Whitley Strieber (1945) es un importante escritor de ciencia ficción, fantasía y terror, que pese a su destacada carrera, lamentablemente no es muy conocido en nuestra lengua española. Con más de 20 libros a su haber, que comprenden novelas, colecciones de cuentos y textos de no ficción, está considerado entre los maestros de la literatura de terror.
Uno de sus temas favoritos y sobre el que ha escrito bastante, corresponde al de las abducciones extraterrestres, de las cuales sabe más que muchos, puesto que tal como cuenta en su libro autobiográfico Comunión (1987), por años ha sufrido de esta terrible experiencia. El libro resulta ser bastante efectivo y puede llegar a provocar real miedo en el lector (de hecho cuando lo leí, claro que tenía 18 años en aquel entonces, tenía que rezar el Rosario para dormir en la noche tranquilo, je). A su vez se encuentra dividido en 2 partes: la primera trata acerca de las abducciones por las que pasó el autor y la segunda, un estudio histórico sobre casos que abarcan siglos y que bien pudiesen tener relación con el tema o que sin duda son claras abducciones registradas en los tiempos actuales. En 1989 se hizo un filme sobre esta obra, con guión del propio Strieber y con el protagonismo de un actor del talento de Cristopher Walken; no obstante la película pasó sin pena ni gloria y es por completo olvidable.
Otro de sus títulos que ha sido llevado al cine, corresponde a su novela sobre licantropía The Wolfen. A su vez su texto The Coming Global Superstorm, coescrito junto a Art Bell, inspiró el largometraje de ficción catastrófico El Día Después de Mañana.
Aparte de sus vivencias detalladas en el ya mencionado Comunióny sus 3 secuelas, experimentó otro evento de características extrañas: al ser visitado de manera inesperada una madrugada por un misterioso hombre, quien compartió con él unas cuantas revelaciones y las que inspiraron su libro La Llave (2001). Queda al lector decidir si todos estos libros suyos acerca de sus vivencias, son solo ficción disfrazada de la mejor verosimilitud propia de la narrativa y con el propósito de hacer más interesante sus trabajos o bien son el testimonio de una vida sorprendente.

El Ansia trata acerca de Miriam Blaylock, una sofisticada vampira con más de 2000 años de edad, quien proviene del antiguo Egipto. A su vez es una de las pocas sobrevivientes de su raza y ha perdido todo contacto con los suyos. No obstante para acompañarla en su inmortalidad, ha convertido a una serie de personas a su estado, aunque siempre de a uno, ya que estos tras unos cuantos siglos sufren un proceso de deterioro que los lleva a la locura y los transforma en seres monstruosos, condenados a pasar el resto de la eternidad en una especie de muerte en vida; de modo que una vez que acaba su periodo como vampiros, recién vuelve a crear uno nuevo entre gente a la que selecciona según sus intereses. Como Miriam desde un principio les ha prometido amor incondicional, guarda sus cuerpos en ataúdes, a los que visita regularmente en la buhardilla de su casa y les habla (¡Que idea más macabra! ¿No?). Preocupada ante su incapacidad de crear al compañero perfecto que no se desgaste con el tiempo, descubre un estudio científico de una doctora, quien aparentemente ha encontrado la receta para derrotar la vejez y, por ende, conseguir la verdadera vida eterna. Por lo tanto se decide conocer a esta mujer, seducirla y volverla vampira para tener juntas todo el tiempo de conseguir la receta contra su imposibilidad para hacer que sus parejas no sufran el mencionado proceso de deterioro. De este modo en la novela será esencial todo lo que sucede entre Miriam y la doctora Sarah Robert. Por otro lado, también presenta el drama de la actual pareja de Miriam, John, cuyo proceso de degradación es descrito en la narración de manera sobrecogedora.
Miriam pertenece a una especie que evolucionó en paralelo a la de los humanos, con una resistencia y fuerza superiores, siendo que además la luz del sol no los daña. No posee colmillos, por lo que usa armas blancas para herir a sus víctimas y luego beber su sangre; los cuerpos de estos luego quedan reducidos a meras piltrafas, los que luego quema en un horno en su hogar. Posee una lengua áspera, que según es descrita en el libro, recuerda a la de un gato. Ella y a quiénes convierte deben dormir un buen periodo cada cierto tiempo para renovar sus energías. A su vez el proceso de vampirización es efectuado mediante transfusión de sangre.
El nombre de esta novela queda más que claro en sus páginas, puesto que se refiere tanto al deseo irrefrenable por la sangre de los vampiros, como a la necesidad de Miriam de evitar la soledad ante su naturaleza extraordinaria. Miriam ama sin duda a cada uno de sus parejas, no obstante sus sentimientos poseen un carácter malsano, siendo no solo un compromiso incondicional, sino que también una verdadera maldición a quienes son condenados a un destino final tan lamentable. Pese a que se alimenta de seres humanos, lo que no necesita hacerlo todos los días, la protagonista admira en realidad a la humanidad por sus logros, que ha visto obtener a lo largo del tiempo.
Otro punto interesante de este más que recomendable título, resultan ser sus elementos de ciencia ficción, ya que el autor se permite explicar científicamente el vampirismo y su especial naturaleza. Todo esto aderezado con una atractiva teoría y datos propios de la más rancia fantasía científica “dura”. Por lo tanto, los métodos sobrenaturales como el agua bendita, las cruces y otros no tienen cabida en la trama a la hora de deshacerse de estos seres. A su vez destaca el enorme erotismo, el que incluso posee un carácter explícito y el que incluye, era de suponer ante las costumbres de Miriam, apasionados encuentros de lesbianismo A su vez se trata de una obra de terror que no vacila en describir gráficamente las salvajadas de los vampiros.
Como ya se dijo más arriba, Miriam en realidad se siente comprometida con sus compañeros, de modo que el libro se constituye además en una profunda reflexión acerca de lo que significa el amor para la gente; ya que aparte de considerar los sentimientos de la protagonista, se aborda la manera distinta que tienen para enfrentar sus relaciones románticas Sarah y su propia pareja, siendo la primera una mujer práctica y algo fría a la hora de expresar su amor y en cambio su amante corresponde a un hombre que requiere a cada rato expresar sin vacilaciones su pasión, por la mujer a la que ama. De este modo El Ansia corresponde por igual a las necesidades emocionales de contar con la presencia de un ser a quien amar (y lo cual tal como detallado en el libro, puede provocar las más increíbles acciones por parte de quienes quieren demasiado).
Ya sea por pura coincidencia o por influencia entre un autor y otro, esta novela recuerda a la ya mencionada Entrevista con el Vampiro de Anne Rice y sus secuelas, en especial La Reina de los Condenados. Primero cabe considerar que la obra maestra de la Rice fue escrita años antes que El Ansia, siendo que en ambas se presentan criaturas inmortales bisexuales y que bien pueden reflejarse en los espejos, siendo que además como ya se dijo más arriba no mueren con los métodos tradicionales (bueno, los de Anne Rice sí pueden ser eliminados con la luz del sol). No obstante La Reina de los Condenados es posterior al libro de Strieber y en ambos se ve que los vampiros provienen del Egipto de los faraones, siendo que además en estos dos textos (como en El Vampiro Lestat, la secuela directa Entrevista con el Vampiro) cobran vital importancia los flashbacks que cuentan el pasado de los personajes a lo largo del paso de los siglos, todo con un carácter digno de la mejor narrativa histórica.
Luego de años de haber escrito esta celebrada obra, su autor por fin retomó la historia de Miriam gracias a dos secuelas: El Último Vampiro (2001) y El Sueño de Lilith: Un Cuento de la Vida del Vampiro (2003). Lamentablemente como muchos de los textos del escritor, estos libros no han sido llevados a la lengua de Cervantes.
En 1983 se estrenó la versión cinematográfica de El Ansia, la cual fue la primera película del famoso director Tony Scott, fallecido hace pocos años. Si bien el filme en su momento no fue bien acogido por la crítica, rápidamente cobró un montón de seguidores, en especial entre los amantes de la llamada cultura gótica. Este efecto positivo entre este grupo de personas y entre quienes gustan de historias sórdidas y de vampiros, se debe en especial a la particular estética de la cinta: la cual posee cuidados escenarios, una vestimenta de alta costura en especial para Miriam y que bien recuerda a la típica femme fatale del cine noir y una fotografía en realidad sobrenatural, que invita a verse inmerso dentro de una historia de otro mundo. Otro elemento que la hace memorable para la cultura gótica, resulta la aparición del cantante Bauhaus, quien interpreta acá una de sus canciones y es todo un ícono entre esta gente. Considerando la “antigüedad” de esta obra, sus efectos de maquillaje resultan ser sorprendentes, en especial a la hora de mostrar el envejecimiento sufrido por John (maravilla que se debe al siempre solvente trabajo de Dick Smith, responsable de horrores clásicos como El Exorcista). Digna heredera de la novela que la inspiró, la película resulta ser bastante violenta y muy erótica, poseyendo una larga escena de lesbianismo que causó escándalo en su época e hizo que en varios países fuese censurada y/o cortada. Su final difiere bastante del de la novela, ya que posee un inesperado tono moralizante y que consiste en un horrible castigo para Miriam, debido a la condenación a la que ha llevado a sus distintas parejas. Por último, respecto a esta adaptación para nada despreciable, todo un valor agregado resulta ser el trío de actores de primer nivel que la interpretan: Catherine Deneuve, quien se ve hermosa, sexy y mortal como nunca en el papel de Miriam; una muy joven Susan Sarandon como Sarah y al versátil David Bowie como John.
En 1997 se estrenó una serie de TV basada en esta novela y de carácter antológico (historias autoconclusivas), aunque siempre en torno al tema del vampirismo. Tuvo 2 temporadas y 44 episodios en total, teniendo como “anfitrión” (presentador de cada capítulo) nada menos que al propio David Bowie en su segunda temporada. El mismo Tony Scott dirigió 2 de sus capítulos y en los guiones estuvo gente involucrada de la talla de Harlan Ellison, Popy Z. Brite y David J. Schow.