vale la pena o no leer cada historia. Te pierdes de un universo rico de historias que están fuera de tu zona de confort. Así que intento no perder eso, dejándome seducir por historias atractivas que me inviten a leerlas, sin importar quién las escribe, si es o no un clásico, a qué género pertenecen o si son avaladas o despreciadas por la crítica.

 9- ¿Qué películas y/o series recomiendas? Danos tus razones.

Quisiera ser más cinéfilo de lo que soy, pero me cuesta. No hablaré de los clásicos, porque esos ya son buenos por sí solos.
Si he de recomendar cine, nombraré a Brian de Palma, uno de mis directores favoritos. Pese a que es famoso por su tríptico del crimen —Los intocables, Carlito’s Way y Scarface—, yo prefiero exhortar a que les den un vistazo a dos películas fantásticas, dos thrillers soberbios: Vestida para matar y Doble cuerpo.
Recomiendo el cine de Paul Verhoven, especialmente Total Recall—una de mis obsesiones cinematográficas—, por la precisa combinación de acción, gore y una ciencia ficción mesurada, sin tanta grandilocuencia (detesto la ciencia ficción estilo Star Wars o Star Trek).
El cine de acción de John McTiernan con Depredador y Duro de matar (y su segunda parte), uno de esos cineastas que capturaron todo el espíritu de su década, redefiniendo varios de los lugares comunes de este género.
Como películas individuales, la inmortal Matilda de Danny de Vito, un alegato a la adultez y la pérdida de la inocencia a la que conlleva. Una oda al delicioso privilegio de la lectura.
Breakdown, con Kurt Rusell, un thriller explosivo, desbordante de suspenso, injustamente olvidado.
Killer Joe, un drama y thriller dirigido por William Friedkin, para gozar de la dirección de este realizador eternamente conocido por El exorcista. Desasosegante, sucio, violento, con un fantástico Matthew McConaughey haciendo de policía corrupto.
Los niños invisibles, de Lisandro Duque Naranjo, una película colombiana que de alguna manera define cómo debería manejarse la fantasía en Latinoamérica (está gratis en YouTube).
Misery y Buscando a Forrester, dos títulos preciosos sobre el acto de escribir.
Deep Rising y las dos primeras partes de The Mummy de Stephen Sommers, uno de los pocos que sabe combinar el horror con la acción sin que se vuelva una parodia.

En materia se series soy un tipo muy descuidado. Me puede gustar The X-Filesde la misma manera como me gusta ¿Quién da más? O El precio de la historia. Si es televisivo, lo veo todo con el mismo encanto. Pero intentaré disparar algunos recomendados:
Escalofríos y ¿Le temes a la oscuridad?, porque son los culpables de que la generación de los noventa seamos adictos al terror. Dos series inmortales, con un legado importantísimo para el género.
American Crime Story: nunca me gustó la propuesta de terror de sus creadores (American Horror Storyy Scream Queens), pero este retrato criminal sobre el caso de O. J. Simpson es simplemente asombroso. Está filmado con una precisión milimétrica que evoca la década de los noventa a la perfección, además de poseer fantásticas interpretaciones de aquel elenco de primera línea (destaco especialmente el soberbio papel de Sara Paulson).
Tres comedias perfectas: Seindfeld, Mad About You y Will and Grace, porque sus guiones son obras maestras de la escritura televisiva.

 10- ¿Algún post favorito que poseas? ¿Por qué?

Ninguno en particular. Trato de que el próximo sea mejor que el anterior.

11- Cuéntanos acerca de la revista en papel que diriges.

Yo deseaba saciar las ganas de hacer una revista estilo FANGORIA y desde junio hasta octubre de 2015 imprimí los cinco primeros números. Fueron muy variados: incluí entrevistas, artículos, reseñas, cuentos e ilustraciones. Decidí comenzarla con un tiraje pequeño, pero mes a mes se agotaban más rápido, así que tuve que comprar una impresora exclusiva para el proyecto y pasar de imprimir veinte o treinta a cincuenta. Hicimos lanzamiento en una de las librerías y cada número se vendió. Me sorprendió la aceptación que tuvo.
Es difícil comenzar un proyecto así, porque si haces convocatoria puede que no lleguen suficientes textos, o que los que lleguen no valgan la pena. Quisiera pagarle a quienes han escrito, pero el dinero te alcanza para financiar el mismo proyecto. Por eso me di a la tarea de cazarlos y reunirlos, contando siempre con la buena voluntad de los colaboradores. Varios amigos participaron de cada número. Sin embargo, el tiempo es implacable. Cuando imprimes mensualmente, no has terminado de distribuir una y ya necesitas tener lista la siguiente. Para el sexto número ya no tenía material.
El proyecto estuvo detenido hasta junio de 2016. Decidimos retomar la revista lanzando un especial sobre El Diablo. Junto con Alejandro, mi amigo librero, planeamos replantear el enfoque de la revista, sacando números monotemáticos y solo cuando hubiera material que valiera la pena publicar, sin someternos a una periodicidad. Las portadas comenzaron a salir a color y poco a poco la revista fue adquiriendo su propia identidad. Queríamos que cuando la gente la viera, supiera que se trataba de Léase a plena noche. Tiene una estética que recuerda a las publicaciones pulp, a dos columnas y una diagramación clásica que combina texto e imagen, toda en blanco y negro. La revista ha ido creciendo mucho más. Los lectores se han multiplicado y la están coleccionando. Esos primeros ejemplares, ahora descatalogados, se han vuelto blancos de los coleccionistas. Cada vez debo imprimir más ejemplares. El número más reciente es el nueve, dedicado a los asesinos que fabricaban objetos con sus víctimas, y estamos en un momento crucial no solo preparando el décimo número, sino mirando cómo ampliar la distribución, llegar a otras ciudades del país y, por qué no, a otros territorios del continente. Hay mucho trabajo por hacer.

La revista...En el tomo dedicado a "It" hay un texto mío ;-)

 
12- ¿Por qué el terror y no otro tipo de historias?

Es una pregunta que me hago a veces y no logro sistematizar los caminos que me llevaron al género. Sencillamente había algo atractivo en el misterio y el miedo. La televisión es la gran culpable de esa seducción. Series como Scooby Doo dónde estás, Coraje, el perro cobardey Escalofríos (al igual que los libros en los que se basa), así como las películas enlatadas que pasaban en canales locales como IT, Leprechaun y Payasos asesinos del espacio exterior, al igual que las de más tarde en la noche y que intentaba ver luchando contra el sueño, despertaron gran interés en mí. Y no es por la necesidad de pasar miedo. Disfruto el horror en otros planos estéticos: las atmósferas, las historias que yacen bajo los sustos, los personajes. Me gustan los universos donde habita el miedo. Me parecen atractivos. Y ahora, cuando soy más consciente de este gusto particular, descubro que el horror es necesario para poder convivir con las preguntas que no podemos responder. Es un escape a la detestable realidad en la que vivimos, pero también un distanciamiento que nos permite examinarla desde otro ángulo y nos invita a explorar los sentimientos oscuros del espíritu, porque es allí donde se originan los males de nuestra especie. Solo en el horror podemos exaltarlos y examinarlos y quizás comprenderlos. Además, nos hace conscientes de que el mal no se puede evitar ni remediar, sino que debemos aprender a combatirlo y convivir con él, porque hacen parte de nuestra naturaleza. Siempre estará entre nosotros.

13- Para finalizar… ¿Qué le dirías a tus futuros lectores para animarlos a adentrarse en tu espacio en la blogósfera?

Como le dijo Drácula a Jonathan Harker: bienvenidos a mi morada. Entren libremente, bajo su propia voluntad, dejen un poco de la felicidad que poseen.

Con sus amigos de Árbol de Tinta.

El primer Spider-Man (segunda parte).

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La misma colección que estoy comentando, pero esta editada por Forum (Planeta de Agostini).
I- “El Hombre”.

     Antes de comentar el primer volumen, historia por historia, de la edición en 3 tomos de Panini en su colección Best of Marvel Essentials para la etapa original de Spidey, aprovecho de contarles acerca de uno de sus cocreadores: el simpar Stan Lee.
     Nacido el 28 de diciembre de 1922 en USA (¡Es admirable la vitalidad de este hombre!), aún hoy a los 94 años lleva activo en la vida pública y artística, tras comenzar bastante joven en el mundo editorial comiquero.  Su nombre original corresponde a Stanley Martin Lieber, pero tras hacerse conocido internacionalmente gracias a su pseudónimo decidió por oficializarlo de manera legal. 
     Cercano a los 18 años, recién salido del colegio (de la secundaria como le llaman en algunos lados), llegó a trabajar a la empresa que por entonces se llamaba Timely, la que luego sería rebautizada como Marvel.  En aquel entonces el aún muchacho Stan apenas era un humilde ayudante, oficiando en lo que se le necesitaba, hasta que un par de años después de ingresar a esta editorial, se le permitió escribir un breve relato de dos páginas de nada menos que del Capitán América y al que luego ya convertido en el guionista estrella, él mismo años después “resucitaría” del olvido a principios de los sesenta, con el surgimiento de la llamada Era Marvel de los Cómics.
     Una vez convertido en guionista de la por entonces Timely Comics, trabajó realizando todo tipo de historias que por aquel entonces eran populares: westerns, de ciencia ficción (en especial las de mad doctors y monstruos, que tanta influencia tendrían en el subgénero superheroico), humorísticas, de aventuras adolescentes y hasta románticas.  Todas estas temáticas mezcladas y otras más, en la que bien se curtió en su juventud y demostró con ello además su versatilidad, para crear verdaderas narraciones de calidad literaria, llenas de elementos propios de los grandes clásicos, en sus posteriores invenciones y de las que justamente su serie del Hombre-Araña resulta un gran ejemplo.
      Según cuenta la leyenda (o lo dijo el mismo Stan), ya estaba cansado de los argumentos por encargo que le hacían sus jefes y deseaba alejarse por completo del mundo editorial comiquero, cuando su esposa (que en paz descanse, ya que nos dejó tan solo el pasado 6 de julio) le dio la formidable idea de que antes de tomar dicha decisión se diera un gusto y realizara el tipo de historieta que en verdad lo entusiasmara.  Fue así que nacieron nada menos que los 4 Fantásticos, apoyado en el dibujo por otro grande como lo es Jack Kirby; tuvieron su debut en 1961 y a partir de ese momento su carrera artística despegó, moviendo por completo los cimientos de la industria de los cómics y causando tal impacto en la cultura popular, que hoy en día su legado ha pasado a otras áreas y el mismo Stan Lee es reconocido hasta por quienes no leen este tipo de arte.
Stan Lee ahora como el abuelito que tantos adoramos.
       La lista de personajes creados por Stan Lee supera los 300, varios de ellos están entre los superhéroes más famosos.  Aparte de los mencionados se pueden nombrar a Hulk, los X-Men (Profesor X, Jean Grey, Ángel, Cíclope, Bestia y Hombre de Hielo, los mutantes originales), Hombre-Hormiga, Avispa, Ironman, Silver Surfer, Daredevil, Pantera Negra (el primer superhéroe de raza negra), Doctor Strange, Nick Fury y muchos, muchos más. No se puede olvidar sus formidables reinterpretaciones a tono para estas historias, de los héroes mitológicos de Thor y Hércules.
        Su labor en Marvel ha pasado por ser redactor jefe, hasta convertirse en uno de sus figuras esenciales, al punto de que si bien ahora solo escribe ocasionalmente, casi no hay cómics marvelitas que no lleven el texto que dice Stan Lee presenta.  También ha oficiado de productor de gran parte de las adaptaciones audiovisuales que se han hecho de obras de la compañía, tanto de los personajes que salieron de su imaginación, como de otros autores.  Asimismo inolvidables son sus cameos y pequeños papeles en varias de estas producciones, entre cartoons, series y filmes de imagen real.
      A la hora de analizar las características de su trabajo al ser el responsable de que despegara la llamada Edad de Plata (si bien algunos sostienen que esta comenzó en los cincuenta) o que iniciara la ya citada Era Marvel, viene a ser el hecho de que tal vez por primera vez en los cómics de superhéroes, gracias a Stan Lee estos dejaron de ser los seres perfectos que hasta el momento se habían visto y que de ese modo a través de sus por entonces “nuevos” justicieros estos comenzaron a poseer defectos.  En otras palabras, Lee veló por hacerlos más humanos y gracias a ello pudo abordar no solo la aventura como eje de las tramas de sus historias, sino que además desarrolló temáticas sociales y el impacto emocional de su cruzada en la vida de estos vigilantes (siendo en este sentido, Peter Parker, nuestro queridísimo Spidey, un gran ejemplo de ello).  De igual manera destacable es su uso del humor que en más de una ocasión es capaz de sacarle risas a los lectores, a la par del melodrama habitual de sus argumentos, muchas veces al nivel de algunas piezas teatrales que bien hacer recordar a autores como Shakespeare (guardando las proporciones, claro); en este último sentido, el uso de un lenguaje grandilocuente, a veces en los diálogos, otras en los cartuchos narrativos, que en varias ocasiones incluyen lenguaje informal o alusiones a la cultura popular de la época (como cantantes, actores de cine, etc.).
      Si bien toda su vida artística ha estado ligado a Marvel, debe destacarse su pequeño “flirteo” con DC (a la que muy irónicamente puso en su momento Distinguida Competencia).  Es así que en 2001 participó del “rupturista” proyecto llamado Just Imagine Stan Lee…, a través del cual realizó nada menos que 13 one-shots,en los que reinterpretó el origen de varios de sus superhéroes más famosos, tramas que luego desencadenaron en una muy particular visión de la Liga de la Justicia.  Para esta labor fue acompañado de artistas tan consagrados como él, entre ellos Jim Lee, Joe Kuberth, John Buscema, Dave Gibbons, John Byrne y Jerry Ordway, entre otros.  Entre su visiones para estos otros clásicos (bastante rupturistas todas ellas, por cierto, ya que además no mantuvo el nombre de los personajes originales) encontramos a Superman, Batman, Wonder Woman, Robin, Acuaman y Linterna Verde, entre otros.

Spider-Man y sus papis.

II- Las historias.

      Antes de ir de lleno al primer tomo de la etapa de Spider-Man, debe saberse que a manera de “regalo” este compilatorio que sobrepasa las 300 páginas, incluye unas breves historias dibujadas por ese otro maestro que es Jack Kirby.  Por lo tanto a lo largo de este repaso también mencionaré dichos agregados, que todo coleccionista de seguro atesoraría.  En total son 16 relatos, que abarcan más de un año entre agosto de 1962 y mayo de 1964.
      Es así que aquí nos encontramos con:

1- Amazing Fantasy Nº 15 (agosto de 1962): El debut de Spidey tantas veces revisitado, en el cual se narran sus “orígenes secretos”, de cuando Peter Parker adquiere sus poderes y tras sentirse responsable por la muerte de su querido tío Ben, asume como lema suyo esas hoy archiconocidas palabras de Todo gran poder conlleva una gran responsabilidad.  La potencia de esta obra genérica solo posee 11 páginas de extensión.

2-The Amazing Spider-Man Nº 1 (marzo de 1963): Dividida en tres partes, muestra la aparición de su primer villano clásico, el Camaleón y el cual responde a los típicos estereotipos de las historias de espías, en plena Guerra Fría, debido a la capacidad de este para disfrazarse y ser además de nacionalidad rusa.  Aquí el antisocial se hace pasar por el Trepamuros, cometiendo fechorías al falsear su identidad, lo que inicia toda la mala fama que luego consigue nuestro Amistoso Vecino entre buena parte de la opinión pública.  Sin embargo al embuste del Camaleón se suma la presencia de un secundario tan importante dentro de las historias del superhéroe, como lo es J. Jonah Jameson, el editor de Daily Bugle, el diario al que después se va a trabajar Parker como fotógrafo freelance; debe recordarse que Jameson se declara desde un principio enemigo jurado del Cabeza de Red, por desconfiar de quien anda enmascarado (prejuicios que sin embargo no tiene con otros justicieros), razón por la cual aprovecha cualquier instancia para basurearlo a través de su periódico.  A este divertido primer número de su revista, se suma la visita inesperada de Spidey al Edificio Baxter, donde tienen sus oficinas los 4 Fantásticos con la intención de unírseles para ver si puede conseguir alguna remuneración trabajando con ellos; este encuentro inicial entre todos ellos, da pie a varias situaciones jocosas y no sale bien que digamos, aun cuando se convierte en la semilla de la posterior gran amistad entre el Arácnido y la Antorcha Humana.



Selección de infaltables cameos de Stan Lee.

3-The Amazing Spider-Man Nº 2 (mayo de 1963): Contiene dos historias, siendo la primera de ellas nada menos que la aparición original del Buitre, otro de los villanos clásicos del protagonista, si bien no tan poderoso si se le compara con otros de su calaña.  A través del primer encuentro del adolescente justiciero con este esperpéntico criminal, queda de manifiesto uno de los leiv motivs más brillantes de sus cómics y que corresponde a que no siempre gana este sus batallas; no obstante una de sus mayores fortalezas viene a ser que el joven (y todavía inexperto) Parker se levanta de su propia derrota, para con todo su ingenio lograr capturar al antisocial.  En cuanto a la segunda historia, introduce al Chapucero, inventor de sofisticados aparatos que usa con fines malignos, siendo que luego este sujeto no vuelve a aparecer en las viñetas del Hombre-Araña por todo el resto de su etapa de Lee y Kirby; por otro lado, esta segunda aventura del tomo es la primera y única vez en la época de esta dupla en la que aparecen… ¡Extraterrestres!

4-The Amazing Spider-Man Nº 3 (julio de 1963): Número dedicado en exclusiva al surgimiento del que sería quizás (aparte de Venom, según algunos) el más importante rival de Spidey, Otto Octavius, más conocido como Doctor Octopus y Doc Ock.  A diferencia del número anterior y lo sucedido con el Buitre, aquí sí que se cuenta el origen de la maldad del brillante científico, dejando de manifiesto esa vieja sentencia que dice que el poder corrompe.  En las páginas de esta entrega, además, vuelve a aparecer la Antorcha Humana, con lo que se va perfilando más la futura fraternidad entre ambos adolescentes superpoderosos, que antes de que madure, da para varias desavenencias entre los dos.

5-The Amazing Spider-Man Nº 4 (septiembre de 1963): El estreno en sociedad del Hombre de Arena, villano que como el anterior por tantas evoluciones pasará a lo largo de las historias del Cabeza de Red (incluyendo el hecho de convertirse en un valioso aliado y/o superhéroe en proceso de redención).  De seguro la portada de este número, que reproduce en cuatro viñetas el primer enfrentamiento con el criminal, debe ser una de las más famosas de la colección. 

6-The Amazing Spider-Man Nº 5 (octubre de 1963): En lo que va de las aventuras de nuestro Amistoso Vecino, se podría considerar que esta es hasta el momento la más entretenida de las que han realizado sus autores.  La afirmación radica en la suma de los elementos que componen sus argumento, como que en primer lugar en esta ocasión a su protagonista le toca enfrentarse a un verdadero villano de los grandes, puesto que hasta el momento todos los que han salido y seguirán apareciendo durante un buen tiempo son principiantes como él: nada menos que el Doctor Doom.  A ello se le suma la comedia que tan bien le sale a Stan Lee, cuando el bravucón de corazón dulce de Flash Tompson (quien desprecia a Parker, pero admira con amor incondicional a Spidey, sin saber la verdad acerca de su identidad), se hace pasar por él, lo que provoca unos cuantos enredos graciosos.  Y a lo anterior se le agrega la segunda aparición de los 4 Fantásticos, cuyo enemigo acérrimo viene a ser el mismo Doctor Doom.  Sin duda toda una delicia para leer. 

7- Strange Tales Annual Nº 2 (1963): El primer gran trabajo en conjunto, también llamado en el mundo de los cómics como team-up,entre los dos superhéroes adolescentes marvelitas favoritos de aquel entonces: Spider-Man y la Antorcha Humana.  Pues en esta ocasión deben vérselas entre los dos contra una banda de ladrones de poca monta, que para tipos con sus habilidades pocas dificultades les presentan, solo que antes deben superar sus diferencias de ego, lo que en chicos inmaduros como ambos es un buen obstáculo que sortear.

8-The Amazing Spider-Man Nº 6 (noviembre de 1963): Otro nuevo rival de peso para el Arácnido, siendo este el primer “monstruo” al que se enfrenta, pues se trata de nada menos que del Lagarto.   Interesante resulta ser la reinterpretación que hace Stan Lee del clásico literario de El Extraño Caso del Doctor Jeckyll y Mister Hydede Robert Louise Stevenson, pues es un drama similar de un genio científico cuyos experimentos se van fuera de control.  Si bien algo similar pasó antes con el Doctor Octopus, acá resulta todo más trágico por tratarse de un sujeto que en su faceta “normal” es alguien dulce y amable, que nunca buscó transformarse en la bestia que viene a ser tamaño reptil humanoide.

9-The Amazing Spider-Man Nº 7 (diciembre de 1963): El esperado regreso del Buitre, quien va perfilándose como un villano de temer, pese a que su apariencia cercana a la ancianidad engaña haciéndolo ver como un criminal de segunda.  Es justamente esta gran diferencia de edad entre ambos contrincantes, uno maduro y amargado, mientras que el otro en la flor de la vida y en muchos aspectos inexperto, aunque también feliz, que se desarrolla una interesante oposición entre estos dos.  De igual manera se debe destacar el hecho de que es en esta historia, que surge el muy especial romance entre Peter Parker y Betty Brand, la secretaria del irascible Jameson.

10-The Amazing Spider-Man Nº 8 (enero de 1964): Un número muy singular en el que el Trepamuros no se enfrenta a ningún maleante y que sin embargo está lleno de humor y situaciones memorables.  Acá vemos cómo un duelo entre “machos” perpetrado por Flash Tompson para burlarse una vez más de Parker, lo hace quedar en ridículo, pues por supuesto que su contrincante lejos logra superarlo; sin embargo alguien noble como Peter, logra contenerse una vez más y es en dicho detalle que radica buena parte de sus virtudes.  A todo esto se agrega la presencia de un robot que se descontrola; por cierto, llama la atención su burda imagen, que responde mucho a la estética que se daba en los tiempos en los que se publicó esta historia a dichas máquinas (tan de portada de pulp).A todo esto se le agrega una pequeña pieza narrativa, de otra simpática disputa entre la Antorcha Humana y Spidey, quienes pese a todo su poder y bondadosas personalidades, no pueden ser más infantiles en sus rivalidades y que llevan a otro nivel las mismas disputas que hay entre Flash y Peter.
                                                           
11-The Amazing Spider-Man Nº 9 (febrero de 1964): La introducción de Electro, enemigo de respeto y poseedor de un llamativo disfraz que luego en su versión Ultimate cambiaría tanto.  Por otro lado, no se puede obviar la parte más dramática de este número, que tiene relación con los problemas de salud de la anciana y dulce tía May, que tantas preocupaciones le provocan a su atribulado sobrino, dando pie a varios episodios como este y memorables a lo largo de la cronología de Spider-Man.

12-The Amazing Spider-Man Nº 10 (marzo de 1964): Los villanos tipo gánster poseen un papel bastante significativo dentro de las historietas del Arácnido, siendo este un justiciero que por sobre todo es un paladín urbano, de modo que una de sus mayores inquietudes es impedir que las calles de su amada ciudad sean asoladas por el crimen organizado.  Es así que entre sus viñetas destacan sujetos tales como Kingpin y Cabeza de Martillo, grandes representaciones comiqueras de los mafiosos que tan fuerte raigambre poseen en la tradición ficticia (y real) de USA.  Sin embargo antes de estos dos surgieron en sus páginas el curioso trío compuesto por los Forzadores, cada uno con su particular aspecto y habilidad para el crimen y que a diferencia de otros villanos del género, no poseen superpoderes y no obstante no dejan de ser atractivos gracias a la configuración que les dieron sus creadores.  A todo esto, se suma el importante debut de un secundario tan destacado en las historias de Spidey, como lo viene a ser el periodista del Daily Bugle Frederick Foswell, un hombre que se mueve de una manera muy especial en los colores grises del mundo.

13-The Amazing Spider-Man Nº 11 (abril de 1964): Sin dudas que esta corresponde a la narración más dramática de todo el tomo, demostrando que en aquellos “tempranos tiempos” en la que fue realizada, el impactante giro tomado por sus acontecimientos. resulta plausible por escapar de los recursos infantiloides para otorgarle a todo un cariz más grave…Y es que en este número muere un personaje, lo que trae serias consecuencias para el futuro de Spidey y algunos de los suyos (consecuencias que en todo caso se irán dando de manera gradual, a gusto de los guionistas que se irán sucediendo en la colección y con lo que queda clara la genialidad de estos al no olvidar las historias más antiguas, para ir conectándolas a las más recientes).  Pues todo esto pasa gracias a la reaparición de Doc Ock, quien debido a esta intervención suya queda sin dudas consignado como uno de los tres mayores enemigos del Cabeza de Red.  El maleante rapta a Betty Brand, de modo que al más rancio estilo de los clásicos,  el (super) héroe debe ir en pos de la inocente y desprotegida mujer a la que ama.


14-The Amazing Spider-Man Nº 12 (mayo de 1964): Continuación directa de la trama anterior, que implica un espectacular enfrentamiento digno de las mejores historias de acción, entre los dos oponentes en un parque de atracciones.  El título de esta obra no puede ser más sugerente: Desenmascarado por el Doctor Octopus.  Sus páginas poseen una de las imágenes más célebres en tantos años de historietas de Spidey (¡Adivinen qué muestra esta ilustración bellamente realizada por Steve Ditko!).   Por otro lado, tras el combate púgil entre Flash Tompson y Peter Parker en el número 8 de la serie, vemos las secuelas de la vergonzosa derrota del guapo atleta a manos de quien consideraba un alfeñique, lo que provoca que otro gran secundario de estas historias, la hermosa rubia platinada Liz Allen, comience a ver con otros ojos a quien antes ninguneaba y con ello se arme una especie de triángulo amoroso (con muchos celos por parte de Thompson) entre los tres compañeros de instituto (Liz, Flash y Peter).

15-The Amazing Spider-Man Annual Nº 1 (1964): Complemento a la inolvidable historia contenida en el primer anual de Spidey, que contiene el segundo volumen de esta colección dedicada a la etapa original del superhéroe.  El nombre de este agregado lo dice todo y corresponde a Cómo Stan Lee y Steve Ditko crearon a Spider-Man.  En solo 3 páginas y de manera muy divertida, los autores nos cuentan cómo surgió tan destacado personaje, usándose a ellos mismos de protagonistas para demostrarlo (hay que averiguar qué grado de verdad hay en la manera humorística en la que nos presentan todo esto).

16-The Fantastic Four Annual Nº 1 (1963): Otro complemento a un anual, en este caso al primero de los 4 Fantásticos.  Esta vez se cuenta de manera más compleja el primer encuentro entre nuestro Amistoso Vecino y la familia marvelita por excelencia.  Dibujada por Jack Kirby, quien por entonces llevaba los pinceles de la revista de este grupo, se encuentra llena de diversión que deja claro que pese al talento de los 4 Fantásticos, un principiante solitario como Spidey no deja de sorprender por su ingenio y capacidad para sortear los lastres que se le ponen en el camino.


Lágrimas de sangre, tripas desparramadas y cerebros mordidos por Romero (primera parte).

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       Con tanto zombie por ahí en las películas, los videojuegos, los cómics y las series de TV (¿Quién no conoce en la actualidad The Walking Dead?), el común de los mortales ignora que el responsable de todo este boom de los muertos vivientes comedores de carne huma fresca, George Romero, nos dejó hace solo 4 días atrás.  Nacido el 4 de febrero de 1940 y muerto a los 77 años, fue un importante cineasta dedicado al género del terror que dejó tal legado, que tal como ya se expresó en las primeras palabras de este párrafo, introdujo uno de los monstruos más famosos dentro de la cultura popular.
       En varias ocasiones me he referido a este hombre en varios post y que desde adolescente he admirado profundamente,  de hecho hace rato que le dediqué una etiqueta dentro del extenso listado de temas que tengo en el blog, pero nunca (salvo ahora) me había referido en exclusiva a su obra… Y ahora es el momento adecuado.
      Si bien desde niño me han gustado las historias de terror, no obstante a este artista solo lo vine a conocer ya de adolescente, gracias a la querida colección de la revista Fangoria que empecé a comprar.  Fue así que en uno de sus tantos reportajes y textos varios, apareció su nombre, haciendo primero referencia a la proeza que le significó realizar cuando aún no cumplía 30 años, la obra que le otorgó fama para la posteridad: La Noche de los Muertos Vivientes (1968).  Y como toda una guía para los amantes de las historias de horror, gracias a esta revista me fui enterando de su filmografía, deseando adentrarme cada vez más en las profundidades de sus pesadillas.
     Pero años antes de que llegara a mis manos tan especializada publicación, ya era un consumado fanático de este tipo de historias, si bien de más pequeño luego pagaba el precio de mis obsesiones con las pesadillas que me provocaban y el miedo a la oscuridad.  Llevo mis recuerdos a alrededor de 1989 ó 1990, cuando el VHS reinaba en las funciones caseras de todo tipo de películas.  Mi papás no me comprarían mi primera máquina reproductora de estas cintas hasta diciembre del 90, razón por la cual debía conformarme viendo películas en un videoclub cerca de mi casa y en el cual si uno pagaba el coste de un arriendo, podía ver la cinta que quisiera (los dueños interesados en ganar dinero, no tenían inconvenientes en que menores de edad gozasen títulos para mayores,  siempre y cuando pagaran la cuota respectiva; claro que no sé si eso pasaba en el caso de solicitar una porno). De este modo me ponía de acuerdo con mis amigos para juntar los $500 pesos que en ese entonces salía este beneficio.  Y así fue que me encontré con varias cintas por primera vez, muchas de ellas verdaderas joyas de la cinematografía fantástica tales como Robocop y El Resplandor.  Por lo general iba los sábados, siendo durante un largo tiempo esta mi única instancia para darle en el gusto a mi amor por el cine, ya que fue más entrado en la adolescencia que me dispuse a ir a los teatros por mi cuenta con mis pares.
      Y en una de estas funciones privadas me encontré con Creepshow (1982). La verdad es que no sé si para aquella época ya sabía quién era Stephen King, el cual se entretuvo un montón adaptando para su amigo George Romero, algunos de sus cuentos para este filme de 5 historias autoconclusivas y con un hilo conductor, homenajeando los viejos cómics de terror de la desaparecida editorial EC.  La idea principal de esta producción fue entretener, nada de crítica social, ni temas complejos, solo sustos, monstruosidades y efectos gore al más puro estilo de las historietas que esta dupla y el resto de sus amigos quisieron tributar.  Aquella vez salí de la exhibición con esa alegría que solo un niño puede llegar a tener, cuando se han encontrado con algo tan formidable, por ser novedoso para la mente de alguien inexperimentado y que por eso en lo único que piensa es en conseguir más y más de lo mismo (bueno, para ser sincero cuando uno es grande, obsesivo y ñoño, de vez en cuando se vuelve a este estado, je).  Como datos adicionales acerca de este trabajo, puedo contarles que cuenta con la participación de varios actores consagrados, algunos de ellos al principio de su carrera, pero ya en aquel entonces notables (como Ed Harris y Ted Danson); se pueden mencionar además la participación de Leslie Nielsen, Adrienne Barbeau y John Colicos, entre otros. Mención aparte es la breve, aunque entretenida intervención de Tom Savini, otro gran amigo de Romero, que apareció en varias de sus películas y que además es también un consagrado director y maquillador de efectos macabros.  Por otro lado, el mismo Stephen King fue protagonista de la primera historia, demostrando su versatilidad a la hora de pasar a otro campo artístico. Asimismo su música electrónica es sin dudas soberbia, a cargo de John Harrison, quien además de compositor ha trabajado como director en algunos de los episodios de la serie Tales from the Darkside,creada por el mismo Romero y luego hizo para la pantalla chica las miniseries de Dune (2000) e Hijos de Dune (2003), sobre los aclamados libros de ciencia ficción de Frank Herbert.   Por último, no se puede olvidar que la adaptación al cómic de esta perla del séptimo arte fantástico fue hecha por otro maestro, Berni Wrightson (quien también nos dejó este año, así que espero que ambos artistas se reencuentren en el más allá).


Trailer de Creepshow.
     Como ya saben, el título anterior fue mi primer encuentro con George Romero, no obstante la segunda vez en que pude disfrutar con una de sus cintas, fue con su debut.   Quienes no conocen esta joya del séptimo arte, que lejos sobrepasa el género al que pertenece, deben saber que cuando la realizó su creador no hace mucho que había salido de la universidad y tras conseguir algo de experiencia y dinero filmando comerciales, se puso de acuerdo con unos amigos para realizar una obra de miedo.  Con un presupuesto ínfimo, excelentes actuaciones y más encima un guión potente a cargo del propio Romero, como también una fotografía en blanco y negro cuidada, que ayuda a mantener la atmósfera pesadillesca de todo, el filme se convirtió en un verdadero semillero para realizar nuevas historias al respecto.  Las escenas de masacre zombie, en especial cuando estas criaturas aparecen comiendo carne, según se cuenta fueron posible gracias a la contribución de carniceros amigos, que no vacilaron en hacerse publicidad de esta extraña manera y de paso contribuir al arte (je).


Trailer de La Noche de los Muertos Vivientes.

      Solo los prejuiciosos y quienes nada saben de la ópera prima de Romero, ignoran el transfondo de esta y que en clave de ciencia ficción postapocalíptica (pues antes de ella los zombies solo aparecían como entidades de carácter sobrenatural, debido a la magia y al vudú), aborda el tema de la desarticulación de la sociedad civilizada ante las catástrofes; en otras palabras, muestra cómo el ser humano ante cualquier circunstancia que mine su seguridad, de inmediato actúa usando su instinto y deja de lado su racionalidad.  Pues la violencia tal como está demostrada en esta obra, no solo viene de los cuerpos revividos (que en realidad pueden ser comparados con las bestias que atacan tan solo para comer y no por un acto de maldad inherente), sino que de los vivos que tal como se muestra hacia el final de esta tragedia, actúan regocijándose en la miseria en la que se encuentran.
      Otro punto destacable de tan capital largometraje, es que fue una de las primeras películas gringas en tener de protagonista a un afroamericano, siendo el resto de los personajes principales y secundarios blancos.  Es así que este hombre aparece con dotes heroicas frente a la adversidad, con una regia estampa llevando un traje de corbata y dejando con todo esto más que claro, el papel importante que hace rato ya poseía esta minoría étnica en la comunidad de su país. 
      Siendo que por razones de error de su distribución este filme es de dominio público, han aparecido fragmentos suyos en un montón de otras producciones, siendo homenajeada y parodiada muchas veces.  Al respecto, se puede mencionar el único episodio de Halloween de la serie Medium, en el que la protagonista se ve inmersa dentro de esta cinta, la que es recreada de manera sorprendente, a la par de que usaron también imágenes reales de la película. 
      En 1990 se realizó un remake por parte de Tom Savini, el colega amigo de Romero ya mencionado.  Los resultados hicieron honor al original, pues contaron con la producción del propio director de la cinta primigenia, quien además cambió en algunos aspectos el guión para mejorar lo que le pareció era necesario.  No obstante en 2006 y 2015 se realizaron otras versiones, estas sin considerar a Romero dentro de su realización.
     5 son en total las secuelas directas de La Noche de los Muertos Vivientes, todas ellas llevadas a cabo por el propio Romero, si bien en distintas épocas.  Al respecto hay que mencionar la que viene a ser la trilogía original, completada entre los años 1978 y 1985 respectivamente.  La primera de ellas lleva el nombre de El Amanecer de los Muertos Vivientes y está ambientada nada menos que en un centro comercial, al que llegan un grupo de sobrevivientes a refugiarse, convirtiendo este templo al consumo en su santuario (ironías por parte del director).  Sin embargo pese a toda la seguridad que supuestamente había en este lugar, aun así no logran ser capaces de derrotar a las hordas de muertos caníbales, para quienes al parecer el centro comercial les trae recuerdos de cuán felices fueron gastando su dinero en dichas dependencias.  La escena de desmembramiento a una de las víctimas aún viva, es sin dudas una de las más famosas del cine de terror.  En 2004 tuvo su remake, bastante elogiado por cierto, dirigido por Zack Snyder, hoy famoso (y despreciado por algunos) por sus adaptaciones cinematográficas de cómics DC.



      La tercera parte de la llamada trilogía original zómbica de Romero se llama El Día de los Muertos.  En esta entrega se abordan dos temas caros a la ciencia ficción más crítica: primero la presencia de mad doctors (científicos locos), en la figura de un especialista que desea “amaestrar” a los muertos vivientes y se obsesiona con ello, olvidando en parte de sociabilizar con sus congéneres; a la larga como sucede en la vida real y en estas historias ficticias, el progreso humano queda reducido a nada, porque nuestra especie nunca logra ser más fuerte que la naturaleza misma. Luego, siendo el director-guionista un ideólogo antisistema gringo de fuertes convicciones, no podía dejar pasar en este filme una sentencia en contra del militarismo y el fascismo hasta cierto punto; es así que en la cinta en cuestión vemos a un grupo de uniformados, que pese a la devastación en la que se encuentra todo, trata de controlar lo que sucede; pero más que para salvaguardar a la humanidad, como otro intento de conseguir poder bajo sus propias directivas y no a través del concenso.  Lejos más sangrienta que sus predecesoras, de seguro a su mayor presupuesto y a las posibilidades técnicas de la época, es considerada no obstante por muchos como la menos lograda de esta primera trilogía.   En 2008 se estrenó un remake a cargo de otro director especializado en el terror, Steve Miner, que se estrenó directamente al mercado hogareño; lamentablemente no tuvo buenas críticas.
      En 2005 George Romero sorprendió a sus seguidores a lo largo del mundo, al regresar al cine que lo hizo famoso y al que él mismo ayudó a hacer popular, con una nueva entrega de su saga y que se puede considerar como la primera parte de una segunda trilogía: Tierra de los Muertos.  Pese a que en términos económicos, este nuevo episodio en su serie no puede ser considerada como una producción de alto presupuesto (pues no alcanzó a costar los 20  millones de dólares), el buen uso de los recursos a su disposición permitió la realización de una cinta en verdad notable; en este sentido se debe apreciar la participación de varios actores de renombre, muchos de ellos ya con toda una carrera de consagración dentro del cine de terror: Dennis Hooper, John Leguizamo y Asia Argento (la hermosa hija de Dario Argento, también amigo de Romero y el que le produjo El Amanecer de los Muertos y con quien codirigió Los Ojos del Diablo).   La película nos muestra un mundo en el cual ya son pocos los humanos que quedan, habiéndose extendido la plaga zombie al punto de que los vivos deben vivir en ciudades fortificadas, para no convertirse en comida de los muertos vivientes.  Y es en medio de una de estas últimas utopías (en realidad toda una distopía), que radica la mirada incisiva de nuestro amado director, al dejar constancia de la corrupción en los llamados líderes del pueblo, en la figura del mandamás de la ciudad en la que transcurre la historia y quien a la larga resulta mucho más pernicioso que los mismos monstruos.  Personalmente debo decir sobre esta obra, que para mí tiene un valor muy importante, ya que ha sido la única de la serie que he podido ver en el cine, pues cuando estrenaron las anteriores o bien no había nacido (en el caso de la primera) o bien era demasiado pequeño (y ni sabía que existían); en el caso de las que le siguieron, para pesar de muchos nunca las exhibieron en mi país en el circuito comercial.
     El siguiente capítulo dentro de las películas de zombies de Romero corresponde a El Diario de los Muertos (2007), que en cierto sentido más que una secuela, se puede considerar como que su argumento transcurre en paralelo a los acontecimientos de la cinta original; puesto que cuando suceden, recién está comenzando el apocalipsis zombie.  Su guión cuenta de un grupo de jóvenes universitarios de la carrera de cine, quienes ante lo que está pasando, filman cámara en mano todo lo que ocurre, en una especie de reality show.  Es en todo esto que resalta la crítica a los medios de comunicación masivos, en especial la televisión, que profita de las desgracias ajenas, a través de estos muchachos que actúan con una falta total de empatía y aprovechando la morbosidad para conseguir notoriedad.  A diferencia del resto de otros filmes de la saga, su autor incorporó el humor negro para convertir este título en toda una parodia al espectáculo de la violencia gratuita, que venden los supuestos profesionales del “cuarto poder”.

      De 2010 data Survival of the Dead (ocupo el título en inglés, debido a que nunca la pillé por estos lares en una edición para Latinoamérica), la última parte de la serie y, para pesar nuestro, la despedida de George Romero como director.  Teniendo en cuenta el argumento del largometraje que le antecedió, este otro viene a ser en cierto sentido su secuela directa, ya que también estamos aquí en los comienzos de la epidemia zombie.  Los protagonistas son tanto un grupo de militares, como dos familias enemigas entre sí, siendo que estos dos grupos habitan una isla aislada del resto de la población y a tal lugar llegan los uniformados, para desestabilizar en parte con su presencia invasiva la aparente armonía del lugar.  Una vez más aparece en la trama, la idea de domesticar a los muertos vivientes, lo que como era de esperar no trae los resultados positivos esperados.

Lágrimas de sangre, tripas desparramadas y cerebros mordidos por Romero (segunda parte).

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       En un momento Romero sostuvo la idea de dirigir dos más películas de zombies para cerrar su saga, no obstante al final lo que hizo fue realizar junto a Marvel Comics una novela gráfica de 15 números llamada Empire of the Dead (2014-2015), que bien puede ser reconocida como su último legado a la temática que él mismo convirtió en uno de los temas favoritos de la gente.
       Pero la filmografía de este verdadero Maestro del Terror no solo dio a su público historias sobre muertos vivientes, tal como ya ha quedado demostrado en la primera parte de este homenaje a su persona.  Pues en lo que concierne al resto de su trabajo, se debe mencionar su otra película de ciencia ficción, terror y catástrofe llamada The Crazies.  En ella un experimento militar (ultrasecreto como bien es habitual en este tipo de argumentos) se desbanda y ello provoca que la población civil cercana al lugar del proyecto, al ser infectada se entregue a una orgía de asesinatos sangrientos…La verdad es que nunca he contemplado esta obra, sin embargo sí vi con gran placer su remake de 2010, producida por el propio Romero, la cual en su momento recibió excelentes críticas, además de muy buenos resultados en taquilla.
      De 1978 data Martin, su propia interpretación del tema del vampirismo, si bien alejada de los aspectos sobrenaturales.  Es así que el argumento aborda esta dependencia por la sangre humana desde el punto de vista de la psiquiatría, a través de un joven de personalidad errática que siente el deseo de beber tal sustancia, cometiendo crímenes para conseguirla; por lo tanto estamos frente a un caso de trastorno de personalidad.  Asimismo la trama aborda el erotismo ligado a la figura de estas criatura de la noche, aspecto que acá se entiende en el caso del muchacho incapaz de mantener una relación sana con mujer alguna, de modo que su despertar a la sexualidad se relaciona con las fantasías propias de alguien que está experimentando este aspecto suyo, pero llevado a un terreno escabroso.  En su metraje el propio Romero se permitió interpretar a uno de los personajes, mientras que el ya mencionado Tom Savini, hizo acá su primera colaboración con su amigo de toda la vida.  Si bien esta película es supuestamente la favorita de su autor y además ha tenido críticas sobresalientes, la única vez en que la vi, me aburrió como una ostra, quizás porque en aquellos tiempos era demasiado cerebral para una adolescente inexperimentado como lo fui en su momento (así que tendré que echarle un nuevo vistazo).





















     

     Poco antes del filme con el cual tuve mi primer encuentro con Romero, Creepshow, apareció Los Caballeros de la Motocicleta (1981), toda una rareza en la carrera de este y de la que sin embargo guardo muy buenos recuerdos de la única vez en que la vi, durante mi etapa escolar.  Eran plenas vacaciones de verano y había prendido la tele para dedicarle tiempo al cine de trasnoche, cuando me encontré con esta pieza bizarra de carácter melodramático, sobre un grupo de motoqueros que realiza espectáculos al aire libre, simulando las leyendas artúricas.  Uno de los dos momentos que tengo persistentes en la memoria es la conversación entre dos varones, bien “machos” ambos, en la casa rodante que al parecer compartían y donde uno de ellos le dice al otro que si todo sale bien, de ahora en adelante serían pareja (o algo así); fue una de las primeras ocasiones en las que vi una historia que abordaba la homosexualidad y sin embargo, para la mentalidad de un chico de esa edad, ver la naturalidad con lo que pasaba eso (sin caer en los arquetipos caricaturescos de la feminización generalizada de los gays), fue algo revelador.   Por otro lado, cuando hace un breve papel nada menos que Stephen King, como un burdo hombre del público, sentí gozo al reconocer a mi ya por entonces escritor favorito (por tanto si ya sabía bien quién era este señor, debía estar a semanas de cursar el tercero o cuarto medio, con 16 ó 17 años de edad).
      1987 fue el año en el que apareció Creepshow 2, que si bien no dirigió Romero, sí coescribió el guión junto a su compañero Stephen King.  A diferencia de la entrega anterior, esta la vi por primera vez en una función nocturna de TV un día viernes, sorpresa que pillé en la pantalla chica a manera de premio tras una semana completa de clases como escolar.  Su afiche tan en el estilo de los cómics de la añorada editorial EC, lo recordaba de habérmelo encontrado en los diarios de más pequeño y en especial el spot publicitario, que los tenía ambos en la retina y con grandes deseos de verla.   Si bien no llega a los niveles de excelencia de la primera cinta, la historia del medio (ya que esta vez se compone de solo 3 fragmentos), es sin dudas de antología por ser una adaptación que le hace honores a uno de los “cuentos de monstruos” más famosos del señor King.  De igual manera la trama que enlaza a los tres episodios, de un niño que se quiere vengar de los muchachos que lo acosan, mezclando la imagen real con la animación a la más pura estética de los cómics EC, resulta de lo más entretenida y bien lograda.


    Monos Diabólicos (1988) es el nombre que se le dio acá a Monkey Shines, sofisticada historia de terror de carácter psicologista y que está valorada entre lo mejor de su autor (si bien no se encuentra entre mis predilectas), otorgándole importantes premios internacionales especializados.   A diferencia de otros trabajos suyos, esta obra no es ni una historia original suya, ni está relacionada con la narrativa de Stephen King y sin embargo sí está basada en una “desconocida” novela del género de un tal Michael Stewart.  Su argumento gira en torno a un apolíneo atleta y estudiante de derecho, quien tal como comienza el filme tenía un pasar idílico, hasta que un absurdo accidente de tránsito lo deja en silla de ruedas, sin poder utilizar cualquiera de sus extremidades.  El hombre como es de suponer entra en depresión, hasta que un amigo suyo científico que experimenta con primates tratando de aumentar su inteligencia, le pone a su servicio a una mona.  El animal es entrenado por una bella mujer, involucrándose románticamente ambos.  Por otro lado, cuando todo parecía ir bien, resulta que debido a los químicos suministrados a la bestia se produce una especie de lazo telepático entre amo y mascota, proyectándose las frustraciones del humano en la criatura, la cual comienza a actuar de manera violenta y mortal.  No puede ser más interesante la manera de cómo se aborda a través de la relación entre el protagonista y su animal, el tema del dominio de los instintos por sobre la razón, que pese a millones de años de evolución en nuestra especie aún siguen dominándonos.  Destacable es también la actuación de Jason Begue, quien logra inspirarnos lástima y simpatía en su rol de discapacitado, el que interpreta con una credibilidad impactante, y que con aun manteniendo su belleza física, no deja de representar la fragilidad humana (me fue imposible no recordar al también fallecido Cristopher Reeve, quizás el Superman cinematográfico más querido en la historia, quien debido a otro lastimoso incidente quedó postrado de por vida en una silla de ruedas…Un hombre tan imponente y hermoso como el mismo Begue).  Teniendo en cuenta la temática de este título, hayamos a su vez la vieja noción moralista de los límites de la ciencia, debido al supuesto actuar poco profesional del amigo del protagonista, quien incluso se ha hecho adicto a la misma sustancia que inocula a sus cobayas.  La dirección de Romero es sin dudas soberbia, demostrándonos acá su talento para trabajar en las condiciones que implicaba el guión (con animales y un actor haciéndose pasar por un cuadripléjico), de tal manera que lo que podría haber parecido falso o ridículo, salió perfecto en su realización.


Trailer de Creepshow 2.
      
       En 1990 fue cuando se unieron tras las cámaras dos grandes del cine de horror como vienen a ser George Romero y Dario Argento, quienes al menos desde la ya lejana época de El Amanecer de los Muertos que no trabajaban juntos.  En esta ocasión inspirados en otro maestro de las historias espeluznantes, si bien literarias, Edgar Allan Poe, realizaron cada uno de ellos una muy personal adaptación de uno de sus cuentos clásicos: el italiano veló por hacer su versión de El Gato Negro, mientras que su colega optó por trasladar a la pantalla grande El Extraño Caso del Señor Valdemar.  Romero se dio el gusto de volver a trabajar con Adrienne Barbeau, protagonista de una de las historias de Creepshow.  El acompañamiento musical de otro genio ligado al terror, como lo es Pino Donaggio (responsable, entre otros grandes trabajos, de la increíble partitura de la primera versión audiovisual de Carrie, dirigida por Brian de Palma y también de otras memorables cintas de este otro gran artista), otorgó sin duda una de las mejores bandas sonoras en un filme de Romero.
    
      Y es cuando por fin llego a la película que más me gusta de nuestro director, siendo además mi cinta de terror predilecta de entre todas las que he visto en mi propia existencia: La Mitad Siniestra (1993).   Sabido ya por quienes conocen de antemano la vida y obra de este cineasta (como por los que se han tomado el tiempo de leer este texto), la fuerte fraternidad entre Romero y Stephen King.  Pues el nivel de aprecio y admiración del escritor hacia su amigo es tan grande, que le dedicó una de sus novelas más emblemáticas: Christine; de igual manera su predilección por La Noche de los Muertos Vivientes ha llegado a tales niveles, que no solo ha escrito al respecto en varias ocasiones, sino que su única novela sobre zombies (bueno, su reinterpretación del tema), Cell, viene a ser su mayor tributo para la película de Romero.  Pues volviendo a la película en cuestión, fue la primera cinta que vi de este director en pantalla grande y luego solo tuve tal gusto con la ya mencionada Tierra de los Muertos.  Justamente supe de la existencia de esta cinta gracias a la misma revista Fangoria, que le dedicó extensos reportajes y los que atesoré como todos sus textos que tuvieran que ver con mi narrador favorito.  Creo que habrá pasado al menos poco más de un año para que se estrenara en las salas acá, puesto que cuando la revista escribió al respecto, el largometraje estaba con problemas de distribución, ya que el estudio que la produjo quebró y por ello se atrasó su exhibición.  Está sellado en mis memorias más significativas la ocasión en que estando a solas con mi abuelito Daniel (el papá de mi madre), a semanas de su fallecimiento (puesto que se encontraba en cama y yo lo visitaba para charlar y leerle, además de escuchar música juntos), le conté entusiasmado sobre mis deseos de ir a su estreno.

      - Abre ese cajón- Me dijo. Lo hice sin saber lo que me esperaba.- ¿Cuánto cuesta la entrada?
       - Mil pesos- Qué increíble lo “barato” que eran las cosas en el pasado.
       - Saca entonces lo que necesites.
      
        La verdad es que no me esperaba tal gesto.  Nunca antes que yo recordara mi abuelito había sido tan dadivoso conmigo y en ningún momento fue mi propósito manipularlo para que lo hiciera.  Era un día jueves y en aquel tiempo daban por primera vez las películas nuevas los viernes.  Con el corazón henchido acudí a mi cita con tal fantasía oscura.
              El argumento de La Mitad Siniestra (solo vine a tener el libro y leérmelo un par de años después), gira en torno a un escritor al que el espíritu de su hermano gemelo, que nunca llegó a nacer, lo acosa con el propósito de conseguir su supuesto derecho a vivir y a costa de su vida.  La novela en la que se basa es una de las más violentas de su autor y en ese sentido la adaptación realizada por Romero no se queda atrás.  Hay mucho amor hacia lo hecho por King en esta adaptación.  Lo sobrenatural está muy bien trabajado, así como las salvajadas perpetradas por el ente maligno, interpretado muy bien por Timothy Hutton, quien hace ambos papeles (los dos hermanos).  La historia en sí aborda un popular tema ya clásico: el doble maligno, también llamado doppelgänger de la lengua alemana y entre cuyos antecedentes literarios se incluyen clásico como El Extraño Caso del Doctor Jeckyll y Mr. Hydede Robert Louis Stevenson; no obstante también es una obra que hace referencia al desdoblamiento del artista a través de su obra y del impacto positivo o negativo que puede llegar a tener esta, así como hacer referencia a la genialidad de los creadores, muchas veces a un paso de la locura.  Pese a ser una historia de terror tan gráfica, llega a ser hermosa en su puesta en escena y a la suma de toda esta maravilla se debe agregar la gran banda sonora realizada  por Christopher Young, destacado músico de otros filmes de terror tan notables.


Trailer The Dark Half.

      Si bien voy a dejar en el tintero 3 filmes de la década de los setenta de Romero, no puedo terminar este tributo y repaso su obra, sin mencionar El Rostro de la Venganza (quizás la única cinta de Romero en cambiar tanto su nombre al llegar a Latinoamérica, puesto que en realidad de llama Bruiser, o sea, Matón).  En esta ocasión el director-guionista regresó al terror de tipo psicológico, volviendo a dejar de lado el gore que tanta gloria le dio, para sí retomar la crítica social que había dejado de lado en sus últimas producciones.  De este modo la película en cuestión, es nada menos que una ácida mirada al mundo de los empresarios y en especial a la publicidad, al representar acá la frialdad y competitividad a través de una agencia de modelos femeninas, dirigidas por un tipo hedonista y egoísta que no puede ser más desagradable.  La pérdida del valor al respeto humano y desenfreno total (no dejar de apreciar los excesos de cierta fiesta de Halloween, en la que incluso hay al menos un menor de edad en tal evento), son objeto de la acción punitiva de uno de sus antiguos victimarios y quien aprovecha una ocasión muy especial para ello.  El simbolismo detrás de la máscara con la que amanece el protagonista, así como de la nada o más bien a manera de una proyección de su deseo de liberarse de sus frustraciones, lo llevan a cometer las acciones que bajo su propia identidad habría sido incapaz de realizar.

Una curiosidad: afiche japonés de Bruiser.

De vuelta al Mundo Disco.

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     Hace años ya que no leía a Terry Pratchett y a su famosa y extensa saga de fantasía humorística de Mundodisco, que tantos momentos gratos (y risas) me ha dado. Y no por falta de ganas, sino debido al hecho de que no había vuelto a pillar más de sus libros por estos lares (bien saben quienes me conocen que no leo en digital) y la única vez en que volví a tener otro título de la colección estaba a un precio, que a mi parecer, era exorbitante (todos los tomos que me he comprado al respecto, los he conseguido en oferta…y por lo general libro que consigo o bien lo adquiero de esa forma…o me lo regalan).  Amilcar no pensaba ni nacer (y ya está por cumplir los 8) y a su hermanito Bruno todavía le quedaba harto por llegar a este mundo, así que harta agua ha pasado bajo el puente desde la última vez.  Sin embargo en la última FILSA tuve la suerte de conseguir 3 volúmenes a buen precio cada uno.   “¿Cuál será mi última lectura de los 41?” me pregunté no hace mucho.   La idea mía era que no fuera de mucha extensión, para comenzar los 42 con otro texto (uno de Stephen King, ideal para las vacaciones de invierno).  De modo que me decanté por Pies de Barro, el que en todo caso me terminé el primer día de estas vacaciones de invierno que ya están por acabar.  Así es que ahora es el momento de hablarles de esta obra de la que tenía pendiente escribir.
       El Mundo Disco es un sitio imposible, al menos para nuestra idea de lógica y las reglas de la física, ya que se trata de un sitio plano que está encima del lomo de cuatro elefantes gigantescos, los cuales a su vez se sostienen sobre el caparazón de una tortuga aún más inmensa.  En Mundo Disco conviven los seres más estrafalarios de este tipo de narrativa, sucediendo buena parte de sus historias en la cosmopolita ciudad de Ankh-Morpork.  Es así que el título al que le dedico estas palabras transcurre en este sitio, pues justamente tiene que ver con la saga dedicada a su más que curioso cuerpo de policía, más conocido como la Guardia.
       Siendo la tercera novela en torno a este grupo de agentes de la ley multirracial y cuyos miembros no todos pueden ser considerados como sujetos valientes, que como es propio de estos libros los antihéroes abundan más que los héroes mismos, fue publicada por primera vez en 1996.  En pocas palabras la trama es la siguiente: una serie de asesinatos ocurridos en muy extrañas circunstancias, tiene aterrados a los habitantes de la ciudad; más encima el Patricio (o sea la figura máxima de autoridad en  Ankh-Morpork) está siendo envenenado, lo que implica que la Guardia debe resolver ambos misterios a toda costa.  La investigación para saber quién o quiénes son los responsables depara grandes sorpresas, por no mencionar sus muchos momentos de gran diversión y que tienen relación con el humor desternillante tan habitual en esta serie.
      El nombre de la novela hace referencia a un grupo de personajes que toma vital importancia dentro del argumento: los golems.  Provenientes de una famosa leyenda medieval judía, acerca de una criatura mágica creada por un rabino para proteger a su gente del acoso de sus enemigos, se trata de seres que tal como en la tradición clásica son hechos a partir del barro y a los que se les otorga vida a través de palabras escritas sobre su cabeza.  En la novela trabajan para la gente en los oficios más peligrosos, debido a su fuerza y aparente indestructibilidad, en una especie de esclavitud, ya que no los consideran personas, ni vivos en realidad (algo así como máquinas).  No obstante cada uno tiene su propio nombre y pese a que no pueden hablar, se comunican escribiendo, siendo que además tal como queda demostrado interactúan entre sus pares en lo que viene a ser una comunidad.  Las muertes que se están sucediendo los convierten en los principales sospechosos de ello.  La historia comienza con estos seres y no puede ser más enganchador para el lector ávido de sana entretención:

     “Era una noche cálida de primavera cuando un puño llamó a una puerta con tanta fuerza que se doblaron los goznes.
      Un hombre salió a abrir y se asomó a la calle. Venía niebla del río y la noche estaba nublada. Era como intentar mirar a través de terciopelo blanco.
      Pero más tarde pensaría que había habido siluetas allí fuera, más allá de la luz que se derramaba sobre la calle. Muchas siluetas que lo observaban con cautela. Y se le ocurriría que tal vez había habido puntos de luz muy débil…
      La silueta que tenía justo delante, sin embargo, era inconfundible. Era enorme y de color rojo oscuro y parecía una figura de arcilla hecha por un niño para representar a un hombre. Sus ojos eran dos ascuas.”

       Si bien la novela posee el humor característico de la saga a la que corresponde, aborda varios temas serios que en comparación con otros títulos que le precedieron, le otorgan verdaderos momento de sublimidad, en especial en los diálogos chispeantes entre los personajes.  Entre las reflexiones a las que nos invita el libro encontramos:
       La autenticidad: Teniendo en cuenta que la Guardia posee una composición heterogénea entre sus miembros, encontramos no solo humanos entre sus filas, sino que también hay varios enanos, trolls, al menos una gárgola y hasta una licántropa (¿Existe este término en femenino para referirse a una mujer lobo/loba?).  Es así que cuando se supone que la única dama de la guardia vendría a ser la última mencionada en esta lista, en contra de lo inesperado, hay al menos una dama de esta otra especie y que debido a la barba que pese a todo tienen estas también, pasa desapercibida entre los demás. Cuando Jovial Culopequeño (no puede ser más hilarante su apellido) entra en amistad con Angua, la relación entre ambas va influyendo a la enana, de modo que esta comienza a redescubrir de una manera muy graciosa su propia femineidad.  En paralelo a ello, la misma Angua tiene conflictos personales con la condición de su especie, pues teme no poder controlar sus impulsos en noches de luna llena y cometer algún error, razón por la cual está seriamente pensando abandonar su trabajo.  Es así que la misma aceptación que tienen estas dos de su persona, apoyándose mutuamente, hace que al final los dos personajes consigan cierta plenitud que les otorga la tranquilidad suficiente, para estar tranquilas con quienes son.
Disfrutando este bello libro en la micro.
       El valor de la vida: Como ya lo he dicho, en la novela nos encontramos con la presencia de los golems, los que en la práctica son considerados por la gente como objetos y justamente solo por ser distintos. La crisis que entra a desarrollarse con los asesinatos que se están produciendo, pone en tela de juicio sus intenciones.  Es así que ligado a todo esto y a lo expresado en el párrafo anterior en la figura de Jovial, Angua e incluso buena parte de la dispar Guardia, que la llamada otredad, en cuanto a cómo asumimos la diversidad que nos rodea como algo normal de nuestra vida, invita tanto a la tolerancia, como a  tener una mirada amplia sobre lo que en verdad viene a ser convivir con todo esto, en armonía con los demás y con uno mismo.
        No debe dejar de mencionarse el elemento policial del texto, que homenajea tanto como satiriza los grandes clásicos del género sobre misterios criminales y la investigación de los sabuesos de la ley para resolverlos.   Más encima el cuartel de la Guardia recibe nada menos que el nombre de Pseudópolis Yard, una clara alusión al famoso Scotland Yard de las narraciones de Arthur Conan Doyle sobre Sherlock Holmes.  Por lo tanto en esta obra y en clave humorística, se encuentran los pasos típicos para desentrañar la verdad y hallar al culpable: como recorrer buena parte del territorio (lo que da paso a la descripción de la variopinta geografía del lugar), interrogatorio de sospechosos (que permite introducir personajes muy graciosos en general) y hasta análisis forense (gracias a la presencia de… ¡Un alquimista!).
        Si bien esta novela no corresponde a las dedicadas a la muy simpática Muerte, no podía dejar de aparecer aunque sea en unas pocas líneas, tan simpático personaje (representada al más clásico estilo medieval con guadaña, capucha y aspecto esquelético).  A continuación un fragmento de su breve intervención, solo para saborear algo más el buen humor que destila esta obra:

        “En el Museo del Pan de los Enanos, situado en el callejón Tiovivo, el señor Hopkinson, el conservador, estaba algo alterado. Dejando de lado otras consideraciones, lo acababan de asesinar. Pero en aquel momento estaba optando por considerar esto un enojoso detalle sin importancia.
        Lo habían matado a golpes con una hogaza de pan. Se trata de algo muy poco probable incluso en la peor de las panaderías humanas, pero el pan de los enanos tiene unas propiedades asombrosas como arma ofensiva. Los enanos consideran la panadería una de las disciplinas bélicas. Cuando hablan de comerse una torta saben a qué se refieren.
        —Mire esta muesca de aquí —dijo Hopkinson—. ¡Ha estropeado toda la corteza!
        Y TAMBIÉN EL CRÁNEO DE USTED, dijo la Muerte.
        —Ah, sí —dijo Hopkinson, con la voz de alguien que considera que los cráneos van regalados pero que es muy consciente del valor que su escasez da a una buena pieza de exposición—. ¿Pero qué tiene de malo una simple cachiporra? ¿O incluso un martillo? Yo podría haberle proporcionado uno si me lo hubiera pedido.
        La Muerte, que por naturaleza tenía también una personalidad obsesiva, se dio cuenta de que estaba en presencia de un maestro. El difunto señor Hopkinson tenía una voz chillona y llevaba las gafas colgando de un cordel negro —su fantasma lucía ahora el equivalente espiritual de las mismas—, y estas eran siempre señales de una mente que sacaba brillo a la parte inferior de los muebles y guardaba los clips sujetapapeles organizados por tamaños.
      —Es una vergüenza —dijo el señor Hopkinson—. Y también una muestra de ingratitud, después de que yo les ayudara con el horno. De verdad me temo que tendré que protestar.
      SEÑOR HOPKINSON, ¿ES USTED CONSCIENTE DE QUE ESTÁ MUERTO?
      —¿Muerto? —trinó el conservador—. Ah, no. Eso no puede ser de ninguna manera. Ahora no. Es de lo más inconveniente. Ni siquiera he catalogado las magdalenas de combate.
      NO IMPORTA.
       —No, no. Lo siento pero no me va bien. Va a tener usted que esperarse. Ahora no puedo ocuparme de esa clase de tonterías.
       La Muerte se quedó perplejo. Después de la confusión inicial, la mayoría de la gente se sentía en cierto modo aliviada al morirse. Era como si les quitaran un peso subconsciente de encima. Como si las habas cósmicas estuvieran contadas por fin. Había pasado lo peor y ya podían, metafóricamente, continuar con sus vidas. Poca gente trataba el asunto como un simple incordio que podía desaparecer si se quejaban lo bastante.”

        Tal como es habitual encontrar en los libros de Mundodisco, hayamos en sus páginas un montón de personajes tanto bizarros como entrañables, muchos de ellos ya conocidos por los lectores de la colección (obviaré de este listado a las dos féminas ya mencionadas más arriba):

Comandante Sam Vimes: El miembro de mayor rango de la Guardia de Ankh-Morpork, es un hombre inteligente y de poca bulla, quien lleva ya mucho tiempo trabajando con la ley y que a veces recuerda con nostalgia el pasado más sencillo, en el cual apenas eran un par de agentes los que componían su equipo y no se necesitaba el gran despliegue de la actualidad.  Confía en sus hombres y sin dudas que es un líder entre tanto sujeto “raro” con el que le toca trabajar, sacando lo mejor de ellos y sus particularidades.  En esta historia es quien mayormente lleva el curso de la investigación.  Pese a su poco amor hacia el Patricio, se podría decir que es un ejemplo de rectitud, al dejar de lado su desprecio hacia este, al velar por la protección de su vida.
Capitán Zanahoria Fundidordehierroson: Segundo al mando en la Guardia, de niño fue criado por enanos, de modo que es todo un experto en su cultura.  De apariencia imponente, guapo y musculoso, a su figura gallarda lo acompaña un corazón tan noble e inocente, que en la práctica es amigo de todo el mundo; acostumbra tratar a todos bien, entre inocentes y culpables, lo que con su manera tan especial de ser da paso a varias situaciones jocosas.  Tiene una relación de cercanía con Angua, que hace pensar que tienen un amorío entre los dos.
Cabo Cecil "Nobby" Nobbs: Un sujeto de apariencia insignificante, con la cara llena de protuberancias (poco agraciadoen otras palabras), de personalidad perezosa y poco valiente, además de gustos groseros, con tendencia al robo…Por lo tanto, es el que menos se esperaría encontrar en la Guardia debido a sus varios defectos.  Pese a todo es tolerado sin mayores inconvenientes entre los suyos.  En el transcurso de esta obra, aparece un documento legal que lo convierte en la atención de los poderosos de la ciudad, ya que según dicho texto resulta ser descendiente de la casta aristocrática de mayor nobleza del lugar; por lo tanto ante la eventual pérdida del Patricio, muchos desean tenerlo como su “rey marioneta”.  Las aventuras de Nobby al respecto, corresponden a un arco argumental paralelo dentro de la novela y que no puede ser más entretenido.
Dorf: El golem que posee mayor relevancia dentro de la trama, es el principal sospechoso de los asesinatos que se están cometiendo.  Una vez llegados al inesperado clímax, viene a constituirse en el personaje que más sorpresas otorga al lector.
Pequeño Loco Arthur: Un gnomo que al parecer vive apartado de su gente, conviviendo con la “gente grande”.   Vive cazando ratas, las que vende con fines “culinarios” a sus clientes y pese a su tamaño, es tan ágil que es un contendiente de temer.
Dragón Rey de Armas:Vampiro con cientos de años de edad que lidera un negocio dedicado a la heráldica (o sea, realiza con sus empleados escudos para las familias pudientes para demostrar su supuesta sangre azul),  De aspecto cadavérico y al parecer de trato afable, guarda un gran secreto.

Terry Pratchett como personaje de su hermoso legado literario.

Mis películas favoritas sobre fantasmas. Séptima parte: Los Otros.

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7.1. El Director: Alejandro Amenábar.

       Nacido el 31 de marzo de 1972 en Santiago de Chile, apenas tenía un año de edad cuando sus padres decidieron trasladarse a España debido a los vaivenes políticos del país americano, que dieron paso a la dictadura militar de Pinochet.  Debido a ello, el resto de su vida (o al menos buena parte de ella hasta su madurez) la ha desarrollado en la Península Ibérica, pese a que mantiene la doble nacionalidad chilena-española.  Con el tiempo se transformó en un importante director de cine, ejerciendo además de guionista, productor y hasta compositor de la banda sonora de sus propias cintas.  Ante el enorme despliegue audiovisual de su trabajo, a medias entre el de tipo más artístico y el comercial, como bien ha sucedido con muchos de sus colegas no yanquis, que como él comenzaron a filmar en su propia tierra, recibió el llamado de Hollywood para realizar cintas en lengua inglesa; no obstante pese al apoyo de los productores usacas, siempre ha estado ligado al cine independiente.  Lamentablemente pese a su talento, es de esos cineastas que no se caracterizan por ser muy prolíficos, pese a un montón de premios que posee y a los seguidores que ha conseguido a lo largo de todo el mundo, expectantes al estreno de nuevos títulos de su autoría.  Si bien el filme suyo agregado a esta serie de post sobre películas de fantasmas, posee hasta cierto punto elementos de terror (con varios sustos entre medio), destaca más por otras características de su filmografía, las que implican el elemento dramático de sus personajes que se ven superados por la tragedia que es superior a sus débiles fuerzas y la atmósfera de suspenso que agrega al argumento una carga angustiante a la historia misma.
      Su filmografía comprende los siguientes largometrajes:


Tesis (1996): Su ópera prima que le hizo creer a buena parte del público y la crítica que estábamos frente al nuevo sucesor de los grandes del séptimo arte de terror y suspenso, pero que lamentablemente solo fue así en sus comienzos, ya que luego se decantó por tramas de corte más intimista.   Es la historia de una joven estudiante de cine que mientras realiza una investigación acerca de la violencia audiovisual, se tropieza nada menos que con una red de películas snuff (filmes que graban asesinatos en vivo).  Ante tan atractivo debut los aplausos le llegaron de inmediato, y con ello sus primeros galardones, mientras que los gringos, como no, quisieron sumarse ante el interés por historias similares, filmando en Hollywood 8MM con Nicholas Cage (que en todo caso no es mala), aunque con casi 3 años de atraso.
Abre los Ojos (1997): Su única incursión hasta la fecha en el género de la ciencia ficción, llegando sin dudas a superar con este trabajo el éxito y la calidad artística de su primera obra.  Por otro lado, en la época en la que realizó esta película, Amenábar le dio en el clavo, al abordar de una manera muy ingeniosa (y además tan hispana) un tópico que recién estaba cobrando interés en la pantalla grande (en especial gringa, si bien los japoneses ya estaban abordándolo hace rato a través de sus animes), la realidad virtual, el cual en todo caso posee antecedentes de clásicos literarios españoles como La Vida es Sueño de Calderón de la Barca  (Johnny Mnemonic, 1995, Dark City, 1998 y The Matrix, 1999).  En su historia un chico mujeriego y orgulloso de su dinero y buena facha, ve su vida convertida en una verdadera pesadilla, cuando debido a un accidente del cual es responsable queda horriblemente desfigurado.  Una vez más USA no se pudo resistir y en 2001 se estrenó el obligado remake, Vanilla Sky, que para muchos resulta inferior a la cinta original y pese a los buenos artistas involucrados en ella.
Mar Adentro (2004): A partir de esta cuarta cinta suya Amenábar comienza a alejarse cada vez más en el tipo de cine que le vio nacer, si bien no por ello pierde fuerza su labor (muy por el contrario).  Esta vez estamos hablando de una llamada bioepic, o sea, de un largometraje basado en la vida de una persona real.  En este caso trata acerca de un hombre que lleva alrededor de 3 décadas postrado en vida en su cama, tras quedar tetrapléjico muy joven y quien solo desea acabar con su vida a través del llamado suicidio asistido.  Su deseo de que alguien lo ayude a conseguir su objetivo por razones morales y legales se convierte en toda una odisea.  El caso causó conmoción en su momento y lo mismo sucedió con esta cinta al estrenarse.  Los premios esta vez le llovieron más que nunca al director/guionista.  El rol protagónico de Javier Bardem, todo un camaleón español de la actuación, no dejó indiferente a nadie ante tal despliegue escénico. 
Ágora (2009): Su filme español más caro a la fecha se trata de una obra de carácter histórico, ambientada entre los siglos IV y V, en los primeros tiempos del Cristianismo en Alejandría.  Trata acerca de Hipatia, una filósofa y mujer de ciencias que debido a sus creencias y a sus enseñanzas, se gana primero el desprecio y luego la condenación por parte de las autoridades cristianas.  Si bien en el guión Amenábar se toma varias licencias históricas y ficticias, su obra que bien para muchos es considerada como algo netamente anticristiano, en realidad puede más bien ser vista como una defensa a la libre expresión y a la tolerancia.  Pese a tratarse de una película pagada por dineros españoles, se encuentra hablada en inglés y tiene como protagonista a la hermosa y notable actriz británica Rachel Weisz; además cuenta con otros artistas hollywoodenses.
Regresión (2015): Corresponde a su segundo trabajo hecho por encargo para Hollywood y para el cual contó con varias estrellas,  tales como Ethan Hawke y Emma Watson.  Si bien no he tenido el gusto de ver esta producción (prometo hacerlo pronto), ya que no se estrenó por estos lares, sé que puede considerarse como su regreso al cine de suspenso ¿Y de terror tal vez? Trata acerca de un culto satánico que es descubierto por un detective y por un psicoanalista.



7.2. La película: Los Otros.

      Difícil tarea tengo a la hora de referirme a esta cinta de fantasmas al más puro estilo de Sexto Sentido(en cuanto a su trama dramática y emotiva) y a su final sorpresivo, elementos a través de los cuales se ve un clara influencia de la cinta de Shyamalan, sin contar la gran revelación hecha hacia su inolvidable clímax. A ver cómo me sale todo esto…
      Realizada en 2001, corresponde al tercer largometraje de Alejandro Amenábar y al primero llevado a cabo con dineros gringos.  La cinta cuenta con la notable actuación de Nicole Kidman (siendo que su por entonces marido Tom Cruise, ejerció de uno de los productores), demostrando una vez más con su participación que a su belleza admirable lejos la supera su propio talento, en lo que es considerado entre sus mejores papeles.  Respecto a esta labor de la Kidman, resalta el hecho de que si bien fue acompañada por unos pocos más histriones, el peso de la historia recalca en su personaje y que es debido justamente a la fuerza interpretativa de esta mujer, que la película en cuestión posee algunas de sus virtudes; ya que solo ante las emociones de su papel (soledad, frustración, dolor y miedo), el espectador es incapaz de no sentir empatía hacia esta fémina. 
      El argumento gira en torno a una familia que vive aislada en una hermosa isla perteneciente a Gran Bretaña, poco después de la Segunda Guerra Mundial.  Solo una madre y sus dos hijos pequeños habitan una enorme mansión, ya que todos los sirvientes se han ido y el marido/padre nunca volvió tras irse al frente de batalla.  Hasta que un día llegan 3 nuevos empleados a tomar las vacantes, una mujer y un hombre ya ancianos, más una muchacha muda.  Por otro lado, los niños se quejan de la presencia de espíritus que no los dejan tranquilos, a lo que su progenitora actúa con incredulidad, siendo que además comienza a sospechar de sus nuevos sirvientes. 
      Aparte de la protagonista destaca en el argumento la dulce ama de llaves, a cargo de la igualmente consagrada Fionnula Flanagan, quien se muestra tanto aquí maternal como alguien engañosamente confabuladora (pues es evidente que ella y los suyos guardan un gran secreto).  De igual manera se debe destacar la breve, aunque significativa participación de otro actor famoso, Christopher Eccleston como el esposo y padre, quien vuelve a su hogar como un hombre destruido por las crudas vivencias del conflicto bélico. 
      El director-guionista hace que en la práctica casi todo el metraje transcurra dentro de las paredes de la casa, otorgándole a un lugar tan hermoso como este un carácter claustrofóbico (en la práctica una verdadera prisión para sus dueños) y para lo que la fotografía se convierte en todo un apoyo, ya que permite la introducción de lo sobrenatural a través de los tonos oscuros y grises.  Pues en este caso no estamos frente a un guión que requiere de efectos especiales, sino que más bien se sostiene en lo que se sugiere.
      Por otro lado, un título como Los Otros, queno deja de ser tan ominoso e invitarnos al misterio y el temor  a lo desconocido, atiende a la idea primigenia del miedo hacia el Más Allá, en especial en lo que concierne a la posibilidad de una vida después de la muerte y que sin duda puede ser aterradora.  Por supuesto que los fantasmas son los Otros, pero… ¿Qué tan siniestro pude llegar a ser ese nivel de la realidad, que sobrepasa nuestros propios conocimientos? De este modo su realizador juega con la idea de que nada es lo que parece, que vivimos engañados y que solo somos capaces de aceptar la lógica de lo que queremos ver.  En cierto sentido el argumento es una reelaboración del mito de la caverna de Platón, ya que en especial es la madre quien al negarse salir de la aparente protección de las paredes, ha limitado su propia felicidad y la de quienes ama.
       Cabe hacer notar además el profundo catolicismo que rodea a la familia en cuestión, quienes por ser ingleses sería más comprensible fuesen anglicanos.  Puede ser que el elemento religioso tenga que ver con las mismas raíces hispanas de Amenábar, pero si bien la madre a cargo de la Kidman, confía en su fe como un medio con el cual se siente a salvo ella y su familia, el poder que hay detrás de la figura de la Virgen María y Cristo que aquí aparecen, más que verse como principios redentores, más bien tienen que ver con la culpa, que sin dudas recae sobre esta mujer; pues la fe tal como es presentada en este filme más que orientarse a un credo apoyado en el amor y la alegría, tiene que ver con el mismo temor hacia todo aquello que supera los límites de lo humano, de modo que la teología misma (que bien puede dar explicaciones acerca de lo que conlleva a la muerte), tiene sin dudas relación con esos otros, que tanto temen estos personajes.

       Una anécdota antes de terminar: Para hacer publicidad al eminente estreno de esta película en mi país, los distribuidores pusieron a lo largo del territorio varios afiches, habiendo varios de ellos en paraderos, malls y otros sitios públicos; sin embargo en esta vez hicieron una pequeña modificación en la imagen promocional o mejor dicho en el texto que la acompañaba.  Es así que pusieron “Del director chileno-español…”.  Pues resulta que como se fue tan pequeño a España este, no tuvo mayor relación con mi país y sin embargo en un arranque de chovinismo barato, apelaron a ello para interesar más al posible público.


Trailer.

¿Qué diablos han hecho con Spidey?

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     Quiérase o no nuestro Amistoso Vecino el Hombre-Araña es sin dudas el personaje más popular de todo Marvel, al punto que es  muy fácil desde niño sentirse atraído por este sujeto y que en su ajustado traje que cubre hasta su rostro, anda por las calles de New York protegiendo a los inocentes gracias a sus poderes arácnidos (y en especial debido a su propia valentía, que lo convierte sin dudas en uno de los superhéroes “más humanos” de todos).  Por esta misma razón, los productores lo han explotado al máximo para sacar provecho de su franquicia y es así que no hace mucho se estrenó una nueva película de imagen real, la cual ha provocado desde antes de su estreno ciertas polémicas.
     Tras la anterior incursión del Cabeza de Red en el cine, El Sorprendente Hombre-Araña 2: La Amenaza de Electro (2014), previa a su “reintroducción” en la última entrega cinematográfica dedicada al Capitán América, millones fuimos los que nos logramos convencer de que sus responsables la estaban haciendo bien por fin con este Peter Parker y que en efecto Andrew Garfield había logrado superar la huella que había dejado Tobey Maguire en la trilogía hecha por Sam Raimi (y nadie puede negar que estas otras cintas, son lejos lo mejor que se ha hecho en imagen real sobre el personaje); además al final de la segunda parte (y última) de esta versión del Trepamuros de Marc Webb, nos habían dejado entusiasmado con la promesa (que no llegó a cumplirse), de que en la siguiente entrega el justiciero se enfrentaría nada menos que contra los Seis Siniestros, la famosa pandilla formada por los 6 villanos más representativos de sus cómics clásicos: el Doctor Octopus, Misterio, Kraven el Cazador, el Hombre de Arena, el Escorpión y el Buitre. 
    Cuando el llamado Universo Cinemático Marvel comenzó a ir tan bien en la taquilla, la gente comenzó a pedir a gritos que Spider-Man se uniera al resto de los Vengadores, o sea, a todos aquellos personajes de los que Disney tiene los derechos (puesto que losX-Men, Deadpooly los 4 Fantásticos pertenecen a Fox); no obstante como es Columbia la empresa que hasta el momento tenía solo para sí a esta creación de Steve Ditko y Stan Lee, el panorama se veía difícil para hacer que o bien Maguire o bien Garfield se sumaran al costoso casting de los Vengadores…A menos que las dos productoras llegaran a un acuerdo.  Y así fue, aunque para ello tomaron la drástica decisión de si bien compartirían juntos al Cabeza de Red, tal vez para  no complicarse la vida, obviarían la continuidad conseguida hasta el momento con el anterior Spidey fílmico, partiendo desde cero en su reinicio cinematográfico… ¡Y todo en menos de 3 años entre la citada última cinta con Garfield y Capitán América: Guerra Civil.
     No se puede considerar como poco inteligente, lo que hicieron para conseguir que el más nuevo Spider-Man de carne y hueso calara hondo en la audiencia: lo dejaron como un añadido sorpresa a la inmensa gama de superhéroes que aparece en la segunda secuela sobre el Centinela de la Libertad.  Pues este ni aparece en los afiches y solo se vino a revelar su presencia en el último de los trailers que se hicieron antes de su exhibición.  Además, por mucho que uno se haya negado a tamaño “experimento” argumental y mediático, no se puede dejar de afirmar que esta primera aparición del más reciente Trepamuros para el cine, sin dudas que otorgó aún mayor realce a una película, que en general superó todas las expectativas.  Y Tom Holland como un Cabeza de Red aún mucho más muchacho que sus predecesores, en realidad que hace bien su trabajo.
      Así que cuando se prometió un próximo largometraje con este Hombre-Araña como protagonista, muchos nos entusiasmamos ¿Y a cuál de sus rivales se enfrentará ahora? Nos preguntamos.  Pues como ya ha pasado en otras ocasiones, lo visto en los adelantos prometía…Sin embargo a menos que se sea muy niño, se conozca poco de sus cómics o no se le pida tanto en su calidad argumental, el filme titulado como Spider-Man: El Regreso a Casa decepciona…y bastante.
      La cinta sigue a este Peter Parker “cada vez más joven” (como si le quisieran negar su derecho a la adultez en el cine, si bien queda claro de que se trata de una estrategia comercial para enganchar con el público menor, que a la larga son los que más compran merchandising al respecto), luego de los eventos de la cinta que lo presentaron.  Por lo tanto no es una obra sobre el origen de sus poderes (que en todo caso hasta los que no leen historietas saben de ello), a menos que lo tengan presente para una secuela (de hecho, del tío Ben nada de nada).  Sin embargo sí es una historia acerca de los comienzos de un superhéroe inexperto y hasta ingenuo, que estamos hablando de un “buen muchacho” que con suerte es un quinceañero. Ahora bien, sí se muestra algo del comienzo de la muy especial relación de maestro-discípulo con Tony Stark/Ironman, además de completar todo lo relacionado con su participación durante la llamada “Guerra Civil”, a través de interesantes flashbacks (a gusto de un servidor, de lo mejor de esta deficiente obra).
     Luego nos encontramos con el enfrentamiento con quien vendría a ser su primer villano dentro de esta nueva continuidad: nada menos que el Buitre, quien no solo corresponde a uno de los contrincantes más emblemáticos de Spidey, sino que además dentro de su cronología comiquera, viene a ser el segundo en enfrentarse a él (luego del Camaleón).  No obstante en un afán de o bien actualizar sus aventuras o hacer más “atractivos” a los personajes, esta versión del criminal volador se aleja de su antecedente de las viñetas, al dejar de ser un anciano y empero seguir siendo un hombre mucho más mayor que Peter, aunque aún lleno de energía.  No obstante sí conserva el sentido de la venganza hacia quienes cree que lo ofendieron y/o traicionaron, lo que más todavía en este caso lo convierte en un sujeto complejo, que escapa al estereotipo del “malo-malo”, al otorgarle una dimensión humana que incluso lo vuelve en alguien carismático.  Sin embargo toda esta caracterización del villano, que incluso en un muy gracioso guiño a los cómics Marvel lo relaciona con la cómica serie conocida como Control de Daños, se pierde bajo el resto de un guión que se aleja de todo ese melodrama que tan bien supieron llevar en las otras películas del Cabeza de Red y que mantuvieron el ritmo de los mismos cómics.
     Cuando se supo que nada menos que Michael Kaeton, el Batman de Tim Burton, se había adjudicado el rol de Adrian Toomes, más conocido como el Buitre, la expectación se hizo grande entre los más frikis; cabe recordar que además Keaton hizo de un “superhéroe” llamado Birdman (nada que ver el personaje de los cartoons de Hanna-Barbera), lo que acentuaba aún más la idea de volver a verlo con “alas”.  Y en realidad el diseño de su traje está bastante bien, llegando a ser aterrador… ¿Pero qué pasa cuando la historia es débil y todo se queda en eso, en solo imagen?
      Una parte importante dentro de las primeras historias del Trepamuros, viene a ser todo lo relacionado con su entorno estudiantil y donde figuran personajes tales como Flash Tompson y Liz Allen, compañeros suyos y luego amigos de toda la vida.  Pues estos dos aparecen en la película, siendo la primera vez en que la Allen sale en una de estas adaptaciones fílmicas.  Por otro lado, siguiendo la orientación actual de la sociedad de ser “políticamente correctos”, con el tema de la diversidad étnica, cultura y religiosa (que esta vez se olvidaron de la sexual), en la práctica abusaron de ello al punto de caer casi en el absurdo, ya que lo que se llega a mostrar de la Secundaria Midtown no puede ser más heterogéneo, con planos en los cuales abundan los estudiantes multiétnicos: árabes, judíos ortodoxos (o como se llame en su caso), asiáticos y otros.  La verdad es que esto no lo encuentro malo en sí, al contrario, lo alabo, sin embargo cuando llegan a caer en el absurdo de cambiarle la raza a un montón de personajes en una misma historia, me parece carente de espontaneidad.  Por ejemplo, puedo aceptar que la rubia Liz Allen acá sea afroamericana, que la verdad esta idea no es algo original de quien hizo el guión, sino que está sacado de la serie El Espectacular Hombre-Araña (2008-2009) y donde tal como sucede con este filme, de manera inaudita (ya que no sucede en los cómics) los adolescentes Peter y Liz tienen un romance…Sin embargo es con lo que hicieron con Flash Tompson, lo que me parece más absurdo, ya que de ser un rubio guapo y atlético, lo convirtieron en un tipo de apariencia india y flaco, lejos del cabeza de músculo adorable que todos conocemos.  Más encima le “inventaron” un mejor amigo que más ñoño no puede ser, de rasgos o bien latinos o bien polinésicos (la verdad no me queda claro qué raza es) y que además se llama Ned Leeds, igual que otro personaje clásico de las historietas, quien es claramente caucásico y nunca tuvo fraternidad con Peter que yo sepa (de hecho fue uno de los Duendes, enemigo acérrimo de Spidey). Además por ahí aparece una morenita de facciones latinas, que viene a ser algo así como una versión alternativa de la colorina Mary Jane Watson, M.J., la pareja más famosa de nuestro Amistoso Vecino.
      Uno de los puntos destacables de las historias de Spider-Man y de su evolución como superhéroe, viene a ser el hecho de que aún en la inocencia e inexperticia de su juventud, su persistencia para llevar a cabo su misión justiciera, lo viene a encumbrar por sobre otros adolescentes como él, ya que todo lo hace por su propia cuenta.  El hecho de que no tenga un maestro y deba aprender a realizar su labor aun cometiendo varios errores (sin nadie que le diga lo que está bueno y lo que está malo),  es un detalle valioso que se pierde en esta reinterpretación del personaje.  Por supuesto que da gusto tener nuevamente al simpático Tony Stark/Iron Man interpretado por Robert Downey Jr. (incluso tenemos el gusto de reencontrarnos con Happy Hogan y Pepper Potts), mas esta relación de maestro-discípulo bastante sui generis, resulta hasta forzada a la hora de querer diferenciar a este Peter Parker de los demás.
Aunque la peli me haya parecido "malita",
no podía dejar de retratarme con su  Spidey.
       Se trata de una película “livianita”, sin grandes  giros argumentales, que deja de lado lo más épico y emotivo de los títulos que le antecedieron y que sin embargo opta por el humor fácil para así congraciarse con su verdadero público objetivo: los menores de edad, quienes antes este nunca antes visto despliegue de tanto personaje adolescente, por supuesto que llegan a identificarse.  Pues salvo en el caso del villano de la historia, la trama gira en torno a los escolares, quienes salvo Liz, no son retratados como más maduros de lo normal.  Y es por todo esto especialmente, que el espectador mayor puede defraudarse con facilidad.  Uno puede llegar a entretenerse y hasta reírse, pero luego vienen las “malditas comparaciones” y tanta simpleza cansa.
        En atención al tal vez único momento de sublimidad de este filme, mencionaré una alusión directa a uno de los mejores cómics de laetapa de Steve Ditko y Stan Lee, cuando al cierre de la trilogía del Planeador Maestro, el Arácnido en un alarde de superar todo tipo de obstáculos, logra levantar muchos kilos de escombros encima de él y mientras el agua además amenaza con ahogarlo.   Es así que en esta película se hace su homenaje a tan gran momento en la cronología de Spider-Man.
        Siendo que el cotizado Michael Guiachinno se encargó de su banda sonora, lo hecho para esta ocasión incluso parece poco inspirado, como todo un trabajo por encargo, pues ni siquiera posee un tema “pegajoso” que podríamos llamar como el caracterizador de este más nuevo Spidey (lejos fue mejor lo que llevó a cabo el año pasado con Doctor Strange). 
        Habiendo ya  visto joyitas este año del género como Logan,Wonder Womany hastaLego Batman: La Película, esta otra cinta por supuesto que queda desmejorada y de seguro será lo “peorcito” de este 2017 en materia de superhéroes para la pantalla grande (que me guardo todas mis esperanzas para Liga de la Justicia y en especial Thor: Ragnarok).


Trailer Nº 1: Cuando prometen más de lo que dan.

Aprendiendo a despedirse de “Sense8”.

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    Tras una muy aplaudida primera temporada de 13 episodios en 2015 de la serie de ciencia ficción “para adultos” Sense8, sus millones de seguidores en todo el mundo nos quedamos esperando con ansias su segunda temporada… ¿Qué vendrá a continuación? Nos preguntamos luego del último capítulo visto, que cerró muy bien la compleja historia de su debut, aunque con unas cuantas  subtramas que daban para seguir desarrollando la historia más allá de lo exhibido.  Y es que según algunos estaba pendiente aún su renovación para otra temporada, lo que se logró, si bien más corta que la anterior (solo 10 “míseros” episodios) y más encima para poder disfrutarlos tuvimos que esperar más de un año.  
     Pese a que el año pasado no llegó la ansiada segunda temporada, al menos sí tuvimos de “regalo” un especial de Navidad, que en realidad se puede entender como el primer capítulo de esta o su número 0, ya que no se trata de una historia autoconconclusiva, si no que se encuentro por completo relacionada con el resto de su desarrollo.   Dentro de todas las sorpresas dadas a sus incondicionales, esta pieza cercana a las dos horas de duración, se encuentra el significativo detalle de que el personaje africano Capheus (uno de los protagonistas) comenzó aquí a ser interpretado por otro actor.  Si bien puede parecer raro este cambio (ya que por lo general cuando se va un actor en un programa “matan” su rol), apenas se nota el cambio y tal vez el trabajo de este otro histrión destacó gracias a todo lo que sucede con su papel.  De igual manera inolvidable puede resultar para muc@s la muy especial celebración del cumpleaños de los sensates, el grupo interracial y cultural que da pie al argumento, que da paso a una escena de sexo que bajo otros responsables parecería solo una escena de orgía, pero que aquí está filmado de manera hermosa y con la sensibilidad que ya habían demostrado sus responsables.
     El resto de lo visto entre el año pasado y este en Sense8 estuvo solo a cargo de Lana Wachowski y J. Michael Straczynski, que ahora la también otra hermana de la familia (pues también se cambió de sexo, llamándose ahora Lilly) se alejó del proyecto por razones que hasta el momento ignoro.  No obstante el show ha mantenido su nivel de calidad artística, destacando entre otras cosas todas las grandes revelaciones hechas acerca de la muy especial naturaleza de sus protagonistas, como también lo que concierne respecto a su villano (que si bien no es alguien de tipo carismático, sí en su falta total de empatía y personalidad desagradable, no deja de ser una excelente contrapartida a sus héroes).  De igual manera se debe aplaudir la excelente labor del montaje, que hace creernos que en realidad sus personajes pueden estar a la vez en dos o más escenarios a lo largo de todo el mundo, gracias a sus habilidades extraordinarias. 

Celebrando el cumpleaños de todos en el especial de Navidad.

     Que el guión siga extendiéndose a lo largo de tantos países y ciudades, abarcando tantas comunidades y realidades distintas entre sí, de manera paralela, no solo viene a ser un despliegue visual y de producción loables, si no que puede ser valorado como uno de los puntos fuertes de este programa, que muchos nos resistimos a su pronta finalización. Es así que ver algo como esta obra, sin dudas que viene a ser todo un placer para los sentidos, como un título de ciencia ficción televisivo único en su tipo. 
      Dos hechos de relevancia dentro de esta serie, viene a ser que se entra en conocimiento acerca de qué son en realidad sus personajes principales y, por otro lado, se explica acerca de lo concerniente a cuáles son los planes de villano “Whispers”, poniendo énfasis en la existencia de una organización secreta relacionada con toda esta gente (y he aquí la introducción de un tópico caro al género, que enriquece bastante la trama gracias a toda la intriga que nos depara).  De este modo llegamos a enterarnos de que los sensates pertenecen a una especie humanoide que se desarrolló a la par de los humanos, como lo que pasó en la prehistoria con los cromañones y  los neardendales, aunque en vez de desaparecer con el paso del tiempo (a diferencia de los últimos mencionados) se desarrollaron en plenitud.  Por otro lado, una entidad científica que originalmente se creó con intenciones de estudiar a esta gente, con propósitos benéficos, entra a la acción, en la cual el propio Whispers está involucrado, aunque este tiene sus propias intenciones egoístas y por eso ha desvirtuado todo lo bueno que alguna vez hubo en esta agrupación.
      Varios personajes nuevos aparecen a lo largo de la segunda temporada, destacando otros sensates que aparecen, entre buenos y malos, lo que permite ahondar en todo lo que viene a ser la caracterización de esta especie.  De igual manera, viejos conocidos vuelven para disfrute de los seguidores: los hasta no hace mucho misteriosos Angelica y Jonas, quienes mantienen hasta cierto punto el papel de mentores del grupo protagonista.  Sin embargo estos dos nos deparan sus propias sorpresas, algunas de ellas no por completo gratas. 
       La violencia y el sexo siguen formando parte de este programa, no obstante se podría decir que su dosis bajó considerablemente con respecto a lo visto en la primera temporada.  Y aún así la trama nunca pierde su orientación adulta, abordando varios temas de una manera compleja y rica: la amistad, la responsabilidad, el sentido de la familia, el honor, la autenticidad, la justicia y ahora, como algo nuevo, la política.  Junto a todas estas nociones y otras más, se nos entregan horas de diversión que va mucho más allá del mero escapismo, pues como las grandes historias, Sense8 resulta ser toda una metáfora acerca de nuestra propia humanidad.
        Sus personajes pasan por los siguientes eventos a lo largo del especial de Navidad y su segunda temporada:

Sun Bak: Uno de mis tres personajes preferidos, pasa gran parte de toda la temporada en estado de alerta, ya que tras tratar de sobrevivir en la cárcel en la que fue encerrada por las manipulaciones de su hermano, luego fuera de ella la vida le resulta mucho más complicado.  A través de ella aparece otro gran tema de las historias clásicas, la venganza y que acá pone en tela de juicio nuestros valores a la hora de justificarla.  Llama la atención el hecho de que siendo lejos la mujer del grupo más dura, sea quien más fácil llora de entre todos ellos (que la verdad no recuerdo a otros sensates en la misma actitud).
Nomi Marks: ¿El personaje más inteligente de nuestros queridos sensates? Buena parte de la temporada vive escondida de los agentes que andan detrás de ella por considerarla peligro público, debido a sus actividades como hacker. Se podría decir que gracias a sus conocimientos para manejar la tecnología, viene a ser el primer socorro de su gente ante el acecho de sus enemigos.  Por otra parte, la consolidación de la relación con su hermosa novia Amanita, así como su amistad con el simpático también pirata de la información Bug,  forman parte esencial del arco argumental dedicado a esta otra valiente mujer.
Lito Rodríguez: El guapo y sexy actor mexicano de filmes de acción, debe aprender a vivir con el impacto provocado por la noticia bomba acerca de su verdadera orientación sexual.   Poco a poco va enfrentando con más que dignidad tales cuitas y en otro muy buen ejemplo de lucha, ante el prejuicio social por su derecho a ser respetado (y apreciado) por quién es y no por ser el que los demás quieren que sea.  El también amor incondicional de su pareja Hernando y su mejor amiga (y anterior “novia de tapadera”) Daniela, son relaciones fundamentales en la consolidación de su plenitud.


Wolfgang Bodanov: Este maleante con corazón de oro, para quien la lealtad es un tema fundamental, sigue codeándose a su pesar con gente de la peor calaña, pues difícil resulta escapar del pasado de alguien como él.  Sin embargo su capacidad para sortear los peligros de una vida al límite como la suya, es otro de los grandes recursos con los que cuenta su especial familia.  Asimismo destacable viene a ser su flirteo con una sensate de otro grupo, por medio del cual queda de manifiesto una vez más su naturaleza salvaje, que lo convierte en tal vez el personajemasculino más atractivo de todos los protagonistas.  A su lado la fraternidad de Félix lo mantiene también como un hombre de principios, pese a su lado más oscuro.
Capheus Onyango: La vida para el más noble del grupo ha cambiado más que la de ningún otro, luego de los acontecimientos de la primera temporada, ya que en primer lugar tras salvarle la vida al poderoso mafioso que se cruzó en su camino, ha logrado sin proponérselo cambiarlo a una persona de bien y ahora cuenta con todo su apoyo (más encima este se ha enamorado de su madre, quien le corresponde); por otro lado, debido al impacto positivo que ha provocado en su comunidad, un partido político se acerca a él para pedirle que sea su candidato a Presidente de su país.  Y como si no fuera poco, comienza con una inteligente periodista un romance.  Jela, su mejor amigo, viene a ser otro de los pilares de su vida.
Will Gorski: Otro de los del grupo que se la pasa escapando, al punto de que pasa buena parte de la temporada en Finlandia eludiendo el acoso del desagradable Whispers, con quien tiene quiérase o no un lazo que entre los otros sensates no existe; es debido a esta razón que está buena parte del tiempo drogado y por ello ha tenido que sacrificar su carrera de policía y, lo peor, la estrecha relación con su padre (la que se resiente como ninguna otra).  Solo el amor de Riley logra mantenerlo a flote por entre toda la miseria en la que se encuentra. 
Riley Blue: De todo el grupo, el personaje que me resulta menos interesante, también se ha alejado de la vida pública para ayudar a su hombre, dejando de lado su carrera como DJ de renombre.  No obstante sus contactos le permiten a ella y a su gente encontrar los medios “farmacéuticos” adecuados para mantener al enemigo alejado (y además cobrar la revancha respectiva).
Kala Dandekar: Pese a su vida holgada que lejos supera la de cualquiera de su “familia”, se las tiene que ver con los conflictos relacionados con los negocios turbios en los que está involucrado su marido (quien en todo caso no es una mala persona), además de sobrellevar su propio matrimonio, a la sombra de su “comprensible” atracción por Wolfgang.

     La temporada termina con gran expectación por parte de su público, a ver para cuándo podremos ver su conclusión (¡y gracias a Dios por la presión de las redes sociales!).  Por último, solo mencionaré un muy divertido guiño a otro de los mejores filmes producidos y guionizados por las Wachowski, V de Vendetta, en una escena memorable en la que Nomi y Amanita se encuentran en un cine a escondidas, con un tipo llevando nada menos que la máscara de…¡Annonymus! 


La preciosa intro de esta serie.

El placer de las historias cortas (primera parte).

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     Quienes conocen a Stephen King, incluso entre quienes nunca lo han leído, saben que en su larga carrera ha escrito un montón de libros, muchos de ellos llevados al cine, a la televisión e incluso al cómic…con dispar resultado.  Asimismo la mayor parte de esta gente tiene claro que sus novelas por lo general son bastante extensas, acusándole muchas veces injustamente de “inflar” a propósito sus historias para sacar más provecho económico de ello.  No obstante lo que dicen estas malas lenguas se queda en puros prejuicios, cuando se obvia la inmensa cantidad de obras cortas de este autor, quien escribe de manera periódica entre un volumen más largo y otro, publicando sus relatos en numerosas revistas y colecciones prestigiosas, lo que le ha conseguido varias reconocimientos a nivel mundial, como uno de los grandes cuentistas de la actualidad.  Es así que a la fecha desde su ya mítico recopilatorio El  Umbral de la Noche(1978), King ha dado a sus “lectores constantes” nada menos que 10 tomos de este tipo hasta la fecha.   Pues al creador de clásicos comoCarriey Salems`Lotle gusta escribir historias y no solo lo hace por dinero, pues tal como lo demuestran estas antologías, lo que más le fascina es contarnos una buena narración para entretenernos, sobrecogernos y no solo aterrarnos, tal como queda demostrado en el tomo del cual ahora les hablaré.
       El Bazar de los Malos Sueños apareció en el transcurso de 2015, pero recién a comienzos de este año tuvimos el gusto de que saliera la edición  a nuestra lengua.  Mucho más extensa que la colección que le precedió, Antes del Anochecer, llega casi a las 600 páginas, que incluyen en esta ocasión no solo cuentos, sino que al menos 2 novelas cortas y además 2 poemas narrativos en un total de 20 textos.  Como es su costumbre desde su segunda colección de relatos breves (Different Seasson, que los editores españoles tuvieron la odiosa idea de publicar en dos tomos con nombre diferente y solo años después lo sacaron “como Dios manda”) el artista comienza el tomo con una introducción, la que es tan valiosa como sus obras narrativas (que en cuanto a su lírica, no es muy de mi gusto leer poesía y menos “traducida”, sin embargo por mucho que me guste el señor King, debo afirmar que me parece que este formato literario no es su fuerte); además, en este caso el escritor usa una muy bella metáfora para referirse a su propia actividad  como autor de historias de terror: la de un vendedor nocturno de objetos muy especiales.
      De igual manera ante cada historia (y en ambos poemas), tenemos la suerte de conocer el origen de estas obras, de modo que través el ejercicio de la memoria que hace su realizador, se nos conceden varios datos sabrosos de su biografía: recuerdos significativos de su pasado, juventud y madurez, como también varias anécdotas muy graciosas. En ocasiones nos llega a sorprender con su propia sinceridad, como cuando sin tapujos se refiere a su periodo de adicción a las drogas.
      Sin embargo antes de todo esto se encuentra la Nota del Autor, en la que Stephen comienza a dirigirse de manera directa a sus seguidores, para quienes deja de manifiesto que son estos escritos.  La Nota termina con las siguientes palabras:

      “Hay algo que más que quiero que sepas, Lector Constante: me alegro mucho de que los dos sigamos aquí.  Genial ¿No?”.

y debo decir que personalmente ello me llegó a lo más hondo, pues de inmediato sentí como si me lo hubiese dicho a mí mismo, ya que tal como hace unos años atrás mi autor favorito casi murió tras ser atropellado, yo mismo hace un par de años estuve a punto de dejar este mundo.  Así que razones hay de sobra para estar agradecido y por eso mismo este libro es toda una celebración a la vida para su creador, quien todavía sigue con nosotros dándonos estas inolvidables historias (así como yo me puedo sentir dichoso por esta nueva oportunidad que se me ha dado).
     El libro está conformado por:


1- Área 81: Luego de una obra tan potente como esta, en la práctica toda una novela corta, el llamado “lector constante” de Stephen King, quien más encima ha seguido su carrera por años y ya tiene bastante claro cuáles son las razones de que se le considere el Rey del Terror, queda más que enganchado a esta última antología suya.  Y es que esta obra es nada menos que un título correspondiente al estilo que tanta fama le ha dado a su autor, ya que se trata de una historia de terror puro y de un monstruo más encima (debe saberse que varios de sus mejores relatos de tipo sobrenatural poseen criaturas horrorosas y mortales, que están entre algunos de sus obras más destacadas, tales como La Nieblay sus cuentos La Caja y La Balsa).  Por otro lado, la truculencia y el elemento gore en general no deja de estar presente aquí.  Teniendo en cuenta esta manera tan soberbia de comenzar la colección fácilmente uno bien podría creer que el resto del volumen seguirá en general en la misma línea, sin embargo esto no es así y ello bien puede provocar más de una decepción.  En todo caso debe saberse que esta no es la única narración de este tipo, pero sí destaca entre las demás por sus características.
    Contada a través de capítulos nombrados por medio del nombre de los personajes y del modelo del auto que estos usan, trata acerca de una criatura que se “disfraza” de uno de esos vehículos para conseguir a sus víctimas, las que por supuesto se las come.   Todo un acierto resulta ser que la narración va dando protagonismo a cada uno de los que tienen la mala suerte de cruzarse con tal ser, llegando sin duda a agradar al lector, para luego sentir verdadera compasión ante su destino.  Pero, por otro lado, de todos los que se encuentran con este devorador de personas, es en la figura de nada menos que de 3 niños de distintas edades que la historia se detiene de manera muy especial, otorgándoles ciertos  rasgos heroicos, que aumentan la dosis de emoción a la obra.
     El automóvil como un elemento tan presente en la vida cotidiana de los seres humanos, que tal cual sucede con las casas representan en la literatura una metáfora de nuestra misma psiquis y/o cuerpo (o una extensión de ambos), vuelve acá a aparecer en la narrativa kingniana, luego de clásicos suyos comoChristine y Buick 8.  De igual manera el valor que le otorga el autor a la inocencia y la valentía infantil, nos hace recordar en su conjunto, al “tío Steve” que muchas veces sus Lectores Constantes extrañamos de vez en cuando.

2- Premium Harmony: Un relato por completo distinto al anterior, que nos trae a un Stephen King ya más actual y que escribe ahora más que nunca con soltura otro tipo de historias, aunque nunca perdiendo su capacidad para impactarnos y hasta conmovernos.
     Si bien este título se enmarca por completo dentro de cierto realismo contemporáneo y para nada se acerca al lado más macabro que le conocemos, sí vuelve a abordar de una manera muy especial acá un tema que es recurrente en su carrera: la muerte o, mejor dicho, la manera de cómo nos enfrentamos a la pérdida de un ser querido.   Es así que el escritor nos pone a la vista una vez más al dilema de nuestra mortalidad o más bien de quienes nos importan, deteniéndose en las reacciones que podemos llegar a tener frente a ello.  El dolor, la desesperación y la irracionalidad que puede llevarnos a sentir algo como esto, están descritos de manera magistral por este otro King (no menos valioso que el autor de historias de terror), ya que nos demuestra qué tan bien conoce como artista el alma de sus semejantes y es capaz de reflejarlo con tanta humanidad en una ficción como esta.
      Al girar la trama en torno a un matrimonio con problemas conyugales, trata también la dificultad del amor entre los adultos, pues según queda de manifiesto en este cuento, cuesta mantener el equilibrio en una empresa como esta.   Sin querer caer en el spoiler, lo sucedido acá sin dudas que nos remueve, sin tener que caer en el uso de monstruosidades o psicópatas para ello.

3- Batman y Robin tienen un altercado: Un nombre como este no puede ser más llamativo e intrigante, puesto que lo primero que se le viene a la mente a uno vienen a ser los cómics de famoso Dúo Dinámico.  Debe saberse además que el mismísimo Caballero de la Noche es el superhéroe favorito de nuestro autor y quien incluso realizó una bastante recomendable introducción, para la novela gráfica que a mediados de los ochenta cerró la etapa Pre Crisis del Murciélago.  De igual manera debe tenerse en cuenta que de seguro DC ni le cobró derechos por usar sus marcas registradas, gracias a la “publicidad gratuita” que le hizo, lo que en el caso de alguien menos popular no habría sido así.
     Pues su argumento sigue dentro de la línea más intimista que hayamos en el texto anterior, profundizando a su manera tan particular en las maravillas y miserias de nuestra sociedad, esta vez acerca de las relaciones padre-hijo.  Es así que sus protagonistas son un hombre ya maduro (quien rodea la cincuentena de edad) y su padre anciano con Alzheimer, quienes deben enfrentar juntos la entropía del paso del tiempo y sin embargo pese a todas las dificultades, se mantiene por sobre cualquier cosa el fuerte lazo que los une.   A su vez, está presente  en la narración el tema de la violencia y cómo esta nos idiotiza, algo que tan bien sabe abordar King.

4- La Duna: Volvemos a la narrativa de terror y de carácter sobrenatural más encima.   Como sucede con el subgénero, trata además de un misterio y del cual nunca llegamos a saber por qué suceden acontecimientos como este (tal como en la vida real con el azar), que si su realizador hubiese concluido todo explicando acerca del origen de las fuerzas extraordinarias que aquí aparecen, la habría pifiado.
     Tal cual sucede en el caso anterior, su protagonista rememora su vida, que los recuerdos siempre son importantes en las ficciones para conocer a fondo a los personajes y explicar quiénes son ahora en su presente, así como en la vida real a través de nuestros recuerdos podemos mantener la esencia de quienes somos.  Esta vez su protagonista es nada menos que un anciano ya jubilado, un juez más encima, quien debido a su experiencia profesional y vivencial se supone conoce bastante bien a sus semejantes, en especial la que concierne a la oscuridad que guardamos.
     Cuando Stephen King está ya dentro de la llamada “tercera edad”, pareciera que se siente cada vez más identificado con sus coetáneos, que este anciano no es el único que toma protagonismo en uno de los cuentos del libro.  En todo caso el examen de conciencia que realiza el protagonista, se equipara en parte al que realiza el propio King cuando nos cuenta acerca de la génesis de cada uno de estos relatos.

5- Niño Malo: Sin dudas que uno de los mejores textos que componen esta antología, tratándose de otra historia de terror, aunque esta vez más dentro del terreno del psicológico, pese a sus aspectos sobrenaturales.  Asimismo nos volvemos a encontrar con la presencia de los recuerdos, tan valiosos para darle un corpus dramático a la ficción y que esta vez nos vuelven a impresionar por todo lo que se nos cuenta.
     Su argumento gira en torno a un hombre que está por morir con la inyección letal por haber cometido un asesinato a sangre fría en plena calle, contra un menor de edad y bajo la mirada horrorizada de un montón de testigos.  El sujeto durante toda su reclusión permanece casi en silencio, incluso con su abogado defensor, hasta que se encuentra a horas de que se cumpla su sentencia y entonces le cuenta al leguleyo qué lo llevó a cometer tal acto.  Su narración es sin duda impresionante, tanto para su receptor como para nosotros, ya que en pocas palabras nos revela un rostro acerca del mal en estado puro inolvidable: bajo la apariencia de un niño bizarro, que tal como en las narraciones más tradiconales, juega con el engaño para cobrar sus víctimas.  Desde su infancia el protagonista vive acosado por este verdadero demonio y al que le debe más de una desgracia en su vida.
      Este cuento refleja muy bien lo que la maldad (y no solo humana) puede llegar a manchar de todo lo bello que hay en el mundo: la inocencia, la amistad, la esperanza y el amor.  A su vez aborda otro tópico importante dentro de este tipo de obras, el de la justicia, pues tal como se presenta al principio del relato, una cosa es la idea de justicia que posee una sociedad civilizada, con sus leyes, tal cual le toca conocer al protagonista en carne propia debido al crimen que supuestamente ha cometido…Y otra la que tiene que ver con conceptos más antiguos como la venganza, que ante un relato con estas características incluso llega a tomar ribetes cercanos a la justicia divina, ya que el niño malo que aquí aparece sin dudas que es un ser infernal que debe ser devuelto al agujero de donde salió.  Asimismo como estamos frente a fuerzas desconocidas o mejor dicho de naturaleza sobrenatural, queda de manifiesto que ni todo el poder o la voluntad del ser humano, puede contra estas mismas potestades extraterrenas; en otras palabras, somos poca cosa en comparación con la inmensa vastedad del universo.
    No se puede dejar de lado que por medio de este relato, King regresa a otra temática que maneja bastante bien: el drama carcelario.  Pues si bien esta parte de la ambientación no es lo primordial en su desarrollo, sí nos hace recordar ese otro tipo de clásicos suyos como Rita Hayworth y la Redención de Shawshank y La Milla Verde, obras en las que nos transporta sin dudas a esas claustrofóbicas construcciones y la verdad de la miseria de quienes se hayan confinados en sus paredes. 
     Luego de  Área 81, sin dudas que de lo mejor en lo que va de este libro.

6- Una muerte: Sabido por los lectores más acérrimos del señor King, es que este es un ferviente admirador de las historias ambientadas en el Lejano Oeste, siendo la mejor prueba de ello sus novelas de La Torre Oscura.  De este modo el presente texto viene a ser otro de sus homenajes a este escenario que tanto ama y conoce, demostrándonos su versatilidad para pasar de un estilo a otro y aun así mantenerse fiel a su pluma. 
     En esta ocasión vuelve a abordar el viejo tema de la justicia, que por supuesto tiene que ver con la presencia del mal en nuestras vidas, aunque a diferencia del cuento que le antecede, este se presenta a un nivel humano; de igual manera el bien, en esta caso la justicia humana, se encuentra en una figura constante en las historias gringas y las del propio King: el representante legal de la ley, que en este caso es nada menos que un sheriff de pueblo y quien debe hallar al despiadado que mató y violó a una niña inocente.

7- La iglesia de huesos: Empezaré este comentario acerca del primero de los dos poemas agregados a esta selección, diciéndoles que por mucho que me guste “Esteban Rey”, su lírica me aburre, puesto que además este género es el que menos me gusta de los tres grandes de la literatura (cabe recordar que los otros dos son el narrativo y el dramático, o sea, el teatro); además cuando se lee un poema traducido, se pierde mucho del original, que a diferencia de otro tipo de textos la lírica solo se aprecia por completo cuando el lector la aprecia en su lengua materna.
     De este poema de carácter narrativo, con un nombre tan ominoso y que no deja de mantener el característico tono macabro de buena parte de la obra de King, solo diré que trata sobre un grupo de personas que hace un viaje por un paisaje, sin dudas que dantesco.

8- La moral: Ahora viene otro de esos relatos en los que su autor se luce como uno de los mejores narradores de su generación y de la actualidad.  Pues sin ser una obra de terror, no deja de abarcar los grandes temas ligados a este género, como lo vienen a ser la oscuridad que anida en el corazón humano y/o la inclinación natural de las personas al mal (o al pecado, como podría verse a través de una mirada de tipo religiosa, que el nombre del cuento atiendo sin dudas a esta dimensión, aunque de manera indirecta).
      En cierto sentido esta historia recuerda a un filme de los noventa que en su momento provocó polémica, Una Propuesta Indecente, en la que un millonario ya entrado en años le ofrece a un matrimonio joven una suma increíble de dinero a cambio de acostarse con la mujer; por supuesto que esta oferta le trae varias consecuencias a la pareja, que llevan al espectador a más de un debate.  Es así que en este cuento, sin vacilaciones entre lo más destacado del tomo, usa una base parecida, al girar en torno a marido y mujer que son tentados por un anciano para cometer un “pequeño” acto de maldad.  Una vez cometido el trabajo por encargo, una serie de situaciones va demostrando lo fácil que se pueden desmoronar nuestros principios, si accedemos a dejarnos corromper por los demás.
      El atropello cometido por el matrimonio es sin duda deplorable y se mantiene al lector expectante a saber qué en realidad se le ha pedido para conseguir su “premio”; sin embargo radica en la mente retorcida del supuesto hombre de actitud intachable, que podemos encontrarnos con una exacta imagen de la idea de que nunca llegamos a conocer a los demás y que cualquiera de nosotros puede albergar los sentimientos más mezquinos. 
       La degradación por la que pasa cada uno de los personajes principales no es para ignorar, que al final nos queda la certeza de que solo depende de nuestra propia fuerza de voluntad, para mantener la dignidad frente a lo que llamamos el “pecado”.

9- Más allá: Junto con La Duna, puede ser considerado dentro de lo menos valorable en este libro (que por mi falta de “juicio poético”, dejo de lado los dos poemas que aquí se hayan).  La trama posee sus virtudes, pero la verdad encuentro esta historia una pieza demasiado menor en comparación con lo mejorcito de su autor. 
     Tal como dice su nombre, trata acerca de la vida después de la muerte, por lo que la narración recoge ideas clásicas al respecto, como ciertas representaciones del purgatorio, la reencarnación y el mito del eterno retorno. 
      Su protagonista es un hombre del cual nos vamos enterando que si bien no es un villano, tampoco es un derroche de virtudes (quien esté libre de pecados que lance la primera piedra), quien al fallecer se encuentra en una especie de oficina y tiene una muy interesante charla con quien lo atiende.
      Considerando los elementos de este relato, su dimensión moral (tan habitual en el género del terror y en autores con una educación religiosa como Stephen King) nos lleva al terreno de las consecuencias que tienen nuestros actos en los demás, como en nosotros mismos; de este modo al igual que en esa joyita que es La Moral (que al lado de este otro cuento hace que Más Allá pierda frente a tan buen ejemplo), se nos plantea el papel que cumple el libre albedrío en nuestras vidas y que no podemos ignorar si en realidad nos importan los demás y deseamos quedar con la conciencia tranquila.

10- Ur: Debo reconocer que por mucho que me haya gustado Área 81, este cuento (o novela corta considerando su extensión) es lejos mi favorito de todo este muy especial Bazar de los Malos Sueños.  ¿La razón? Pues que en pocas palabras es una historia inserta dentro de la saga que adoro de Stephen King, conocida como La Torre Oscura, o al menos tiene estrecha relación con varios de sus elementos: mundos paralelos, la misma Torre…y los Hampones con Chaqueta Amarilla (esos sujetos monstruosos que ya habían aparecido anteriormente en otras obras del “tío Steve”).
     Su argumento tiene que ver con un profesor universitario de literatura (otro de los tantos alter ego del propio King), quien en la práctica toda su vida ha sido un sujeto común y corriente, sin mayores detalles que lo hagan ser alguien extraordinario.  Un día decide comprarse un Kindle, o sea, uno de esos tantos aparatitos para leer libros en digital.  No obstante es por medio de este objeto propio de la modernidad, que se abre la posibilidad para encontrarse con la invitación a la aventura que significaría tener un objeto que en realidad no se trata de un avance de la tecnología (al menos en este caso), sino que se trata de un artefacto mágico.  El Kindle le permite acceder primero a un listado de obras hechas por los grandes autores de la literatura (como Shakespeare, Hemingway y mi compatriota Roberto Bolaño, quien es mencionado dos veces en este relato, lo que no dejó de admirarme), que no existen en nuestro mundo, aunque sí en otros.  Sin embargo todo se complica cuando accede a una función muy singular de la maquinita, que le permite leer noticias de nuestro futuro y decide evitar una tragedia a toda costa.
     El papel de la literatura en nuestras vidas queda más que manifestado en este entretenidísimo cuento, como también la existencia de las maravillas con las que nos podemos encontrar y que si bien difícilmente serán como este Kindle, sí pueden hacer de la existencia de uno algo mucho más bello.  De igual manera, tal como le pasa al personaje principal, queda expresado que dentro de cada uno de nosotros también habita un héroe…Solo hay que aprender a sacarlo a flote.

Preciosa portada...No sé en qué idioma.

Regreso al Mundo de Watchmen. Séptima Parte: Rorschach

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7.1- El Dibujante.

     Luego de Jae Lee (definitivamente uno de mis favoritos), de entre todos los grandes artistas del dibujo que trabajaron para Antes de Watchmen, sin dudas que el siguiente que tiene mi completa admiración por la calidad y estética de su trazo, viene a ser Lee Bermejo. Pues tuve el gusto de conocerlos hace años ya, gracias a una de las novelas gráficas más hermosas sobre el Caballero de la Noche, con las que me he encontrado a la largo de mi vida: Batman: Nöel, que él mismo escribió además de realizar sus viñetas.
      Debe saberse que este hoy en día consagrado caricaturista comenzó su labor nada menos que muy joven, como becario para WildStorm, el sello creado por Jim Lee en Image Comics y que luego pasó a ser parte de DC.  Sin tener mayores estudios formales a diferencia de muchos colegas suyos y valiéndose solo de su talento como autodidacta, sus primeras incursiones profesionales estuvieron en las franquicias de Resident Evil y Gen 13  entre 1998 y 1999 (siendo la segundo aquí mencionada una serie muy popular por aquellos años). 
     Ya conseguido una reputación en el medio, destacable viene a ser su labor en las páginas del Anual 1 de Wildcats, otro de los títulos estrellas de WildStorm y luego su salto en grande a DC, realizando varias colaboraciones para títulos sobre Superman y, por supuesto, Batman. 
      El sello Vertigo de la misma DC también lo ha fichado en más de una ocasión, como ha pasado con algunos de sus títulos insignia tal como Hellblazery 100 Balas.  En el caso de esta última colección mencionada, debe saberse que en ella trabajó junto a Brian Azarrello, el mismo guionista con el que ha hecho varias de sus obras más destacadas como Lex Luthor y Joker, además de esta misma miniserie dedicada a Rorschach y a la que me referiré en breve.
     Para Marvel ha firmada nada menos que en algunas colecciones de Daredevil y X-Men, sin duda de entre lo más cotizado de la Casa de las Ideas.
     El perfeccionismo de su trabajo que busca un realismo que lo acerca a artistas como Alex Ross y J. G. Jones, lo ha convertido en uno de los portadistas más solicitados del noveno arte, pudiendo mencionarse sus bellas portadas para las tres primeras miniseries basadas en una de las novelas de Stephen King más emblemáticas: Apocalipsis (título al que me referiré dentro de poco en este blog). Ello para Marvel.

7.2- El Comic.

      El conflictuado y violento Rorschach es sin dudas uno de los mejores personajes de la creación original de Alan Moore y Dave Gibbons, debido justamente a su personalidad psicótica que lo convierte en un tipo que si no fuera por su fuerte sentido del deber, sería un psicópata más…y uno de temer.  Con su visión del mundo casi maniquea, en la que no hay perdón para los villanos y sus hábiles métodos de detective, si bien está inspirado en Question de la desaparecida editorial Charlton (que fagocitó DC), es una especie de cruce entre el Castigador y Batman.  Su dura infancia que lo marcó de por vida y su posterior opción justiciera que luego lo lleva a vivir apartado de la misma humanidad a la que ha jurado proteger, lo convierte en un sujeto carismático pese a no ser el alma de la fiesta.  De este modo contrasta con alguien como el Comediante, un tipo apuesto, sexy y siempre con una sonrisa, que no deja de ser un criminal más con permiso para matar, a diferencia de este otro sujeto amargado que se esconde bajo una máscara que causa temor, poco atractivo y que pese a todo quiere lo mejor para la gente.   
     Azarrello escoge muy bien la ambientación de su guión, llevando la historia al New York de los setenta, callejero, sucio y nocturno, lleno de delincuentes, prostitutas, proxenetas, drogadictos y personas en general de rostro endurecido.   Es así que en medio de este escenario nos encontramos con un Rorschach que trabaja en solitario, mientras anda detrás de un asesino serial que escoge entre sus víctimas solo a mujeres (siendo que nuestro protagonista posee un verdadero punto débil hacia las féminas indefensas y abusadas).  Por otro lado, en su camino se cruza un mafioso con aspecto de verdadero villano de cómics de superhéroes, toda una contrapartida en plan malvado al reservado y algo escuálido vigilante. 
     La trama ahonda en la soledad del protagonista, quien ha optado por no tener amigos, ni siquiera socios tras una temporada trabajando junto a Búho Nocturno.  Es así que la inclusión de una dulce mesera, con la que parece hay una especie de atracción entre ambos, que el argumento se vuelve mucho más fuerte a la hora de ahondar en la desgraciada vida de este hombre.
     Se trata de una de las novelas gráficas más violentas e impactantes de esta colección, sin un ápice de humor y en la que el acompañamiento gráfico de Bermejo aumenta sin dudas la crudeza de esta obra, que a mi humilde parecer es una de las mejores de Antes de Watchmen.   En ella el uso de tonos oscuros y las hermosas portadas (bastante ingeniosas por cierto dos de ellas, a la hora de jugar visualmente con la máscara del protagonista) para sus cuatro números, hacen de esta miniserie una verdadera delicia para los lectores.
     Para seguir la atmósfera de los lineamientos orquestados por los creadores originales, su sucesor mantiene la idea del diario de Rorschach.  Por lo tanto, tal como ya pasó con el de Ozymandias, se nos permite conocer de primera mano su propia psiquis, lo que significa adentrarse en su propia visión de mundo y que lejos lo diferencia pese a las cercanías al mencionado Ozymandias.
     Por último, debe mencionarse el hermoso homenaje y/o guiño que realiza Azarrello al filme de culto de Martin Scorsese Taxi Driver, hecho solo para cinéfilos, en unas cuantas viñetas donde Rorschach y el taxista interpretado por Robert de Niro en el filme tienen un muy interesante diálogo.  Tal momento no es gratuito y ubica de mejor manera al personaje del cómic, entre las grandes historias de los últimos tiempos. 

El homenaje a Taxi Driver.

Los Blogueros que admiro. Cuarta Parte: Ricardo Ruiz de "Insomnia".

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       Con Ricardo Ruiz tengo el gusto y el honor de mantener una amistad virtual o a través de las redes sociales, desde hace más de veinte años ¿Podría acercarme más bien a las dos décadas de contacto? Es muy probable que así sea.
       Mucha agua ha pasado bajo el puente desde que supe de Insomnia, no la película de Cristopher Nolan, ni el libro de Stephen King, pero sí una página dedicada a la vida y obra de este autor.  Recuerdo que fue un amigo de infancia quien me contó de este sitio y de inmediato motivado por el interés me metí a la red y me encontré con una serie de textos sobre mi autor favorito, sus obras literarias, películas y series basadas en sus trabajos y mucho, mucho más; todo ello en una época ya pretérita, siendo para mí todo un cofre de información, como no podía encontrar en otro lugar. 
        Ni tonto, ni perezoso envié un correo a la revista, preguntándoles si podía contribuir a la lo que hacían con algún trabajo mío y así fue que tuve la suerte de que sin dudarlo Ricardo, su creador y director me dio tal oportunidad, de modo que al poco tiempo tuve la dicha de ver publicado el primero de mis escritos hechos para tales efectos.   Desde aquel entonces varios de mis textos han aparecido en sus páginas.   Sin embargo hoy en día vez que incorpora algún otro documento de mi autoría, lo saca directamente del Cubil del Cíclope, que tiene todo mi permiso.
        Puedo afirmar sin tapujos que fue a través de Insomnia y la gestión de su creador que comencé a dar rienda suelta a esta faceta mía, que luego dio paso a mi propio blog.  De hecho, comencé a utilizar mis antiguos escritos para esos primeros meses del Cubil, aunque antes para ello le dije a Ricardo (que lo cortés no quita lo valiente) que deseaba tenerlos en mi nuevo proyecto.
        Poco tiempo después de mi primer correo enviado a RAR, intercambiamos cuenta de Messenger (¡definitivamente eran otros tiempos!) y gracias a ello pude charlar con él vez que nos encontrábamos conectados.  Gracias a esto fue posible saber del uno y del otro, más allá de la pasión por nuestro escritor favorito.
         Al ser de países hermanos, pudimos mandarnos mutuamente películas grabadas en DVD, en una época en la cual aún no era tan fácil descargar de Internet tanto material.  Recuerdo la alegría con la que recibí en esas dos ocasiones distintas sus encomiendas, que no solo se trataba de “material kingniano”.  Me dio mucho gusto conocer su letra, que para un romántico de la escritura como yo esos detalles son valiosos.
        Hoy en día si bien nos tenemos en Skype (que ya ni uso), la comunicación que mantenemos es a través de correos (¡Oye, RAR, ahora tengo “Feisbuk”, así que agrégame al tuyo, “si a bien tienes”).  Por lo que vez que tengo noticias tuyas, las atesoro tal como me sucede con el resto de la gente que me es importante.
        Quienes me conocen, bien saben lo vanidoso o exhibicionista que puedo ser, así que vez que puedo pongo alguna foto mía por ahí.   En cambio Ricardo no es como yo, así que aunque hayan pasado años desde que supimos de nuestra existencia mutual, nunca había visto cómo es y solo gracias a esta entrevista (y a que ha sido tan amable de mandarme fotos suyas, como de su gente, para compartirlas con ustedes), recién ahora puedo darle un rostro a mi amigo.
           Tal como me ha pasado con otras entrevistas que he hecho (que en todo caso ninguna de las que he subido a mi blog han sido presenciales), he disfrutado mucho leyéndola, pues además me ha permitido conocer mejor a quien tanto aprecio.  Espero la gocen tanto como yo.

Ricardo en el Festival de Literatura Negra Azabache (Mar del Plata).


1    1.  Preséntate en no más de 200 palabras.

Me llamó Ricardo Ruiz, pero muchos me conocen por RAR. Ese nick, que son mis iniciales, quedó desde los comienzos de Internet. Nací y vivo en Mar del Plata, Argentina, con mi familia. Soy Analista de Sistemas y me dedico profesionalmente a eso. Mi principal hobby es la literatura, en especial la de terror y de ciencia-ficción. Dentro de esa pasión que comenzó siendo simplemente un lector, está el ser director de la revista INSOMNIA, dedicada al universo de Stephen King, proyecto que comenzó en 1998 y continúa de forma ininterrumpida  hasta el presente. Mi tarea ahí no es difícil, ya que los colaboradores hacen fáciles las cosas. Además, he aportado mi opinión  sobre King y sobre estos géneros que tanto nos gustan en varios festivales literarios y en algunas columnas radiales. Creo que, en un mundo dominado por lo inmediato y el zapping (en todos los sentidos), es importante fomentar la lectura de libros.

2. ¿Cómo fue tu que nació tu aprecio por Stephen King?

Yo nací en 1970, por lo tanto cuando era chico no había tantos elementos de distracción como hoy (Internet, películas on line, Playstation, etc.), por lo que era habitual acudir a libros como una de las formas primarias de entretenimiento. Así comencé a leer mis primeros libros, entre los que se encontraban algunas novelas de Julio Verne, autor que recomiendo de forma determinante. Entre aquellos primeros libros pronto aparecieron los bolsilibros de terror, de las editoriales Bruguera o EASA. Era la serie B de la literatura, pero eran geniales. Hoy día son objeto de culto, y los tengo en alta estima porque contribuyeron a que mucha gente lea. Se compraban en los puestos de diarios y revistas. El interés por el terror luego derivó en Stephen King, presencia permanente en las librerías (era imposible no sentirse atrapado por sus portadas), y me compré algunos libros (Cementerio de Animales, Cujo). Pero el primero que leí que fue uno que me prestaron, Salem’s Lot. Y fue un shock. A continuación me pasó lo que a muchos otros…. quise seguir leyendo todos los libros de ese autor. Y siguieron Cementerio de Animales, Ojos de Fuego, Carrie... y acá estamos.

3- Cuéntanos acerca del origen de INSOMNIA.

En los años 1993-1994, pleno auge de la red Fidonet, los que teníamos acceso  a una computadora con módem, nos comunicábamos con las BBS e intercambiábamos información. Eran los foros de opinión de la era prehistórica. Dentro de algunos de aquellos canales, ya debatíamos sobre series como Star Trek o Twin Peaks. Y yo enviaba un boletín de texto sobre novedades literarias y películas que se llama “Noticias desde la Zona Muerta”. Años después, con la popularización de Internet, me gustó la idea de retomar ese boletín/revista. Era el año 1997, y los libros de La Torre Oscura me habían vuelto a fanatizar con la obra de King. Por lo tanto decidí que se iba a dedicar exclusivamente al autor de Maine, y que se publicaría mensualmente.  Así que en enero de 1998 se editó el primer número, muy rudimentario y de pocas páginas, con información traducida del inglés y artículos “copiados  a mano” de revistas que tenía. Luego empecé a contactar a otros webmasters que en ese momento tenían páginas sobre terror, y varios de ellos ya eran colaboradores en el segundo número. Así arrancó INSOMNIA, y así sigue hasta hoy.

4- ¿De qué trata tu blog?

Bien, dejame aclarar este tema, Elwin. INSOMNIA es una revista en formato PDF. Pero está contenida dentro de un sitio web (www.stephenking.com.ar) que contiene mucha otra información sobre Stephen King (bibliografía, filmografía, videos, etc.). Y, a partir de una remodelación que hicimos este año, también incorporamos un blog de noticias. Son muchas de las noticias que luego se volcarán en la revista. Nuestro objetivo es que los lectores no tengan que esperar 30 días para saber de King. Todos los días pueden leer las últimas novedades. Y una vez al mes disfrutar la lectura de la revista, de forma más profunda. Tanto en el blog como en la revista solemos difundir otros autores y otras obras, pero nuestra objetivo siempre es enfocarnos en el universo de King.

Selfie en familia con su esposa, Marisol, y los chicos, Lucas y Rocío.

5- ¿Conoce King lo que haces junto al resto de tus colaboradores? ¿O al menos hay algún tipo de acercamiento?

Nuestro asesor editorial y colaborador habitual de hace muchos años, Ariel Bosi, tiene fluidos contactos con gente allegada a Stephen King, su oficina y sus editores. Y todos ellos saben que hay gente “devota” por estos lados. Por lo tanto algo conocen. De todos modos, es preferible que King no se distraiga con nuestra revista y que siga escribiendo nuevas historias.

6- ¿Qué satisfacciones te ha traído lo que haces?

Muchas, sobre todo en lo que respecta a conocer a personas de distintos países que hoy día son grandes amigos. Y el descubrir a gran cantidad de escritores, ilustradores, artistas… que de otra forma no los hubiese conocido nunca. En la revista colabora de forma permanente gente de Argentina, España, Chile, México, etc. Es todo muy plural.

7- ¿Cuál es la cercanía de tu gente (pareja, familia, amigos…) con tu labor en INSOMIA?

Mi familia lo tolera bien, ja ja, me ven todos los días trabajar horas en la revista. Pero no participan en la misma, salvo como lectores ocasionales. La excepción es mi esposa Marisol, que una vez colaboró con una traducción de un artículo en francés. Y que, obviamente, me acompaña a todos los eventos relacionados con la literatura y los estrenos de cine. Tanto a ella como a los nenes (ya adolescentes) les encanta mirar las películas de Stephen King.

8- ¿Cómo es el proceso que tienes por lo general para sacar cada número de la revista?

La revista sale generalmente el primer o segundo día de cada mes. Cada número comienza a elaborarse 40 días antes, diagramando las notas y secciones que contendrá. Ni bien se edita un número, nos ponemos a trabajar en el siguiente, que ya fue pensado. Ahí comenzará el intercambio de mensajes con los colaboradores, para ir “apurándolos” con sus artículos, para que los tengan listos cuanto antes. Además de artículos de elaboración propia, también publicamos muchos artículos de otros medios que nos parecen interesantes. Tratamos que sea algo equilibrado.  El contenido de cada número es variable, pero generalmente intentamos darle el primer lugar a la actualidad de King, a hablar de lo que está pasando en ese momento.

9- ¿Cómo equilibras el resto de tu vida y con tu trabajo para la página?

No es muy complicado hacer esto y tiene una ventaja: hace que estés muchas horas en tu casa, prácticamente dentro de la computadora. Pero se compensa sabiendo dedicar tiempo a todo lo otro: familia, amigos, trabajo, recreación, etc. Me lleva diariamente casi el mismo tiempo que cualquier persona le dedica a su teléfono celular o a sus redes sociales. Esto último, en mi caso, trato de reducirlo al mínimo.

                            Los chicos acercándose al terror.

10- ¿Qué otros autores lees? Expláyate lo que quieras.

Son muchos. Cuando uno lleva tantos años como lector, aumentan los gustos literarios, tanto en géneros como autores. Indudablemente, están los grandes del terror: H.P. Lovecraft, Poe, Hope Hodgson, Peter Straub, Clive Barker, Dan Simmons, Ramsey Campell, Ira Levin, Richard Matheson, Anne Rice, entre muchos otros. Leo mucho terror de autores argentinos, entre los que destaco a José María Marcos, Patricio Chaija, Pablo Martínez Burkett, Celso Lunghi, y muchos otros. Lo mismo digo de autores españoles modernos como Juan de Dios Garduño, Javi Martos, Joe Alamo, etc. De la ciencia ficción, rescato las sagas Hyperion y Dune; y a autores como Alfred Bester y Robert J. Sawyer.  También me gusta el suspenso de autores como John Katzenbath, Ken Follet, Mark Frost y Katherine Neville. Hay muchos más, pero creo que esos son una buena muestra.

11- ¿Qué películas y/o series recomiendas? Danos tus razones.

Bueno, serían muchas, pero voy a reducirlo a tres opciones en cada caso. En primer lugar, recomiendo las tres películas que dirigió Frank Darabont sobre libros de Stephen King: The Shawshank Redemption, The Green Mile y The Mist. Creo que Darabont es el guionista y director que mejor ha entendido a King y que a su vez ha sabido llevarlo a la pantalla sin dejar nada de lado, manteniendo la esencia del autor y transmitiendo las mismas sensaciones que la historia original. Son tres películas que con el tiempo van ganando status de culto. Con respecto a series, recomiendo mis tres favoritas:  Star Trek - The Next Generation, The X-Files y Twin Peaks. Creo que las tres marcaron época y sentaron las bases de gran parte de las series que vemos hoy en día. Pero advierto que hay que sentarse a verlas sin apuro, con tranquilidad, y dejar que los acontecimientos y los personajes se desarrollen. Hoy en día, por suerte, hay muchas series de calidad sobresaliente, pero también existe por parte de los espectadores demasiada expectativa y ansiedad: si nos gustan dos o tres episodios, se deja de ver la serie. Muchas veces hay casi una una especie de zapping entre series, sin profundizar en ninguna.

12- ¿Algún texto favorito de los que has publicado en la revista? ¿Por qué?

Es una pregunta que me agarra desprevenido. Casi no hay artículos (propios o de colaboradores) que no me gusten. Si hay algo que no me gusta, no se publica y listo. Pero para no dejar la pregunta  sin responder, tengo un especial cariño por todas aquellas entrevistas propias que hemos logrado hacer en INSOMNIA, desde genios como Peter Straub o Bernie Wrightson, pasando por decenas de escritores argentinos, españoles y de otros países de habla hispana, hasta otras personalidades del mundo King.

  Buscando libros en El Ateneo (Buenos Aires).

13- ¿Cuáles son tu libro favorito, adaptación al cine y para la televisión de King? ¿Por qué?

Mi libro favorito es IT y creo que lo será siempre. Pienso que esa novela es la esencia del terror moderno. Como adaptación al cine, me quedó con la ya mencionada The Green Mile. Creo que el ensamble de actores es fantástico y que Darabont es el único director que logró que hasta tengamos simpatía por un ratón. Con respecto a la televisión, te nombro dos miniseries: 11/22/63 y Storm of the Century. La primera porque realmente adapta muy bien una gran novela a un ritmo televisivo moderno sin perder la esencia (invito a los lectores a que profundicen con el gran análisis que has hecho en este blog) y las segunda porque el personaje de Andre Linoge es realmente espeluznante.

14- ¿Alguna edición especial o más querida que tengas de tu autor favorito?

No soy de comprar muchas ediciones especiales, y tengo pocos títulos de King en inglés. Pero mis ediciones favoritas son de dos libros sobre King: Knowing Darkness (que recopila décadas de arte sobre la obra de él) y The Stephen King Illustrated Companion, de Bev Vincent, que incluye folios que contienen copias facsímiles de escritos del autor de Maine. Son dos objetos de arte.

15- Para finalizar… ¿Qué le dirías a tus futuros lectores para animarlos a adentrarse en INSOMNIA?

Bueno… si son lectores de Stephen King, encontrarán una revista hecha con mucha seriedad y profesionalismo, con análisis, noticias, críticas y un largo etcétera. Con casi 20 años de trayectoria. Y a los que no son lectores de King… que no duden en acercarse a alguna obra de ese autor, tal vez el más importante de las últimas décadas. Y, para terminar, me gustaría invitar a todos a que nos contacten en www.stephenking.com.ar, que nos envíen sus artículos y cuentos para publicar en la revista. Siempre nos gusta tener nuevos colaboradores.

Parte del staff de INSOMNIA en la Feria Internacional del Libro 2017 (Buenos Aires): Ricardo Ruiz, Ariel Bosi y José María Marcos, durante la presentación del libro de Bosi, Todo sobre Stephen King.

Frida, la mascota. Una gata tan temible como Church.

El placer de las historias cortas (segunda parte).

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       Continúo con mi análisis de El Bazar de los Malos Sueños.

11- Herman Wouk todavía vive: Una de las historias más hermosas y conmovedoras de esta colección, corresponde a esta obra que se aleja por completo de la temática habitual de su autor (aunque no en un 100%), debido a su realismo y que sin embargo comparte como buena parte del resto del trabajo literario de King, un tema tan peliagudo: la muerte. 
      La maestría literaria de su autor se despliega en esta pieza, al contarnos desde dos frentes distintos la vida de un grupo de personas, que no pueden ser más distintas entre sí (por un lado la de dos mujeres jóvenes, cuyas vidas son por completo miserables y la de una pareja de poetas ya ancianos,  quienes llevan décadas amándose felices en su manera peculiar de ser), las que terminan cruzándose de la manera más trágica (y aun así, el artista nos sorprende porque no todo pasa tal cómo esperábamos).
      El extraño nombre de este relato que aparentemente resulta hermético a la hora de ver su sentido, es nada menos que una invitación a apreciar la vida en todo momento, ya sea estando en la veintena de la existencia o ya llegados a la “tercera edad” (lo que nuestro querido tío Steve bien nos lo ha demostrado, al seguir manteniéndose vigente día a día con sus escritos).

12- No anda fina: Corresponde a una ficción que nos recuerda a sus lectores constantes clásicos suyos como La Primavera de Fresa, perteneciente a su primera colección de cuentos, El Umbral de la Noche.  En esta ocasión, el escritor vuelve a abordar lo escabroso de la psiquis humana, a través de un narrador protagonista al que solo al final llegamos a conocer (casi) por completo. 
     Los papeles que cumplen la violencia, la locura y, otra vez, la muerte en la humanidad, no dejan de manifestarse en la narrativa kingniana, para terminar una historia que en ningún momento se sabe hacia dónde va y que sin embargo acaba como muchos de estos cuentos “breves”: en absoluta sorpresa…Pues la vida misma es así, ya que nunca tenemos un control absoluto de lo que esta nos depara.

13- Billy Bloqueo: Otra novela corta para disfrute de sus lectores, si bien parte de su temática resulta bastante alejada a la realidad de sus seguidores hispanoamericanos, como de otros lugares del mundo.  Y es que esta obra gira en torno a algo de lo cual King es un acérrimo fanático, el bésibol, deporte tan gringo que al menos ya antes una vez estuvo presente en sus historias a través del libro La Chica que amaba a Tom Gordon y que luego plasmó en dos especies de ensayo: Faithful (coecrito con Stewart O`Nan) y Cabeza Abajo. De este modo, la verdad, no es inaudito en su bibliografía que se refiera a esta disciplina, si bien para quienes nada sabemos al respecto, tanta descripción sobre sus juegos pueden resultar confusas y hasta aburridas.  Sin embargo Stephen King sabe atrapar a su auditorio, ya que no se trata solo de una narración deportiva, sino que resulta mucho más compleja de lo que parece.
      Editado originalmente en solitario en un solo tomo (con una portada preciosa más encima), viene a ser otra de las razones para querer leer esta antología.  Y es que posee un argumento que independientemente de si a uno le gusta el béisbol o no, atrapa al público, en especial cuando comienza a develarse el misterio de su protagonista: un as en este deporte, de quien nada se sabe y que no deja de llamar la atención por las pocas luces que posee, además de despertar en los otros una enorme simpatía.  Sin embargo este muchacho guarda un secreto bastante especial, que al final acerca bastante esta historia al resto de la literatura de su creador.
      Llama la atención la manera de cómo está contado todo, pues como por lo general no es habitual en lo que hace, optó por un narrador testigo, quien conoció en su juventud al llamado Billy Bloqueo.  Por lo tanto tal como sí es recurrente en otros de sus títulos, el papel de la memoria y los recuerdos vuelven a estar presentes aquí y cabe recordar que el propio escritor ante cada uno de los escritos que componen este libro, hace uso de tal recurso para luego entregarnos sus ficciones.  De igual manera, resulta también interesante el carácter dialógico del cuento en sí o más bien de monólogo, ya que es este mismo testigo quien cuenta sus memorias a King (mientras este hacía de periodista para una pequeña revista, antes de hacerse escritor famoso), en un juego muy divertido con la misma realidad.

14- Pimpollo: La primera narración que le conozco a King donde uno de sus personajes principales es gay (y no lesbiana, ojo, que ya ha tenido protagonistas de esta minoría sexual, como ya pasó en Área 81, al principio de este volumen y en su novela La Cúpula).  De hecho, incluso en esta obra se permite referirse de lleno a la sexualidad entre hombres, al tema del VIH y todo de una manera por completo alejada de proselitismos, prejuicios y todo tipo de ideas que podrían haberle quitado su espontaneidad a la historia…que más encima no deja de poseer sus elementos sobrenaturales, tan típico de su autor.
      De igual manera nos encontramos con otros detalles que ya son característicos en la prosa de King, tal como lo son el ya mencionado ejercicio de la memoria y, muy ligado a ello, la presencia de personajes ancianos, quienes justamente en el otoño de sus vidas recuerdan otros tiempos.  A todo esto además se le suma lo relacionado con la muerte.  Es así que acá a través de la charla de dos amigos, uno heterosexual y otro homosexual que pasan sus últimos días en un asilo para ancianos,  se nos revela un misterio muy especial con el final de la vida. 
      Asimismo el valor de la amistad vuelve a ser retomado por el autor, quien en esta ocasión nos vuelve a dar bellos pasajes y en los que evidencia su aprecio por este tipo de relaciones, en las que la tolerancia, la confianza y los detalles para con los demás, quedan expresados como virtudes importantes para gozar la compañía de otros. 
      No puede dejar de llamar la atención la manera sosegada y sabia con la cual los mismos protagonistas asumen su propia mortalidad, todo en medio de un escenario que sin dudas es la antesala de su fin…Y no obstante tal como en muchas historias de este tipo, la muerte no es algo para temer, si no que corresponde a la antesala a algo más grande.

15- Tommy: El otro poema narrativo agregado a este tomo, que en este caso se aleja del tono épico del que le precedió (La Iglesia de Huesos), para acercarse más a la lírica de tono autobiográfico e intimista.
       Esta pieza trata sobre un amigo de juventud de King, quien como muchos de los muchachos de su generación en Estados Unidos, se vio inmerso en medio de la marea revolucionaria de la Guerra de Vietnam y el movimiento hippie por completo contrario a las políticas belicistas e imperialistas de su gobierno.  En cierto sentido es un texto acerca de la pérdida de la inocencia, marcada justamente por los cambios sociales de dichos años, los sesenta (tal como lo podemos ver en su estupendo libro Corazones en la Atlántida), la esperanza y un llamado más de su parte a apreciar la vida misma.

16- El diosecillo verde del sufrimiento: Para alegría de sus lectores constantes que amamos por sobre todo sus historias de terror, esta es una de ellas y una bastante divertida, que en la medida que van desarrollándose sus acontecimientos, va aumentando de manera considerable la tensión, hasta su genial desenlace.
     Un millonario joven ha sido el único sobreviviente de un accidente aéreo, si bien esto ha significado que su cuerpo haya quedado por completo destrozado y sufra bastantes dolores por ello.  Así es que contrata a una enfermera para que lo atienda de manera exclusiva y además mantiene una búsqueda de todo tipo de alternativa para contrarrestar sus malestares y mejorar de una vez.  Es entonces que llega hasta sus oídos la existencia de un pastor religioso, que tal como supuestamente muchos hombres de fe afirman, puede sacar de él de manera literal la causa de sus dolencias.
      Antes esta narración reaparece otro tema favorito de King, la fe (como en su novela Revival), el que en el caso de esta obra apunta a la contraposición entre las supuestas supercherías de los charlatanes religiosos que tanto abundan en su país, la incredulidad y la verdadera creencia en la existencia de Dios, como de un mundo metafísico.  Todos estos elementos se conjugan para mostrarnos tal faceta de la humanidad, tan relevante, como apreciada y despreciada por muchos. 
       Cabe destacar también la personalidad de cada uno de sus protagonistas: el millonario afectado, un hombre lleno de voluntad, que como muchos de los suyos cree que con el dinero lo puede conseguir todo, pero que para nada nos resulta odioso; la misma enfermera, quien se muestra como una mujer que se aprovecha de su paciente/cliente para sacarle toda la plata posible y sin embargo aun así mantiene ciertos principios morales, entre ellos su propia fe en los métodos científicos y médicos; por último, se encuentra el mismo pastor, un hombre ya mayor, de apariencia insignificante y humilde, quien resulta ser mucho más de lo que aparenta.   Queda demostrado a lo largo de este relato, cuál de todos estos tres personajes posee una fe que en realidad sobrepasa a la de todos los demás.

17- Ese autobús es otro mundo: ¿Podría ser este el cuento más débil de toda esta selección o al menos uno de los menos logrados? Quizás para ser más justos, corresponde al que menos me gustó de todos los que aquí se hayan, pues justo cuando recién se estaba poniendo interesante, se desinfla y baja demasiado la atención.  No obstante puede ser que esta pérdida de la maravilla se deba a su mensaje final…Que pese a lo extraordinario, la gente tiende a olvidarse de los demás y solo se interesa de lo inmediato, de modo que la monotonía y la falta de empatía parecen ser más fuertes que cualquier otra cosa.
     Un aburrido hombre de negocios hace un viaje de una ciudad a otra para ver si logra un importante acuerdo financiero.  Durante el último trayecto ahora en autobús (que en Chile llamamos simplemente bus o micro), se entretiene mirando por la ventanilla, cuando de pronto es testigo de un horrible suceso.  El sujeto se debate entre tomar protagonismo o no complicarse la vida.

18- Necros: Otro más de terror y que nos muestra a un King que sin dudas sigue siendo el llamado Rey del Terror, pese a sus coqueteos con la narrativa más realista. Por otro lado, por medio de esta historia estamos de regreso a un leiv motiv en el cual nuestro escritor es todo un experto: gente común y corriente que de repente descubre que posee habilidades extraordinarias…y mortales.
     Narrado en primera persona por medio de su protagonista, trata acerca de un joven egresado de la carrera de periodismo, que llega a trabajar por necesidad a una página web amarillista, especializada en sacar a la luz los “trapitos sucios” de los famosos, usando todo el humor negro y corrosivo posible.  Allí se encarga de una sección que cada vez se está haciendo más popular, en la que escribe los obituarios de personalidades fallecidas, aunque poniendo énfasis en sus defectos, todo con muy mala leche.  Un día molesto con su jefa porque no le ha querido dar un aumento, le hace en secreto uno de estos obituarios, lo que trae como consecuencia su muerte y de una manera para nada agradable.  Con el sentimiento de culpa a cuestas, le cuenta a la única persona de confianza que tiene en la empresa lo que ha hecho, pero en vez de ayudarle esto a sentirse mejor, le da una carga mayor que aguantar, ya que lo convencen para volver a usar su poder una y otra vez.
     Entre los aspectos interesantes y/o valiosos de este cuento, está la manera desenfada en la que describe el submundo de los negocios, en los que la gente tienden a comportarse como brutos y se pierde toda humanidad en beneficio de satisfacciones egoístas.  Por otro lado, es una obra acerca de la responsabilidad de nuestros actos, de modo que queda en evidencia la naturaleza moralizante de muchas de las obras pertenecientes al terror y que solo los más ineptos son incapaces de reconocer su capacidad para llevarnos a más de una reflexión.

El audiocuento tal  y como le gustan tanto a los gringos.
19- Fuegos artificiales en estado de ebriedad: La anécdota con la que el tío Steve nos introduce a este título, es tan entretenida como este, al punto de que nos muestran una faceta que sus lectores constantes conocemos bastante bien, pero que esta vez el artista lleva a mayores extremos: el humor…y del bueno e ingenioso.
     Un hombre y su madre llevan juntos un pasar más que tranquilo, gracias a la buena suerte y algo de inteligencia para administrar sus dineros, de modo que no tienen mayores necesidades y viven en una cómoda cabaña a la orilla de un lago.  Como buenos yanquis para la celebración del 4 de julio, festejan tirando al cielo una enorme cantidad de fuegos artificiales y de los que en su caso se sienten bastante orgullosos, debido al dinero gastado para dar un espectáculo de consideración a sus vecinos.  Todo va de lo mejor, hasta que una familia de italoamericanos los logra opacar con sus propios artificios, lo que inicia a lo largo de varios años una competencia entre qué familia consigue dar el mejor show.  Es cuando el protagonista logra dar con un sujeto que le puede administrar lo ideal para dejar con la boca tapada a sus contrincantes…Y en efecto esto resulta así, aunque como es de esperar las consecuencias escapan al control de uno.
      El relato no posee ni violencia, ni villanos, ni nada típico “kingniano”, solo nos presenta a individuos comunes y corrientes que desean satisfacer sus propios gustos, aunque sin tener que atropellar a otros.  Destacable viene a ser dentro de todo esto, la estrecha relación de verdadera fraternidad y complicidad entre madre e hijo, que da al cuento varios diálogos y momentos simpáticos.  De igual manera, valioso viene a ser la caracterización que hace King de la sociedad norteamericana como una comunidad cosmopolita, conformada por personas de distinto origen y que pese a ello pueden convivir en paz (en todo caso, esto de la heterogeneidad de los habitantes de Estados Unidos es recurrente en su literatura).



20- Trueno en verano: Habría sido formidable que nuestro autor hubiese terminado el libro con la historia anterior, no porque esta otra sea deficiente (que al contrario, resulta ser bastante emotiva), sino para acabar todo con un obra más alegre…Puesto que este último cuento es una narración acerca del fin del mundo, tal como ya lo ha abordado en textos pretéritos suyos tales como Apocalipsis, Celly su cuento El final del desastre, entre otros.
      Tras una guerra nuclear pocas son las zonas en el planeta que todavía quedan libres de radiación y es así que su protagonista es uno de los pocos sobrevivientes que hay a lo largo de una vasta extensión de territorio, teniendo de vecino a un hombre mucho mayor que él, con quien tiene una especie de amistad.  Asimismo lo acompaña un perro, el último verdadero compañero que tiene a su lado.  La vida de esa manera resulta casi hasta grata, hasta que se da cuenta de que tanto él como los otros dos seres vivos que conoce están enfermando.
      Un relato como este no deja de ser un llamado de atención para apreciar la vida que tenemos, en especial a la misma que gente que está a nuestros alrededor.  Pues como queda demostrado en esta obra y a través de nuestra propia experiencia, somos seres gregarios y necesitamos de otros para dar rienda suelta a lo mejor de cada uno.  No obstante tal como sucede en este cuento, ha sido nuestra propia incapacidad para mantener esas relaciones en paz, la que ha provocado una desgracia en masa como la descrita en esta obra.
       Conocido de Stephen King es su aprecio por alguien como Richard Matheson y por ello una vez más vuelve a homenajearlo, esta vez a través de la relación entre el protagonista y su perro, en medio de este “fin de los tiempos”; algo claramente inspirado en el mismo tipo de fraternidad que hayamos en el clásico Soy Leyenda de Matheson.

      En resumidas cuentas, El Bazar de los Malos Sueños es un libro muy recomendable, que puede ser tanto para que quienes no conocen a este autor se sumerjan primero en su narrativa breve, antes de dar el salto largo a sus obras más extensas y clásicas; como para quienes ya lo ubicamos (y seguimos) desde hace años y podamos constatar que Stephen King no ha perdido su talento.  Ahora bien, hay que ser sinceros, ya no es un autor solamente de historias de terror y/o macabras, pues se ha  consolidado lo suficiente como para abarcar otros terrenos literarios, en los que igual desde sus comienzos había incursionado, aunque ahora maneja con mayor soltura. 
      Para quienes gustan más de sus ficciones terroríficas, mayor placer pueden conseguir a través de sus primeras antologías y a la hora de evaluar cuál de estas resulta lejos mejor, en mi caso me decanto por El Umbral de la Noche y Todo es Eventual.  No obstante de que esta nueva antología suya (que espero de corazón no sea la última) es toda una joya y un agrado leer, lo es.

Graciosa caricatura de Stephen King junto a varias de sus creaciones.

El primer Spider-Man (tercera parte).

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      Tras haber hecho una síntesis de la primera etapa de nuestro Amistoso Vecino y luego revisar y comentar el primer tomo de los 3 dedicados a estas primeras aventuras suyas, editados por Panini al español en su colección Best of Marvel Essentials, es hora de seguir con el siguiente volumen.  Pues la verdad es que este es lejos superior al que le antecede, en parte porque como ya se ha tenido el tiempo suficiente como para desarrollar bien a su protagonista y a su entorno (tía May, sus compañeros de colegio y gente del Daily Planet, además de buena parte de sus villanos), es posible “jugar” más con las aventuras y desventuras de Peter Parker, creando con ello historias más complejas, entretenidas y dramáticas.  Por otro lado, en el dibujo su cocreador, Steve Ditko ha mejorado ya tanto a la hora de realizar las viñetas, que cada nuevo número resulta ser todo un gozo visual.  Por esto último, antes de ir de lleno a las historietas que componen dicho tomo, es hora de dedicarle unas cuantas líneas a este artista:

     Nacido en 1927 en USA, quizás no sea uno de los grandes dibujantes que haya tenido el mundo del cómic en material de superhéroes, pero sí nadie puede negarlo que le corresponde el lugar entre los que mayor influencia han tenido con el paso de los años.  Todo gracias a los personajes que creó, ya sean los dos que hizo junto a Stan Lee para Marvel, como lo son el mismo Spidey y, por supuesto, el Doctor Strange, como los realizados en solitario para Charlton Comics y DC.
      Pues estuvo en Charlton Comics antes, durante y después de su paso por la Casa de las Ideas.  Con esta empresa trabajó en cómics de ciencia ficción, terror y suspenso, en historias autoconclusivas para algunas de sus colecciones antológicas.  Muchas de estas historietas fueron hechas antes del desgraciado Comic Code, un sistema de autocensura que permaneció por décadas desde los sesenta en las empresas del rubro, para no causar espanto en la opinión pública, de modo que hoy en día pueden ser leída con mucho placer por sus seguidores gracias a sus ideas “atrevidas”.   Asimismo, de este periodo surgió uno de los superhéroes más populares, nada menos que el Capitán Atom, que realizó junto a Joe Gill.  Cabe destacar además de todo esto su desempeño para las colecciones de Konga y Gorgo, sobre dos monstruos de películas al estilo de Godzilla y King-Kong, bien populares por aquellos años (principio de los sesenta). En su segundo flirteo con Charlton realizó la mayor cantidad de personajes, que hoy en día algunos de ellos forman (al igual que el justiciero ya mencionado) parte de los grandes mitos de la historieta y en especial gracias a su traspaso a DC: Blue Beete (Bicho Azul) y Question (Pregunta).  Sin dudas estos dos personajes bastante singulares, el primero un superhéroe sin poderes y que se apoya en su inteligencia y cuerpo atlético para enfrentarse a los criminales y el segundo una especie de detective que usa una máscara sin facciones y que está obsesionado con las conspiraciones, están entre sus creaciones más queridas. 
      También debe tenerse en consideración su labor como colaborador de la editorial Warren, un estudio dedicado a las historietas de terror para adultos, en blanco y negro, que gracias a Dios habían optado por prescindir del Comic Code ya citado, de modo que ello le permitió a Ditko elaborar sus obras con más libertad. Fue así que Creepy y Eerie tuvieron el honor de contar con este maestro en sus páginas.
       Como muchos ñoños de los cómics sabemos, Steve Ditko comenzó a tener serias diferencias creativas y de ego con Stan Lee (quien incluso por décadas le negó la naturaleza de cocreador de Spidey), lo que lo llevó a abandonar por largo tiempo a Marvel.  Fue así que se fue a su gran competencia, DC (tal y como luego pasaría con el propio Jack Kirby), para quienes dio origen a Shade, el Hombre Cambiante, The Creeper y Halcón & Paloma,  sus personajes más famosos de esta etapa suya.  Sin embargo estas series bajo su tutela ni siquiera llegaron al número 10 de sus respectivas series, pues una vez más debido a los problemas con su difícil personalidad,  abandonó este nuevo “hogar” suyo bastante molesto.
Autocaricatura de Steve Ditko.
     En Marvel no solo fue uno de los artífices del Arácnido y del Maestro de los Artes Místicas, sino que antes de llegar a darles forma, estuvo también a cargo de sus propias series antológicas.  De igual manera al regresar a Marvel tras su decepción con DC, estuvo en nada menos que la colección de…¡Chuck Norris!, pero también en otras de mayor peso como Daredevil y Hulk, además de otras revistas, entre ellas Speedball, que también corresponde a su autoría.  Este otro periodo suyo en la Casa de las Ideas, comenzó a finales de los setenta y duró hasta la siguiente década; no obstante su entusiasmo ya no era el de antes y sus entregas no volvieron a tener la regularidad en el tiempo de antes.
      Otras editoriales consiguieron contar con su talento antes de que abandonara casi por completo el mundo de los cómics.   Entre estas firmas, que muchas de ellas han desaparecido, están Pacific, Red Circle, First Comic, Eclipse, Valiant y Topps.
       Y es aquí cuando llegamos a una faceta compleja y sin embargo interesante de nuestro artista: su compromiso con la ideología filosófica llamada OBJETIVISMO.  Salida de la mente de Amy Rand, consiste en todo un sistema de creencias que a la larga fueron apartando a Ditko de las editoriales y la vida pública, por lo que al adherirse a este comenzó a ver con muy malos ojos el control de las empresas del rubro y las que ahora le parecían verdaderos “saqueadores” de los “productores” (artistas) como él.  A esto se le sumaron varias desavenencias con sus colegas, que no solo las tuvo con Stan Lee.  De este modo al volverse cada vez más retraído y hosco, optó por negarse a dar entrevistas y a que se hicieran monografías y/o estudios sobre su biografía con su permiso, salvo honrosas excepciones (y ahora sabemos por qué en el actual boom de producciones Marvel y en especial Spider-Man, no ha aparecido frente a las cámaras).
       Debido justamente a su descontento con las editoriales, comenzó a acercarse a nada menos que varios fanzines (revistas de aficionados, unas más “profesionales” que otras) y así fue que nació una de sus obras más emblemáticas, aunque desconocida por la mayoría: Mister A, otro paladín bastante misterioso y del cual lamentablemente hizo pocas entregas, de no muchas páginas la verdad, en blanco y negro.  Debe saberse que este se caracteriza, en pocas palabras, por su visión maniquea del mundo, por lo tanto con los villanos es duro por completo y los llega a matar.  Además de este personaje, el resto de sus trabajos fueron haciéndose cada vez más personales, proselitistas y alejados del gusto popular… ¡Una verdadera pérdida para sus seguidores!

Los personajes de Ditko para DC.  De derecha a izquierda:
The Creeper, Halcón, Paloma (al cuarto no lo ubico), Shade y los otros dos también me son desconocidos.


        Y ahora a por las historietas:

1- The Amazing Spider-Man Nº 13, La amenaza de… ¡Misterio! (junio de 1964): Tal como dice su nombre, acá interviene el llamado “Amo del Ilusionismo”, sin dudas uno de sus mejores villanos y quien con su traje tan particular sin lugar a dudas que se ve aterrador (o al menos esa idea tengo de él cuando lo conocí de pequeño).  En esta historia se vuelve a tomar un tema habitual de los cómics clásicos del Cabeza de Red, ya que tal como pasó en su primer encuentro con el Camaleón, este otro malhechor se hace pasar por él, por supuesto para cometer sus crímenes y con ello volviendo a atacar uno de sus puntos flacos: la mala opinión pública que el justiciero posee.  La pelea entre los dos rivales en un estudio de cine sin dudas que resulta magnífica, ayudada por la capacidad del propio Ditko para hacer tan kinestésicas sus viñetas.

2- The Amazing Spider-Man Nº 14, La grotesca Aventura del Duende Verde (julio de 1964): Por fin aparece el más grande rival de Spidey y que con el tiempo se transformaría en uno de los personajes más importantes dentro de todo el universo marvelita, pues estamos hablando del original, Norman Osborn.  No obstante debe saberse que en ningún momento durante la etapa de Ditko y Lee se revela su identidad, ya que cuando se quita su traje, tal como pasa con Mary Jane más adelante, estratégicamente se tapa su rostro con algún objeto.  Varios son los elementos que se conjugan para esta verdadera pieza de antología, entre ellos el regreso de los Forzadores y además la aparición de nada menos que de Hulk, quien se presenta de la manera menos grata, ya que aparece malhumorado y deseoso de estar alejado de los “hombrecitos que lo molestan en todo momento” (recordemos que para esta época el Coloso Esmeralda es más bien una criatura que aún no ha desarrollado su intelecto y capacidad para sociabilizar).  De este modo, nuestro protagonista debe enfrentarse a todos ellos, lo que hace más difícil que nunca su labor.  Asimismo llama la atención la personalidad juguetona de este Duende Verde, que incluso puede caer hasta simpático por el momento, quien orquesta un plan para ganar dinero fácilmente y para ello ofrece nada menos que a Spidey ser su socio.

3- The Amazing Spider-Man Nº 15, Kraven el Cazador (agosto de 1964): Tal como dice su nombre y el de los dos números anteriores, corresponde al esperado debut de otro de los legendarios contrincantes del Hombre-Araña.  Sin embargo este villano en su personalidad, biografía y apariencia difiere bastante de los otros criminales a los que se ha enfrentado nuestro protagonista, pues se trata de un hombre ya famoso por sus “actos heroicos” como cazador y domador, quien en su obsesión por conseguir su mayor presa (adivinen quién), poco a poco va abrazando la senda del mal.  Por otro lado, podría decirse que en realidad su inclinación hacia el lado oscuro siempre estuvo latente en él, ya que de inmediato se le  ligó con otro rival legendario de Spidey.  El contraste entre la virilidad de Kraven, como alguien de acción y el adolescente Peter Parker, que aún sigue siendo un novato, pero que lo supera en astucia usando las mismas armas de su enemigo, hacen de este episodio otra joyita (de hecho, años después otro gran guionista, John deMatteis durante su etapa a cargo de algunas de las colecciones del Cabeza de Red, realizó un remake de esta célebre historia).

4- The Amazing Spider-Man Nº 16, Duelo con Daredevil (septiembre de 1964): Un nuevo team-up (serie de duplasen las que más adelante destacará el Arácnido) y esta vez tal como dice su nombre, viviendo una aventura junto al Diablo de Hell`s Kitchen, en lo que viene a ser el comienzo de una férrea amistad entre ambos.  En esta ocasión se enfrentan al Jefe de Pista y a sus bizarros compañeros del Circo del Crimen, quienes tienen su introducción en este número.  Tal como ya nos tienen acostumbrados sus creadores, las circunstancias que hacen que ambos superhéroes luchen entre sí, no pueden ser más divertidas y nos muestran otro tipo de maldad, de modo que en ningún momento cada nuevo villano que aparece es una copia del anterior, si no que siempre sus autores se esmeran por hacerlos complejos y atractivos.  De igual manera la contraposición entre las caracterizaciones y poderes diferentes entre ambos justicieros, hacen de este cómic toda una delicia.

5- The Amazing Spider-Man Annual Nº 1(1964): En más de 70 páginas, Lee y Ditko nos entregan lejos la que vendría a ser la historia más heroica del Cabeza de Red desde su debut, ya que en ella queda de manifiesto como nunca antes visto en su colección hasta el momento, que su valor como individuo radica en su propia humanidad y no en su llamativo traje, ni espectaculares poderes; en otras palabras, viene a ser su capacidad para sobreponerse a sus propias debilidades (entre ellas su inseguridad, falta de experiencia y miedos) lo que lejos lo convierte en el personaje que todos amamos tanto.  Es así que todo esto y más queda de manifiesto cuando Spidey debe salvar a las dos mujeres a quienes más ama, su tía May y su pareja de aquella época, Betty Ross, quienes han sido raptadas por los recién formados SEIS SINIESTROS, equipo integrado por sus hasta entonces 6 mayores villanos: Dock Ock, Misterio, el Buitre, Electro, Hombre de Arena, Kraven y Hombre de Arena.   Liderados por Doctor Octopus, estos patanes desean vengarse de su captor tras haberlos mandado a la cárcel e impedirles realizar sus actos delictivos (hasta el momento ninguno de ellos es un asesino).  Al respecto, resulta curioso y hasta agradable (en la práctica, algo digno de comedia), la manera agradable en la que tratan a las damas capturadas y donde la relación que nace entre el científico loco y tía May da pie a una serie de acontecimientos de lo más interesante.  Dentro de las maravillas de esta obra, están los cameos de varios de los otros justicieros de Marvel, entre ellos los Vengadores y los 4 Fantásticos.  De igual modo, como se trata de un evento muy significativo para la continuidad de Spider-Man, el dibujo de Ditko esta vez es tan cuidado y hermoso, que en general cada una de sus viñetas resultan ser de lo mejor visto hasta ahora; como cada uno de estos Seis Siniestros acuden por sí solos a su batalla contra su némesis, para ver quién es capaz de derrotarlo, en un determinado momento de estas peleas singulares, nos obsequia con una imagen en grande de ambos contrincantes, dignas de un afiche.

6- The Amazing Spider-Man Nº 17, El regreso del Duende Verde (octubre de 1964): El esperado retorno del Duende Verde, quien esta vez saca a relucir buena parte de su arsenal característico como no había sido antes (en el que se incluyen sus famosas calabazas explosivas y su murciélago deslizador). Su argumento enfatiza además la admiración de Flash Thompson hacia su ídolo, con una fe hacia este que va más allá de lo risible, si no que llega a ser admirable y habla muy bien de este.  De igual manera destaca la reaparición de la Antorcha Humana, quien deja claro en sus diálogos que ha comenzado también a apreciar a Spidey.  Los problemas de salud de la tía May vuelven a complicar a nuestro superhéroe, lo que nos permite encontrarnos con otro de esos cómics suyos, en los que el final no resulta ser victorioso para su protagonista y lo que nos lleva a mantener la identificación con este personaje, para quien como sucede en la vida real, pese a su enorme fuerza de voluntad, no siempre todo le resulta bien.

7- The Amazing Spider-Man Nº 18, El  fin de Spider-Man (octubre de 1964): El típico título ominoso de estas historietas, no es por completo engañoso, ya que como secuela directa del número anterior aborda un tema que luego será caro a las colecciones del Trepamuros: la posibilidad de renunciar a la vida de justiciero.  Al drama por el que pasa el afectado Peter, con sus cuitas ante los problemas médicos de su querida tía, no deja de estar presente el buen humor, en especial cuando este intenta sacar provecho económico de su alter ego y poderes.  Por otro lado, vuelve a salir el Hombre de Arena, así como Flash y la Antorcha Humana vuelven a tomar partido en la trama.  Esta verdadera crisis de conciencia por la que pasa el Hombre-Araña, solo será solucionada en la siguiente entrega, de modo que se podría decir que aquí frente a la primera “trilogía” de sus revistas.

8- The Amazing Spider-Man Nº 19, Spider-Man contraataca (noviembre de 1964): Una vez recuperada la confianza en sí mismo, Parker se dispone a arreglar sus asuntos pendientes, esta vez teniendo un mejor trabajo en equipo con la Antorcha Humana (que aún no está acostumbrado a codearse con sus colegas) y de paso volviendo a enfrentarse entre los dos con el Hombre de Arena, ahora líder de los Forzadores.  La historia termina con la aparición de dos misteriosos sujetos, lo que vaticina una nueva amenaza para el siguiente número, una que sin duda es todo un hito en la cronología de nuestro Amistoso Vecino.

9- The Amazing Spider-Man Nº 20, La llegada del Escorpión (diciembre de 1964): Tal como dice su nombre, se trata de nada menos que de la génesis de este otro importante villano, uno de los más retorcidos de entre los primeros antagonistas de Spidey.  No puede dejar de ser atractivo su nacimiento, ya que en ello se encuentra involucrado un destacado secundario de la serie (¿adivinen quién?).  En este caso estamos hablando de la fuerza bruta contra la inteligencia de Peter Parker, así como de una verdadera maldad cercana al tipo asesino.  La viñeta final del adolescente reparando con aguja e hilo su traje, resulta ser de igual manera memorable.

10- The Amazing Spider-Man Nº 21, ¡Donde vuela el Escarabajo…! (enero de 1965): Otro team-up con la Antorcha Humana, puesto que este villano originalmente combatió por con los 4 Fantásticos en su debut.  Con su reaparición en la serie regular de Spidey, este  justiciero por primera vez en su carrera se enfrenta a un criminal de tecnología super avanzada, por lo que todo esto le resulta sin dudas toda una prueba para su pericia.  Esta versión del Escarabajo sin dudas que posee el peor traje para un personaje Marvel de esta época, el que menos mal fue mejorado con el paso del tiempo. 

11- The Amazing Spider-Man Nº 22, ¡El Payaso y los Artistas del Crimen! (febrero de 1965): Vuelven a aparecer el Jefe de Pista y el Circo del Crimen, si bien de una manera algo distinta a la de antes, ya que esta vez el primero ya no lidera a sus compinches y en su lugar lo hace el llamado Payaso.  Se trata de una muy entretenida historia llena de enredos, con mucho humor y en la que más encima por primera vez en su vida Parker se enfrenta a una femme fatale (que más adelante una de ellas será de vital relevancia en su vida).  Asimismo, los miembros del Circo del Crimen en su heterogeneidad no pueden ser más llamativos, tratándose de uno de los primeros equipos criminales a los que se enfrenta el protagonista; de igual modo se podrían considerar como patanes de segunda, en comparación con otros, ya que sus habilidades (salvo la del Jefe de Pista) tampoco son gran cosa.

12- The Amazing Spider-Man Nº 23, ¡El Duende y los gansters!(marzo de 1965):Otra más del Duende Verde, quien ya se perfila como uno de los grandes villanos de Marvel, puesto que a diferencia de sus colegas, queda claro que lo que más ostenta quien está detrás de su máscara no es el dinero fácil…si no poder.  Por otro lado, este número reintroduce a Frederick Foswell, a quien en el primer tomo conocimos como el Amo del Crimen, siendo que trabajaba como periodista del Bugle, mientras en secreto llevaba una carrera delictiva.  A partir de esta historieta el rol de Foswell cobra un papel destacado entre los secundarios de la serie, dándonos increíbles sorpresas en el futuro.

13- The Amazing Spider-Man Nº 24, Spider-Man se vuelve loco (enero de 1965): Una nueva triquiñuela de Misterio, quien queda claro que está obsesionado con Spidey, ya que acá le juega una mala pasada que pone en tela de juicio su cordura, al engañarlo con sus sofisticados efectos especiales.  De igual manera, Flash Tompson vuelve a robarse nuestro corazón con su incondicional amor hacia su ídolo.

14- Strange Tales Nº 97, Adiós a Linda Brown (julio de 1962):El bonus de este tomo corresponde a una de esas tantas historias antológicas en las que intervinieron Ditko y Lee, antes de que comenzara la llamada “Era Marvel” con el surgimiento de los 4 Fantásticos.  Se trata de una emotiva y hasta nostálgica historia breve de fantasía con un final digno de La Dimensión Desconocida(programa que estaba emitiéndose por aquellos años en la TV gringa con muy buenos resultados de crítica y audiencia).  Sin embargo lo más llamativo de esta pequeña historia, es el aspecto de la pareja de ancianos que en ella aparecen, ya que son nada menos que las primera versiones de May y Ben Parker, los queridos tíos de Peter. 


Entretenida, pero no por ello deja de ser una gran decepción.

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ADVERTENCIA: Escribí esta entrada especialmente para aquellos que han leído la saga de LTO de nuestro querido Stephen King, que para quienes no lo hayan hecho o poco interés tienen en este autor, estas palabras les pueden parecer poco atractivas.

     Las palabras que dan título a este post las pensé bastante a la hora de ponerme a escribir acerca de mis impresiones sobre un filme que esperé, que esperamos por décadas los seguidores de Stephen King, y en especial quienes adoramos su famosa saga épica de fantasía oscura conocida como La Torre Oscura.  Pues mucho tuvo que pasar para que se concretara el proyecto largamente aplazado de llevar a la pantalla grande (o a la chica) esta serie de libros, que está considerada entre las obras más importantes de su creador.  Fue así que se bajaron en el camino importantes nombres como J. J. Abrams (director y guionista), Ron Howard (director y quien al final quedó como productor) y Javier Bardem (actor principal), para que al final nos encontráramos con una obra que pareciera salió demasiado rápido  y que más encima pertenece a un cineasta desconocido para la mayoría (Nikolaj Arcel), que por muchos premios internacionales que haya recibido, al parecer no se siente muy a gusto en el género al que corresponde una obra como esta…
      …Pero vamos por partes mejor…
      ¿¡4 guionistas nada menos que para armar una historia “alternativa” de poco más de una hora y media!? Me cuesta creerlo, más cuando entre ellos está alguien que respeto como Akiva Goldsman, uno de los artífices de esa  joya de la televisión que es Fringe(a excepción de su última temporada, claro).  Y es que habiendo tanto material original para sacarle provecho, pareciera que los responsables no supieron qué hacer con ello, nunca se pusieron de acuerdo con qué tomar y al final solo se quedaron con las migajas de una tremenda historia, que apenas llegaría al 10% de lo que ideó Stephen King por casi medio siglo de su vida.  Pues debe saberse en pocas palabras que para quienes esperábamos la traslación al séptimo arte de estas narraciones, ya sea del primer libro editado (El Pistolero) o de su precuela (Las Pequeñas Hermanitas de Eluria) o de los varios flashbacks entre medio de sus múltiples entregas, en realidad esto nunca sucedió y al final lo que llegamos a tener frente a nuestros ojos es una obra por completo distinta a lo que conocemos.  Así que hay que pensar mejor que la cinta no se hizo pensada para nosotros, sino que para el resto del público, que por supuesto apenas sabe de estos escritos o que para nada se ha leído algunas de sus entregas.

      Lo que más me molesta es que hay grandes filmes o películas hechas para la televisión y hasta miniseries e incluso series que toman sus propios rumbos y que hacen sus grandes cambios a la hora de ser adaptaciones de una ficción kingniana y  de las que nadie puede negar su calidad estética.  De tal modo dentro del primer apartado podemos mencionar verdaderas joyitas como lo son El Resplandor de Kubrick, Carriede Brian de Palma, Miseryde Rob Reiner o cualquiera de los tres largometrajes que ha hecho Frank Darabont de los textos de su amigo (La Redención de Shawshank, La Milla Verde y La Niebla), mientras que en el segundo encontramos Salem`s Lot del recientemente fallecido Tobe Hooper (ya se viene post dedicado a este) y la más reciente 22/11/63del mencionado J. J. Abrams; mientras que programas como La Zona Muerta y Haven ya son de culto. Razón por la cual tampoco pido una copia calcada a las páginas leídas, que para algo uno tiene imaginación, sin embargo sí pido respeto a nosotros los lectores constantes y en especial a la materia prima de la que se nutren superproducciones como esta.  Sé muy bien que un filme es una obra autónoma en sí, en cuanto a que cuando está basada en una historia previa; no obstante en el caso concreto de la película que hoy nos reúne, estamos hablando para ser exactos de una versión tan libre del material original, que me cuesta no sentirme traicionado.
      ¿Y a Stephen King le gustó este filme? Yo creo que solo fue caballeroso en quienes depositó su confianza y de paso siguieron engrosando su cuenta bancaria (que además le prometieron secuelas y hasta series de TV relacionadas); aunque tampoco tengo que estar por completo con lo que dice y hace mi escritor favorito, que para nada es ley en mi vida todo lo relacionado con él.
    Mucho me costó hacerme a la idea de un Rolando negro, que en todo caso racista no soy (pues entre mis personajes favoritos de ficción hay hartos de color, tal cual Tormenta de los X-Men, así como entre mis actores predilectos hay unos cuantos como Morgan Freeman o Samuel L. Jackson), pues ya me había ilusionado con alguien como Bardem haciendo del último del linaje de los Eld y bien tengo claro que cuando King creó a este personaje se inspiró en nada menos que Clint Eastwood (además de haberme acostumbrado a las distintas ilustraciones hechas para los libros y los cómics). Pues algo que me molesta mucho en estos gringos es lo extremistas que son y ello se ve hasta en el mundo de la ñoñería, donde ahora por dárselas de pluralistas llegan a exagerar con eso de ser políticamente correcto, como ya pasó con la igualmente decepcionante Spider-Man: Regreso a Casa(¿Asgardianos afros? Nunca voy a olvidar la sorpresa de Heimdall con tales atributos, interpretado por el mismo Idris Elba en la saga de Thor cinematográfica). Sin embargo opté por no ponerme tan dogmático e intransigente, además de que encuentro un buen actor a Elba…
No me aguanté las ganas de sacarme
una foto con este Rolando "alternativo",
que su traje fue lo que lejos más me gustó.
     Pero cuando llegué a ver la “dichosa” cinta, a medida que su cortísimo metraje se fue desarrollando, me encontré con un montón de detalles que me molestaron: En primer lugar le dieron una caracterización por completo distinta a su villano, el Hombre de Negro, acá bajo el trabajo de Matthew McConaughey, convirtiéndolo más en un mafioso, que en el sujeto misterioso del texto literario (ello obviamente para “enganchar” con el auditorio masivo).  Esta idea del gánster queda clara al otorgársele toda una organización de monstruosidades a su disposición para conseguir su objetivo; además trataron de convertirlo en un villano “simpático” con sus fechorías y diálogos, carente de la sublimidad que posee en la obra de King.  De igual manera no dejaron de darle demasiada relevancia a este villano, olvidándose de que el viaje emprendido por nuestro héroe va más allá de enfrentarse a este una y otra vez. 
      Luego tenemos lo que pasa con Jake, el niño que se ha convertido en el nuevo compañero del pistolero.  El filme comienza teniéndolo como centro del argumento y solo después aparece el verdadero protagonista.  Además hacen que sea este chiquillo quien termina por hacer que cambie Rolando, de pasar de una supuesta idea absoluta de venganza, a la gran cruzada que en realidad emprende para salvar a la Torre Oscura y con ello proteger el multiverso.  A través de esto me parece que le quitan valor a un arquetipo como Rolando, quien pierde heroicidad en esta adaptación, para convertirse en antihéroe, al no empezar con la determinación mesiánica que el resto le conocemos.  Al final terminan por centrar todo en la relación de padre-hijo entre el hombre y el muchacho, obviando un momento tan memorable en el primer libro, como cuando Rolando, obsesionado con su misión, decide sacrificar al chico.  De este modo se dejaron de lado varios de los momentos más recordados de la novela primigenia.
       De que entretiene este filme lo hace, pero se trata de una historia ligera, que no tiene gran espectacularidad que digamos.  Tiene buenos diseños, aceptables actuaciones, una agradable banda sonora y en general un trabajo técnico de calidad; no obstante teniendo en cuenta todo esto, ello fácilmente lo encontramos hoy en día en cualquier producto más barato (como cualquier episodio de alguna serie actual que nos guste, como Juego de Tronos).
       Originalmente tras salir de la sala de cine quedé satisfecho y me hice la idea de que iba a escribir una entrada alabando, pese a todo, esta Torre Oscura; no obstante he tenido tiempo para meditar al respecto y bien les digo a sus responsables…¡Así los pille Nyarlathothep!  Las versiones gráficas son lejos mucho más satisfactorias que este constructo mal orquestado.  En su momento pensé que con una versión extendida de la película se podían arreglar tantos entuertos; sin embargo ya no me siente muy dispuesto, que digamos, a dedicarle mi “valioso” tiempo a este bodrio.
        Espero no se me caigan también con It.


Como ya ha pasado, el trailer ofrece más de lo que da la película.

3 partidas, 3 pérdidas (primera parte).

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     Entre el 19 y el 26 de agosto recién pasado el mundo del arte tuvo que hacerse a la idea de no tener más entre nosotros a más de una importante personalidad del siglo XX y que aún podíamos tener por acá hasta bien entrado el actual milenio.  A una avanzada edad y con una carrera que se extendió por décadas, fallecieron Brian Aldiss, Tobe Hooper y Jerry Lewis en ese orden, artistas que en mi caso forman parte de mis recuerdos y a los que ahora mismo deseo homenajear con estas palabras.  Si bien en su vida estuvieron ligados a diferentes tipos de ficciones (el primero de ellos la ciencia ficción, el segundo el terror- aun cuando también incursionó en el otro género mencionado- y el último en las comedias), de algún modo todos ellos formaron parte de la historia del cine.  Pero mejor vamos por parte, que con cada uno de estos genios tengo una deuda.
      Originalmente esto iba a ser un post para subirlo todo de seguido, no obstante me quedó mucho más extenso y decidí dividirlo en dos, pues al final tenía mucho que contarles sobre mis remembranzas sobre estos tres artistas.  Pero del tercero de ellos, tengo mucho más que hablar, así que lo dejaré para dentro de un par de días.

 I- Brian Aldiss (18 de agosto de 1925-10 de agosto de 2017).

     Se trata de un importante escritor británico que en su juventud perteneció a la llamada Nueva Ola (New Wave), de la también conocida como fantasía científica, que en la década de los sesenta irrumpió con fuerza en el mundo literario con un novedoso estilo de narraciones, que alejadas de la ciencia ficción “dura” (la de tipo más científico como las hechas por gente como Isaac Asimov y Arthur C. Clarke), veló por abordar temas de tipo social y ciencias como la psicología y las socioantropología. 
     Con más de 20 novelas y casi una decena de antologías de sus cuentos, más otros libros de su autoría, en realidad no me he dado el tiempo de leerlo tanto como a algunos de sus colegas y eso que desde hace años que tengo de él su colección de relatos La Estrella Imposible y sus dos primeros libros de la trilogía de Heliconia (estos dos últimos en dos preciosas ediciones en tapa dura e inmensos volúmenes), todos ellos aún sin sacarlos de mi biblioteca para pasar el tiempo con ellos.
     Sin embargo sí no dudé en devorarme con avidez otros dos de sus trabajos: Frankenstein Desencadenadoy Los Superjuguetes duran todo el verano.  Leí primero el segundo que menciono en esta corta lista, pero supe de su homenaje a la obra magna de Mary Shelley siendo un adolescente, aún sin conocer el nombre del autor de esta novela, gracias a la preciosa adaptación que hizo a principios de los noventa Roger Corman. Estaba en el colegio cuando en una función nocturna de la TV chilena, tuve el gusto de por fin verme esta cinta; no obstante ya era un adulto cuando recién me conseguí el libro, en otra maravillosa edición en tapa dura de la editorial especializada Minotauro (no puedo olvidar la alegría que me embargó aquella ocasión, un viernes con una lluvia tormentosa, justo para el Día del Profesor).  Mi compra coincidió justo para un trabajo que estaba haciendo para mi Diplomado en Literatura, para el cual decidí analizar el impacto de la tragedia sobre Victor Frankenstein y su Criatura en la moderna literatura.
     ¿Y de qué trata esta historia? Pues en pocas palabras nos cuenta  sobre un científico del futuro, quien crea una máquina a la que considerada su máxima contribución a la Humanidad; no obstante dicho aparato se le va de las manos y provoca un agujero en el espacio-tiempo (o en la realidad), transportándolo a finales el siglo XVIII, a la ciudad de Ginebra, en Suiza, precisamente.  En el viaje conoce a gente como Mary Shelley y lord Byron y se entera de que los acontecimientos en torno a Frankenstein y su Monstruo son verdad.  Aldiss fue tal vez el primer especialista en este tipo de literatura, en defender la idea de que el texto de la Shelley viene a ser la obra seminal del género de la ciencia ficción misma; de este modo a través de este tributo suyo, a tan destacado título, presentó su mejor argumento para defender tal postura.  Tan solo a principios de este año me reencontré con la versión fílmica de la novela y esta vez la encontré mejor que nunca, gozando las actuaciones de sus intérpretes como John Hurt (quien desgraciadamente falleció ese mismo mes de enero) y Raúl Julia, entre otros.
      Mi historia con el otro libro suyo de los dos que le he leído es distinta.  Desde niño me he sido un admirador del cine de Steven Spielberg, a quien generaciones le debemos algunas de las fantasías cinematográficas y televisivas más recordadas desde los ochenta (incluyendo Encuentros cercanos del Tercer Tipo, que es de finales de los setenta).  Inteligencia Artificial (2001) fue su regreso al cine que lo hizo famoso en todo el mundo, luego de dos cintas de carácter histórico y realista, si bien para esta ocasión optó por dirigirse a un público más adulto, pese a tratarse de una especie de nueva versión del clásico de Pinocho.  Cuando vi por primera vez este filme no dejé de emocionarme (mi llorómetro subió harto esa vez y todavía hoy en día sigue activándose cada ocasión en que me la repito), pero más me entusiasmé cuando me enteré de que estaba basada en un cuento de Aldiss, quien ya no me era un extraño.  Saber, además, que un perfeccionista como Stanley Kubrick se había interesado en llevar a la pantalla grande el relato de su compatriota y que hasta hizo un guión, material que luego fue utilizado por Spielberg y su gente, me motivó más que nunca a conseguirme el dichoso escrito. De igual manera, que se llamara Los Superjuguetes duran todo el verano, no podía ser más atrayente para mí, así que apenas tuve la suerte de encontrarlo en oferta (en la Librería Chilena, en cuyas dos sucursales compro desde el siglo pasado a precios en realidad sorprendentes), me lo conseguí junto a otras narraciones breves de su mismo autor.  No puedo dejar de mencionar que la edición que poseo es feísima, con cero preocupación por hacer una portada atrayente y/o artística; no obstante en ella sale destacado en letras negras que contiene el cuento que inspiró a Spielberg y a Kubrick en su momento…Pero como dice el dicho “No juzgues un libro por su tapa”.  Por último, esta misma edición posee dos cuentos más relacionados con la historia que dio pie a Inteligencia Artificial.


Trailer internacional de Inteligencia Artificial.

2- Jerry Lewis (16 de marzo de 1926-20 de agosto de 2017).

      Era un niño en la década de los ochenta, cuando junto a mis papás me vi gracias a la televisión un montón de cintas de este llorado comedianteen varias sesiones seguidas (¿a razón de una por semana?), en el negocio que en aquel entonces tenían en lo que ahora es el living.  Las gozábamos en familia y luego las comentábamos (dentro de lo posible y considerando las posibilidades de mis propios padres, claro, que tampoco eran muy dados a la charla intelectual; no obstante gracias a ellos me transformé en quien soy).
       Los canales en ese periodo daban casi puras cintas “antiguas” y solo las noches dominicales estrenaban algo más reciente, por lo general muy cortado y tampoco estamos hablando de largometrajes que hayan sido producidos ese mismo año o el anterior.  En mi inocencia ignoraba de qué se trataban de obras que ya tenían su buena cantidad de años; no obstante para mí eran la novedad misma y no paraba de pasarla bien con ellas.  
       Vi un montón de las que hizo junto a Dean Martin, a tal punto que en determinado momento cuando comenzaron a exhibir las que luego Lewis realizó en solitario, me resistí un poco ¿Y dónde está el guapo Dean me pregunté? La verdad es que pese a que me entretenían mucho las películas de esta pareja, me molestaba que siempre Dean fuese el galán, inteligente más encima o avispado de los dos, mientras que Jerry Lewis hiciese no solo del gracioso, si no que de alguien idiota. 
      Tenía sentimientos encontrados con Lewis, pues para ser sinceros no encontraba gracioso eso de que se hiciera pasar por bizco (lo que en mi país llamamos turnio), pues yo mismo sufría de estrabismo en mi ojo izquierdo y bastante que sufría (no tanto por las burlas, sino por lo mal que me hacía sentirme cuando me pasaba esto, por lo general cuando me ponía nervioso o estaba muy agotado), de modo que para nada me parecía cómico este estado.  Además algunos de mis parientes más cercanos y conocidos me decían Jerry Lewis, ya sea por afecto o para molestarme y ello por supuesto que no me agradaba; de tal modo que paralelamente a la diversión que me provocaba este artista, también tenía un aspecto negativo para mí.  Tuvo que pasar un buen tiempo, ya llegado a la adultez para que me quitara este estigma, gracias a que por un lado me operaron de la vista y, por otro, desarrollé cierta personalidad (¿Y tal vez cierta “presencia física”?) para que se olvidaran de mi apodo.
       Siempre he dicho que mi memoria es frágil, pues olvido por lo general las historias (o sus detalles) muy rápido; lo que la verdad considero más bien una bendición, de modo que puedo volver a disfrutarlas como si fuera la primera vez.  Por lo tanto, solo recuerdo de todas estas películas de Jerry Lewis apreciadas en mi infancia a la llamada El Circo de 3 Pistas (1954), que vez que la pasaban en la tele me la repetía contento.  Me acuerdo de que no solo me hacía reír, sino que también llorar.  Y es que tenía una escena que para la edad que tenía y con mi corazoncito sensible, era muy dolorosa: un payaso borracho, celoso por el éxito del cándido artista interpretado por Lewis, lo humilla frente al público, golpeándolo una y otra vez... ¿Se acuerdan de esa poderosa imagen? Aunque nunca más he vuelto a ver esa cinta, todavía la tengo presente.
       De chico veía el show animado de Jerry Lewis, que ahora que lo traigo a la memoria puedo afirmar que era bastante surrealista, por no decir “lisérgico”.  En este cartoon Lewis era el protagonista y vivía rodeado de su familia, que estaba conformada por tipos tan raros como esta versión suya animada, cada uno de sus integrantes feos y caricaturescos, que en la práctica eran clones suyos.  De estos verdaderos freaks solo recuerdo a su tío inventor, que una vez hasta una máquina del tiempo hizo y lo llevó a la época de los dinosaurios.  Con mis hermanas gozábamos bastante de esta serie.
      Solo una de sus muchas películas tuve el gusto de ver en pantalla grande, Sueños en Arizona (1993), del director de “culto” Emir Kusturica, en plena época universitaria mía.  En tal época veía mucho “cine arte” e iba solo o con mis amigos de aquel entonces al cine Normandie, una sala fea que solo daba reestrenos, pero a la que le tengo mucho cariño.  Si bien esta obra posee un humor muy especial, fue todo un reencuentro para mí con este actor, pues su papel era más bien de tipo dramático, aunque quedaba de manifiesto en su guión que por parte de Kusturica estaba la intención de hacerle un tributo en vivo a tal leyenda viviente.  Esta preciosa obra estuvo entre las más apreciadas y comentadas por los circuitos intelectuales en aquellos años y me alegro de haber participado de la apreciación que se le hizo en su momento.
      Terminaré contando que Jerry Lewis sirvió de inspiración para la Teletón, importante iniciativa benéfica que desde 1978 vela por rehabilitar a niños y adolescentes en todo el territorio chileno, que tengan algún tipo de discapacidad física.  Pues fue en su país, USA, que el actor apoyó esta cruzada desde la década de los cincuenta, motivando a alguien como Mario Kreutzberger, más conocido como don Francisco, a fundarla y mantenerla gracias a las campañas que se hacen en el país casi todos los años.  De este modo para quienes sabemos de este activismo suyo social, difícil resulta no relacionarlo con esta organización, que en persona he aprendido a valorarla más que nunca, porque ha atendido gratuitamente a dos de mis sobrinos (uno de ellos a mi amado Brunito).


El genial opening de la serie de la que les he contado.

3 partidas, 3 pérdidas (segunda parte).

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3- Tobe Hooper (25 de enero de 1943-27 de agosto de 2017).


Nota: Se suponía que era un solo post para honrar la memoria de Brian Aldiss, Jerry Lewis y Tobe Hooper, quienes nos dejaron recientemente.  No obstante sobre este último tenía mucho que decir (quiérase o no, ha sido más importante en mi vida que los otros dos, sin desmedro de lo anteriores) y por eso he dejado aparte esta otra entrada...¡Y para que no me acusen de hacer textos tan extensos, je!

       No hace muchos meses atrás que le dediqué un post a la que tal vez su mejor película (y también la más famosa), Poltergeist y la verdad es que no pensé que este mismo año volvería a referirme a su director de manera directa en una de mis entradas.  De hecho, creo que su muerte es lejos la que más lamento de entre estas 3 muertes que hoy nos reúnen.  Pues a diferencia de los otros 2, este ha estado más presente en mi vida y justamente por mi amor hacia el cine de terror.  Como ya hablé bastante de mi experiencia con el filme sobre fantasmas mencionado, haré un repaso por otras de sus obras que para mí han sido significativas.
            Mi historia con Tobe Hooper comienza desde mucho antes que supiera de su nombre, que solo lo conocí como tal cuando era un adolescente y comencé a comprar mis queridas revistas Fangoria, gracias a un excelente reportaje acerca del cine de terror de los setenta.  Pero volvamos más atrás en el tiempo, cuando en esos mismos años ochenta con su programación televisiva anterior al cable y aún mucho antes de que existieran maravillas como Netflix, en la primera mitad de esa década dieron (no sé si por primera vez acá) La Noche del Vampiro.  Pues con este nombre se conoció en Latinoamérica la adaptación que hizo Hooper en 1978 de Salem`s Lot, la célebre novela de Stephen King.  Pues tampoco sabía quién era King, sin embargo sí tenía muy claro que deseaba ver esta miniserie.  No obstante no me dejaron verla, porque era obvio que me produciría pesadillas.  Solo casi una década después, cuando ya era un adolescente, tuve la suerte de poder verla en dos noches consecutivas…y esta vez ya sabía bastante del autor de la novela, ya que me había leído algunas de sus narraciones por esas fechas.  Recuerdo con mucha nostalgia todo esto, pues más encima las dieron en pleno invierno, temporada que siempre me ha sido ideal para apreciar este tipo de historias.  Solo diré al respecto, que la encontré soberbia y aún la sigo considerando una obra maestra, ya que posee escenas memorables que supieron aprovechar no solo un buen guión y unas actuaciones de primera, sino que todos los medios técnicos que tenían (humildes en comparación con lo que se puede hacer hoy en día) y que permitieron desarrollar por parte de Hooper una atmósfera enrarecida.
       Volviendo a la revista Fangoria y al artículo que salió en su segundo número de la primera época que tuvo en español, gracias a ella supe de una película llamada La Gran Masacre de Texas (1974), que fue prohibida en muchos países y luego supe que supuestamente en Chile también la censura no permitió que se exhibiera acá. Así fue que pasaron muchos años como para que recién pudiera verla.  Sé que fue en los noventa que por fin cumplí mi deseo, aunque no recuerdo si todavía estaba en el colegio o ya en la universidad; solo tengo presente que cuando por fin tuve en mis manos la edición en VHS de esta cinta de culto, estaba muy expectante y me preguntaba si sería capaz de verla entera…Y bien pude, que me gustó bastante.  No obstante debo decir antes que primero tuve mi cita con  su secuela, también de la mano de Hooper, que llegó primero a estas tierras en el formato recién mencionado.  Esta segunda parte tiene mucho de humor negro, razón por la cual el elemento más duro de la película original se pierde…Recuerdo muy bien esa ocasión, pues bautizaron a mi sobrino Alonso y nos vinimos a celebrar a casa.  Era un día sábado y estaba junto a mi concuñado Julio Yañez, quien por aquel entonces era mi mejor amigo.  Arrendamos varias pelis de terror y una de ellas fue esta.  El padrino de Alonso fue el mismo cura que lo bautizó, un tipo muy “choro”, como decimos en Chile, o sea, muy extrovertido y agradable.  Como Julio y yo estábamos encerrados en mi pieza en nuestra función de cine casero, entró para preguntarnos si estábamos viendo pornos; cuando supo que no era así se quedó más tranquilo, que las sangres y las tripas parece que para algunas personas son más aceptables que el sexo explícito.  Ninguna de las dos las he vuelto a ver, razón por la cual teniendo en cuenta que ya no tenemos entre nosotros a su realizador, tengo razones de peso para reencontrarme con ellas.   Hay una tercera parte que no la he visto, así como un remake, una precuela y creo que también una secuela de esta otra continuidad; las dos primeras las conozco y son verdaderas joyas.
      Otra vez llevando mis recuerdos a los nostálgicos ochentas, en las tardes de los domingos daban un programa sobre cómo se hacían algunas producciones hollywoodenses, lo que para este servidor era toda una oportunidad que no podía desaprovechar, pues no me llevaban al cine y todavía estábamos a años de que los videoclubes se popularizaran.  Estoy hablando de 1985, justo cuando nos visitaba otra vez el cometa Halley al año siguiente y aprovechando el interés por este acontecimiento, Tobe Hooper se encargó de llevar a cabo la versión cinematográfica de una novela de ciencia ficción y terror, que trababa acerca de una raza de vampiros muy singular, que estaba en suspensión en una nave espacial hallada en la cola del cometa por unos astronautas terrestres. El nombre del filme es Fuerza Vital.  Colin Wilson, un autor del cual lamentablemente solo he leído un puro cuento (lovecrafniano más encima…y que me gustó mucho), escribió la novela, aunque no le gustó lo que hicieron con su material, que terminó por convertirse en todo un clásico.  Recuerdo que mi profesora jefe de cuarto básico de aquel entonces (de la que estaba enamorado a la manera de los niños que admiran a sus maestros a tan temprana edad), la fue a ver y nos contó a todo el curso su argumento (omitiendo claramente sus partes más escabrosas).  Ya adulto recién la vine a ver y luego salió en DVD una versión extendida, todo un regalo para los más ñoños de la casa, que recomiendo mucho.  Mathilda May paseándose desnuda en buena parte de su metraje, chupando…la energía de sus víctimas, originó todo un panegírico de uno de mis amigos y que versaba sobre por qué era de vital importancia apreciar este largometraje.


Trailer de Lifeforce (Fuerza Vital).

      En el mismo programa del que ya les conté, también dedicaron uno de sus episodios a otra producción de ciencia ficción y horror de Hooper, Invasores de Marte (1986), el remake de una película de culto del mismo nombre de 1953.  Por mucho que me atrajeran los vampiros desde pequeño, al ser un niño el protagonista de esta otra historia, me sentí lejos mucho más interesado por ver esta otra, que creo nunca la estrenaron acá.  Solo gracias a los posteriores arriendos en VHS me fue posible ver este título también, que por años desee hacerlo.  Sinceramente la encuentro maravillosa y posee uno de los finales más aterradores que conozco, que luego de que me vi hace casi un año atrás la versión original, supe que era calcado a la peli más antigua; además creo que Hooper logró hacerle justicia, apoyado por un mayor presupuesto y los excelentes efectos especiales y el maquillaje que posee (de igual manera la escena de la profesora infectada o controlada por los marcianos, comiéndose una rana, que no está en la primera cinta, es de antología). 


       La Noche del Vampiro (también conocida como La Hora del Vampiro y El Misterio de Salem`s Lot) no fue el único acercamiento de Tobe Hooper a la narrativa de Stephen King.  Es así que en 1995 realizó la adaptación de uno de sus primeros cuentos, La Trituradora, contenido en su excelente antología El Umbral de la Noche.  Se trata de una historia bizarra acerca de la planchadora industrial de una lavandería… ¡Poseída! En el papel la ficción llega a ser, pese a todo, convincente y en la pantalla esta obra menor del director puede ser ridícula, pero es muy, muy divertida.  Gore como bien le gustaba hacer sus trabajos al cineasta, la recomiendo mucho, pues aunque no la me he repetido, la recuerdo con cariño y en especial por la dicha que sentí cuando la arrendé (y luego cloné) en DVD ya la década pasada. 
       Debo admitir que no he contemplado todas las producciones de este artista y ya es hora de hacerlo, para poder hacerme un juicio más completo de su labor; además de hacerme una segunda opinión con otras a las que nunca les volví a dar una nueva oportunidad, como Combustión Espontánea.
       En televisión también tuvo un papel destacado, aparte de la miniserie ya mencionada. Es así que se debe mencionar sin duda que fue quien tuvo el “honor” de encargarse del primer episodio de Las Pesadillas de Freddy. Estrenada en 1988, como un producto televisivo para explotar el éxito de la saga de películas sobre este personaje creado por Wes Craven, tuvo en total 2 temporadas y nada menos que 44 episodios.  Robert Englund volvió a hacer del asesino sobrenatural que le dio fama, siendo que al ser realizado el citado piloto por Hooper, actor y director se reencontraron tras haber trabajado juntos en Eaten Alive (1977) y con quien luego haría dos filmes más, Terrores Nocturnos (1993) y la ya mencionada La Trituradora; así que bien se podría decir que ambos eran amigos, puesto que no dudó en llamarlo para su primera contribución a Maestros del Horror: Danza de la Muerte.
     Dentro de este apartado se debe mencionar también su participación en un interesante proyecto para la pantalla pequeña de su amigo y colega John Carpenter: Bolsa de Cadáveres (1993).  La idea era que esta producción de terror y humor de carácter antológica y con 3 historias en su metraje, fuese el piloto de un nuevo programa de este estilo para la cadena de Showtime.  Lamentablemente la idea no fructiferó, pero bien podría decirse que tal vez fue para mejor, pues años después al siglo siguiente la empresa realizó verdaderas joyitas de historias del género: Maestros del Horror, para la cual ambos directores hicieron una entrega para cada una de sus dos temporadas.  Sin embargo me estoy adelantando y mejor vuelvo a este otro programa.  En este el mismo Carpenter hace de un muy gracioso presentador, pese a su naturaleza macabra, al más puro estilo de Guardián de la Cripta.  Las dos primeras historias tuvieron a su colega tras las cámaras, mientras que la tercera contó con la colaboración de Hooper, titulada Ojo y en la cual actúa nada menos que Mark Hamill, el recordado Luke Skywalker de la saga cinematográfica de Star Wars.  Asimismo Tobe Hooper se reservó un cameo humorístico, haciendo de uno de los dos médicos forenses, que se encargan del cadáver hablante interpretado por Carpenter.
     Siendo que Steven Spielberg quedó bastante contento de su labor con Poltergeist, filme de horror sobrenatural que escribió y produjo, lo quiso para la preciosa miniserie de ciencia ficción que creó en 2002: Taken.  La saga épica sobre 3 familias ligadas entre sí a lo largo de medio siglo por la presencia de los extraterrestres de Roswell, tuvo un espectacular comienzo gracias a la maestría de Hooper, quien también llevó a cabo su primer episodio.  De igual manera en 1987 el llamado “Rey Midas del Cine”, ya la había vuelto a contratar, para que filmara el último episodio de su serie antológica Cuentos Asombrosos(sobre un relato de Richard Matheson, Miss Stardust, el mismo escritor para el adaptó otro de sus relatos en Maestros del Horror).
     Con posterioridad en 2006, hizo su segunda contribución a Maestros del Horror con La Cosa Maldita, una potente versión del clásico cuento de miedo de Ambrose Bierce.
     De igual manera estuvo en otros shows televisivos como Cuentos de la Cripta y Dark Skies, puesto que si bien su cine era errático a la hora de, tal vez, mantener la misma calidad de sus mejores obras o realizar de manera más continua nuevas cintas, nadie podría discutir su enorme legado para Hollywood y el cine de terror mundial y por esa razón era satisfacción garantizada contar con él en la pantalla chica.   
      Su último largometraje corresponde Djinn (2013), una producción estadounidense-árabe sobre la rica mitología de este último pueblo…y que lamentablemente aún no veo.
      Sinceramente vamos a extrañar a este verdadero artesano de las pesadillas audiovisuales. 


Uno de los momentos más recordados de la versión de Salem`s Lot hecha por Tobe Hooper.
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